Hezbollah disparó este jueves decenas de misiles contra el norte de Israel, tras los bombardeos en el sur de Líbano que mataron a 15 personas, entre ellas un alto comandante del grupo terrorista.
“En la primera respuesta a las matanzas [en las localidades libanesas] de Nabatieh y Sawaneh, combatientes de la Resistencia Islámica dispararon decenas de cohetes de tipo Katiusha contra [la ciudad israelí de] Kiryat Shmona”, fronteriza con Líbano, indicó el movimiento extremista libanés en un comunicado.
El grupo terrorista, respaldado por el régimen de Irán, reivindicó además una serie de ataques contra posiciones militares israelíes cerca de la frontera.
En tres comunicados distintos, informó también de la muerte de tres de sus combatientes en bombardeos israelíes, lo que eleva a ocho los terroristas de Hezbollah muertos desde el miércoles.
El Ejército de Israel, por su parte, confirmó este jueves haber abatido a un comandante del movimiento, identificado como Ali al Debs, junto a su adjunto Ibrahim Issa y otro combatiente en un bombardeo el miércoles contra un edificio en Nabatieh, en el sur de Líbano.
El ataque mató también a siete civiles, que formaban parte de la misma familia, según una fuente de seguridad libanesa.
La familia se encontraba en el primer piso del edificio mientras que los miembros de Hezbollah estaban en la planta baja, precisó esa fuente.
Un fotógrafo de la agencia AFP constató que la primera y la planta baja del inmueble quedaron destruidas.
Los rescatistas sacaron los cuerpos de siete civiles de entre los escombros, incluidas cinco mujeres y un niño, según la agencia nacional de información (ANI).
De acuerdo a las FDI, al-Debes, comandante de la Fuerza Radwan, fue uno de los autores intelectuales del atentado con bomba perpetrado en el cruce de Megiddo, en el norte de Israel, en marzo de 2023, y planeó y llevó a cabo otros ataques, incluso durante el actual conflicto.
Las FDI también atacaron en las últimas horas varias posiciones del grupo terrorista en Blida y Maroun al-Ras, en el sur de Líbano.
Al respecto, el ministro de Defensa de Israel, Yoav Gallant, advirtió que “los aviones de la Fuerza Aérea que vuelan actualmente en los cielos del Líbano tienen bombas más pesadas para objetivos más distantes”.
“Estamos intensificando los ataques sin cesar y Hezbollah está pagando un precio cada vez más alto. La próxima campaña tendrá una ofensiva muy fuerte y utilizaremos todas nuestras herramientas y capacidades”, advirtió, por su parte, el jefe del Estado Mayor del Ejército israelí, Herzi Halevi, en un viaje a municipios del norte.
La ONU denunció una “escalada peligrosa” de las violencias, que estallaron al día siguiente del inicio de la guerra en Gaza entre Israel y Hamas. El organismo internacional ha catalogado de “extremadamente preocupante” el aumento de víctimas civiles por la reciente escalada de los ataques en la frontera entre Líbano e Israel y ha recordado a todas las partes que “las leyes de la guerra son claras”.
“Las partes deben proteger a los civiles”, ha subrayado el coordinador humanitario de la ONU para Líbano, Imran Riza, en un comunicado en el que ha recordado que la población nunca es un “objetivo” legítimo, incluso en situaciones de conflicto.
El conflicto, que empezó el 7 de octubre, avivó las tensiones en la frontera entre Israel y Líbano, donde se producen cruces de disparos diarios. Desde entonces se están registrando los peores choques fronterizos desde la guerra que libraron en 2006.
Un portavoz de la fuerza interina de la ONU en Líbano, Andrea Tenenti, instó en un comunicado a “todas las partes afectadas a detener inmediatamente las hostilidades”.
(Con información de AFP)