Estados Unidos y el Reino Unido atacaron este sábado decenas de objetivos en Yemen en respuesta a las repetidas ofensivas contra la navegación por parte de los rebeldes hutíes, apoyados por Irán, que han perturbado el comercio internacional.
Los bombardeos alcanzaron “36 objetivos hutíes en 13 lugares de Yemen en respuesta a los continuos ataques de los hutíes contra el transporte marítimo internacional y comercial, así como contra buques de guerra que transitan por el mar Rojo”, dijeron ambos países en un comunicado conjunto.
Según fuentes estadounidenses citadas por la cadena CNN, los ataques han sido lanzados desde superficie y también desde el aire empleando aviones como el F/A-18. Entre los objetivos atacados hay centros de mando y control, un almacén subterráneo de armamento y otras armas utilizadas por los hutíes para atacar las rutas internacionales de mercancías en el mar Rojo, explicó una de las fuentes.
“Estos ataques tienen como objetivo perturbar y degradar aún más las capacidades de los hutíes respaldados por Irán para llevar a cabo sus ataques imprudentes y desestabilizadores contra buques estadounidenses e internacionales que transitan legalmente por el Mar Rojo”, indicó el Pentágono en un comunicado sobre la primera campaña aérea a gran escala desde que Washington y Londres lanzaron su acción contra el Yemen el pasado 12 de enero.
El Pentágono, además, señaló que contó con el apoyo de Australia, Bahrein, Canadá, Dinamarca, los Países Bajos y Nueva Zelanda en esta maniobra militar.
Ante esta nueva operación, el oficial hutí Naser al Din Amer advirtió en su cuenta de la red social X que los insurgentes responderán a estos bombardeos. ”O cesa la agresión contra Gaza o habrá una guerra hasta el día del juicio final”, amenazó el responsable de los rebeldes, que recientemente han sido clasificados por EEUU como organización terrorista.
Drones derribados
Este mismo sábado, las Fuerzas Armadas estadounidenses informaron de la destrucción de al menos una docena de drones hutíes durante una serie de incidentes a lo largo del pasado viernes.
El primer incidente tuvo lugar a las 10:30 am, hora de Saná, la capital de Yemen, cuando el destructor estadounidense ‘USS Carney’ eliminó un avión no tripulado en el golfo de Adén, sin daños ni víctimas que lamentar. Cuatro horas después, fuerzas del Mando Central del Ejército de EEUU destruyeron cuatro drones que, según informaron, estaban “listos para ser lanzados” desde “zonas de Yemen bajo control insurgente”.
“Las fuerzas de EEUU deterinaron que presentaban una amenaza inminente para los cargueros y los buques estadounidenses en la zona y por ello decidieron lanzar esta operación de autodefensa para destruirlos”, explicaron.
Finalmente, a las 21:20 (las 19:30 en España, el destructor ‘USS Laboon’ y aviones de combate F/A-18 del grupo de ataque del portaaviones ‘Dwight D. Eisenhower’ comenzaron una operación que desembocó en el derribo de siete aviones no tripulados de la insurgencia sobre el mar Rojo, de nuevo sin daños ni víctimas entre las fuerzas norteamericanas.
Los hutíes yemeníes controlan el centro y el norte de Yemen y han realizado ataques contra buques mercantes en el mar Rojo en apoyo al grupo terrorista palestino Hamas, objetivo de una ofensiva militar israelí en la Franja de Gaza.
(Con información de AFP y EuropaPress)