El opositor ruso y principal adversario del Kremlin Alexei Navalny murió este viernes en la cárcel del Ártico donde purgaba una pena de 19 años, informaron los servicios penitenciarios.
La Unión Europea considera que el “régimen ruso es el único responsable” por la muerte de Navalny, afirmó el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel.
Navalny “luchó por los valores de la libertad y la democracia. Por sus ideales, hizo el máximo sacrificio”, señaló Michel en la red X. “Los luchadores mueren, pero la lucha por la libertad no termina nunca”, añadió.
Por su parte, el presidente de Letonia, Edgars Rinkēvičs, fue tajante y no dejó lugar a dudas sobre lo que cree que sucedió: “Fue brutalmente asesinado por el Kremlin”, indicó en su cuenta en X. “Eso es un hecho y es algo que uno debería saber acerca de la verdadera naturaleza del actual régimen de Rusia. Mis condolencias a la familia y amigos”, agregó.
En tanto, el ministro francés de Exteriores, Stéphane Séjourné, afirmó que Navalny “ha pagado con su vida su resistencia a un sistema de opresión”, el del “régimen” de Vladimir Putin.
En un mensaje publicado en su cuenta de X, Séjourné ha señalado, refiriéndose al fallecimiento anunciado hoy por los servicios carcelarios rusos, que la muerte de Navalny, de 47 años, en una colonia penitenciaria “nos recuerda la realidad del régimen de Vladimir Putin”.
Por su parte, el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, aseguró que Rusia tiene “preguntas muy serias que responder” por la muerte de Navalny y también exigió a Moscú establecer todos los hechos sobre lo sucedido.
El primer ministro británico, Rishi Sunak, dijo que la muerte del opositor ruso es una “terrible noticia” y una “enorme tragedia” para el pueblo de ese país. “Como el más feroz defensor de la democracia rusa, Alexei Navalny demostró un coraje increíble a lo largo de su vida”, escribió Sunak en X; y agregó que sus “pensamientos están con su esposa y el pueblo de Rusia”.
El jefe de la diplomacia española, José Manuel Albares, exigió que se aclaren “las circunstancias” de la muerte del opositor ruso, quien falleció “durante su injusto encarcelamiento por motivos políticos”.
El premio Nobel de la Paz Dmitry Muratov manifestó a la agencia de noticias Reuters que la muerte de Navalny fue un “asesinato” y acotó que creía que las condiciones carcelarias habían provocado su fallecimiento.
Otra personalidad que se manifestó fue el canciller alemán, Olaf Scholz, quien calificó de “terrible” la información sobre la muerte del líder opositor ruso y dijo que éste pagó su valentía con la vida cuando regresó a Rusia tras recuperarse en Berlín de un envenenamiento. “Es algo muy desconcertante. Conocí a Navalny en Berlín cuando intentaba recuperarse” en una clínica de la capital alemana del envenenamiento que sufrió con un agente tóxico en 2020, señaló al inicio de una rueda de prensa con el presidente ucraniano, Volodimir Zelensky, quien está de visita en Alemania.
El primer ministro neerlandés, Mark Rutte, se mostró “muy consternado” por la noticia, que ilustra la “brutalidad sin precedentes” del régimen del presidente ruso, Vladimir Putin. “Muy consternado por la noticia de la muerte del líder opositor ruso Alexei Navalny. Ilustra la brutalidad sin precedentes del régimen ruso”, dijo en un mensaje en su cuenta oficial en X.
Según el político neerlandés, cuyo nombre suena con fuerza como principal candidato a ser el próximo secretario general de la OTAN, “Navalny luchó por los valores democráticos y contra la corrupción”.
Por su parte, el presidente de Ucrania, Volodimir Zelensky, país que sufre la invasión rusa, dijo que es “obvio” que Navalny fue asesinado por el régimen de Vladimir Putin, quien debe rendir cuentas por su muerte.
“Obviamente fue asesinado por el régimen de Putin. Como miles de otros que han sido torturados”, dijo Zelensky, añadiendo que esto demuestra por qué Putin debe “perderlo todo y responsabilizarse por sus acciones”.
