El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, advirtió sobre de la posibilidad de un enfrentamiento con Rusia durante décadas y de la propagación de la agresión rusa a otros países si el Kremlin gana la guerra en Ucrania, en una entrevista que concedió al diario alemán ‘Welt am Sonntag’.
“La OTAN no busca una guerra con Rusia”, dijo Stoltenberg en la entrevista. “Pero tenemos que prepararnos para una confrontación que podría durar décadas”, sostuvo el noruego.
“Si (el presidente ruso, Vladímir) Putin gana en Ucrania, no hay garantía de que la agresión rusa no se extienda a otros países”, indicó.
A su juicio, la mejor defensa ahora es apoyar a Ucrania e invertir en las capacidades militares de la OTAN.
“La disuasión sólo funciona si es creíble”, enfatizó Stoltenberg.
“Necesitamos restaurar y ampliar más rápidamente nuestra base industrial para poder aumentar los suministros a Ucrania y reponer nuestras propias existencias”, dijo.
Esto significa pasar de una producción lenta en tiempos de paz a una producción rápida, como se requiere en los conflictos, subrayó.
En este sentido abogó por enviar más y de forma más rápida pedidos a las empresas europeas de la industria de defensa.
En las economías de mercado, los fabricantes de armas necesitan firmar contratos para poder aumentar la producción, alegó.
“Dado que Rusia está dirigiendo toda su economía hacia la guerra, también tenemos que hacer más por nuestra seguridad”, remachó el secretario general de la OTAN.
Stoltenberg, ya había dicho a finales de enero al Congreso de Estados Unidos, donde los republicanos han bloqueado nuevos fondos para Ucrania, que una victoria de Rusia en la guerra haría el mundo más inseguro.
“Estoy convencido de que todos los aliados de la OTAN, incluido Estados Unidos, seguirán brindando apoyo a Ucrania porque hacerlo redunda en nuestra propia seguridad”, declaró Stoltenberg en una rueda de prensa en Washington junto al secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken.
El político noruego subrayó que una victoria del presidente ruso, Vladimir Putin, supondría “una tragedia para Ucrania, pero también haría el mundo más inseguro” para todos los miembros de la Alianza Atlántica.
Según Stoltenberg, la derrota de Kiev “envalentonaría a usar la fuerza a otros líderes autoritarios”, entre los que citó a los de Corea del Norte, Irán y China.
“Hoy es Ucrania. Mañana podría ser Taiwán. Por lo tanto nos interesa que Ucrania sea una nación soberana e independiente y el apoyo que le brindemos marca la diferencia”, dijo.
(Con información de EFE)