El coordinador del Consejo Nacional de Estados Unidos para Medio Oriente, Brett McGurk, se encuentra este miércoles en la capital de Qatar, Doha, con el objetivo de reactivar las negociaciones sobre un posible acuerdo entre Israel y el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamas) para la liberación de los rehenes retenidos en la Franja de Gaza.
El portavoz de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, John Kirby, dijo este miércoles en una rueda de prensa que Estados Unidos apoya una pausa humanitaria para garantizar la liberación de rehenes y tildó las discusiones actuales de “serias y sobrias”.
Se espera que McGurk mantenga una reunión con el primer ministro de Emiratos Árabes Unidos, Mohamed bin Abdulrraman al Zani. Según informó con anterioridad el diario The Wall Street Journal, la administración Biden propuso un plan por fases a tres meses para la liberación de rehenes a cambio de presos palestinos.
McGurk viajó en la víspera a Egipto, donde se reunió con el ministro de Defensa egipcio, Mohamed Zaki. En el encuentro, ambos discutieron el impacto que tiene la situación actual de la Franja de Gaza en la región de Medio Oriente.
Más de un centenar de rehenes fueron liberados el pasado mes de noviembre a cambio de la puesta en libertad de cientos de prisioneros palestinos durante una tregua de una semana alcanzada a finales de noviembre entre Israel y Hamas en la Franja de Gaza.
Según informó el medio israelí Walla, el gobierno de Benjamin Netanyahu habría enviado a Egipto y Qatar -principales mediadores- una propuesta que plantea un alto el fuego en el enclave de unos dos meses de duración a cambio de la puesta en libertad de los cautivos. También incluiría un intercambio por presos palestinos que serían liberados.
Sin embargo, funcionarios israelíes negaron este miércoles esas informaciones, y acusaron al grupo terrorista de atrincherarse en sus posiciones y bloquear cualquier posible compromiso.
Funcionarios diplomáticos anónimos citados por varios medios de comunicación hebreos afirmaron que cualquier noticia de avances en las conversaciones es “falsa” y que, en realidad, las diferencias entre las partes son cada vez mayores.
“Los informes sobre un acuerdo de principio para un alto el fuego no son correctos. Las diferencias son muy grandes y no hay avances en las conversaciones”, declaró un funcionario israelí al sitio de noticias Ynet. “Es muy complicado. Hamas endurece constantemente su posición”.
Según un informe de Reuters del martes que citaba a tres fuentes, Israel y Hamas habían acordado en términos generales que un alto el fuego de un mes de duración podría suponer el intercambio de rehenes israelíes por prisioneros palestinos. En las últimas semanas, mediadores estadounidenses y qataríes habrían acercado posturas entre ambas partes para acordar un proceso de 30 días, que incluiría la liberación de todos los rehenes, la entrada de más ayuda en Gaza y la liberación de prisioneros palestinos, según informaron el Wall Street Journal y The Washington Post en otros informes recientes sobre los avances en las negociaciones.
Israel calcula que unos 136 rehenes israelíes -incluido unos 25 muertos- siguen retenidos en la Franja y, en los últimos días, las familias han incrementado la presión sobre Nentanyahu para que llegue a un acuerdo y tome medidas para su liberación.
Hasta ahora, el primer ministro se ha mostrado reacio a un acuerdo con Hamas y ha abogado por la vía de presión militar como forma para lograr su libertad.
Netanyahu dijo este martes que quiere “la victoria absoluta” contra Hamas en Gaza, tras la muerte de 21 soldados en el ataque más mortífero desde el inicio de la invasión y después de que se filtrara que Israel ofreció una tregua al grupo terrorista, mientras el Ejército asedia y ataca la ciudad sureña de Khan Younis.
“Mi principal expectativa es un triunfo completo, no hay sustituto para la victoria”, declaró el primer ministro israelí, mientras las fuerzas israelíes profundizan su ofensiva terrestre en la ciudad sur de Khan Younis, que quedó cercada en un contexto en que dos hospitales de la ciudad, Al Amal y Nasser, se hallan asediados y al límite.
En una reunión con soldados en una base militar, Netanyahu criticó las voces que creen que un triunfo total para acabar con Hamas no es posible, mientras Israel se empantana en su ofensiva terrestre, en la que por ahora no ha logrado sus objetivos militares declarados.
“Es posible, es necesario y no nos queda otra opción: victoria completa”, aseveró el jefe de Gobierno, mientras mengua la confianza entre la opinión pública por su gestión de la guerra, así como aumentan las críticas de la oposición y la presión de las familias de los rehenes, que le piden un pacto que derive en su liberación.
(Con información de Europa Press y EFE)