En tanto, la Casa Blanca subrayó que, de confirmarse, la muerte de Navalny es una “terrible tragedia”. En declaraciones a NPR, el asesor de seguridad nacional, Jake Sullivan, añadió que la “larga y sórdida” historia del Kremlin de dañar a sus oponentes “plantea preguntas reales y obvias sobre lo que pasó aquí”.
Minutos más tarde, se expresó el secretario de Estado, Antony Blinken, quien dijo que Rusia “es responsable” del fallecimiento del opositor.
“Su muerte en una prisión rusa y la fijación y el miedo de un hombre sólo subrayan la debilidad y la podredumbre en el corazón del sistema que Putin ha construido”, dijo Blinken al margen de la Conferencia de Seguridad de Munich en Alemania.
El secretario de Asuntos Exteriores británico, David Cameron, afirmó que el presidente ruso, Vladimir Putin, “debería rendir cuentas de lo sucedido”.
“La Rusia de Putin inventó cargos contra él, lo envenenó, lo envió a una colonia penal ártica y ahora ha muerto trágicamente”, describió el ex primer ministro Cameron en X, antes Twitter. “Nadie debería dudar de la terrible naturaleza de su régimen”, añadió.
La primera ministra italiana, Giorgia Meloni, indicó que la muerte en prisión del principal crítico del Kremlin fue una advertencia para el mundo y pidió una aclaración sobre lo sucedido. “La muerte de Alexei Navalny durante su detención es otra página triste que actúa como una advertencia a la comunidad internacional”, dijo Meloni en un comunicado, ofreciendo sus condolencias y expresando la esperanza de que “este inquietante acontecimiento sea completamente aclarado”.
La noticia impactó hasta en el mundo del deporte dado que el ex campeón del mundo de ajedrez Garry Kasparov, que reside en EEUU, aseguró que “Putin es el asesino de (Alexei) Navalny”.
“No nos equivoquemos, pero la culpa es de todos. Primero, los rusos que no lograron igualar el coraje de Alexei para poner fin a la dictadura y la guerra de Putin. Algunos de nosotros lo intentamos y él (Navalny) marchó con nosotros en cifras que hoy en día parecen una fantasía. Pero no fue suficiente”, dijo el ajedrecista en su cuenta de X.
Agregó que “Putin intentó sin éxito asesinar a Navalny rápida y secretamente con veneno, y ahora lo ha asesinado lenta y públicamente en prisión. Fue asesinado por exponer a Putin y su mafia como los delincuentes y ladrones que son. Mis pensamientos están con la esposa y los hijos del valiente”.
Luego llegó el turno de Emmanuel Macron, presidente de Francia, quien acusó a Rusia de condenar a muerte a “espíritus libres” después de que el crítico más destacado del Kremlin, Alexei Navalny, muriera en una prisión del Ártico.
“En la Rusia actual, los espíritus libres son condenados a muerte”, afirmó Macron, expresando su “ira e indignación” y elogiando el “coraje” de Navalny.
Alexei Navalny murió este viernes de manera repentina en la prisión ártica en la que se encontraba desde diciembre pasado, según informó el servicio penitenciario de la región de Yamalo-Nenets, donde cumplía condena.
“Se le practicaron los necesarios procedimientos de reanimación, que no dieron ningún resultado. Los médicos de urgencias constataron la muerte del condenado. Se están estableciendo las causas del fallecimiento”, señaló el comunicado oficial sobre el deceso de Navalny, de 47 años; al tiempo que acotó: “El 16 de febrero de 2024, en el centro penitenciario N°3, el prisionero Navalny A.A. se sintió mal después de un paseo”.
El opositor purgaba una pena de 19 años de cárcel por “extremismo”.
El Kremlin dijo que no tiene información sobre las causas de la muerte de Navalny. Así lo anunció el portavoz de la Presidencia rusa, Dmitri Peskov, minutos después de conocerse la noticia.
“Los médicos tienen que aclararlo”, expresó el vocero, citado por la agencia TASS, después de que los servicios penitenciarios confirmaran la muerte del político. También sostuvo que el presidente, Vladimir Putin, ya “fue informado”.