Rusia lanzó una nueva oleada de ataques contra Ucrania, que incluyó más de 30 drones de fabricación iraní y varios misiles, durante la madrugada de este jueves. La ofensiva se registró en varios puntos del país pero estuvo centrada en la segunda ciudad más grande, Kharkiv, en el este.
“Los ocupantes atacaron con 33 vehículos aéreos no tripulados de ataque Shahed-136/131 desde la zona de Primorsko-Akhtarsk y la región de Kursk de la Federación Rusa”, indicaron las Fuerzas Aéreas ucranianas en un comunicado en el que sumaron una tercera ofensiva con dos misiles antiaéreos guiados S-300 desde la fronteriza Belgorod.
Por su parte, el jefe de la Administración Militar Regional, Oleg Siniegúbov, informó que en la ciudad de Kúpiansk se había registrado una muerte y varios heridos consecuencia de esta ofensivas. La víctima mortal fue una mujer de unos 60 años que trabajaba como operadora en una sala de calderas y fue alcanzada por los bombardeos; en tanto, un hombre de 63 años y otra mujer de 45 resultaron lastimados, y fueron hospitalizados con heridas que no ponen en riesgo su vida.
Siniegúbov recalcó que en su zona fueron más de 15 las localidades atacadas en las últimas horas. No obstante, los sistemas de defensa de Kiev lograron derribar unos 22 de los drones iraníes, agregaron desde el Ejército.
Este episodio se sumó al de la víspera, en el que Rusia bombardeó nuevamente Ucrania, esta vez sobre Chuguív, y alcanzó una institución educativa. Este ataque se cobró la vida de una mujer de 62 años y dejó a otra de la misma edad herida.
Como respuesta a estas maniobras, las tropas de Ucrania lanzaron sus propias ofensivas contra el territorio enemigo, principalmente sobre las regiones de Moscú y Leningrado. Según el Ministerio de Defensa ruso, estos drones fueron derribados sin que se registraran daños o bajas.
“Las fuerzas de defensa aérea han destruido un vehículo aéreo no tripulado sobre la región de Moscú e interceptado otro sobre la región de Leningrado”, indicó la cartera en su canal de Telegram mientras el alcalde de la capital, Serguei Sobianin, también confirmó el episodio: “Las fuerzas de la defensa aérea del distrito urbano de Podolsk han repelido el ataque de un dron que volaba directamente hacia Moscú”.
En medio de este fuego cruzado, este miércoles el Ejército ucraniano pidió a los residentes de las localidades cercanas a la frontera norte con Rusia que evacuaran lo antes posible para evitar la muerte de civiles debido al alto nivel de actividad enemiga en la zona y la necesidad de las tropas de responder con fuerza.
“El enemigo utiliza varios tipos de armamento, como aviación, artillería, morteros y lanzagranadas, y pone en liza grupos de sabotaje”, escribió el teniente general Serguí Naev en un mensaje dirigido a los vecinos e insistió en que dado que “estas hostilidades pueden conducir a la muerte tanto de civiles como de militares, a su captura y a la destrucción de pueblos y localidades enteras en la frontera, todo civil debe entender que estar allí es peligroso”.
A la par, Ucrania insistió en la necesidad de más armamento de los aliados de Occidente para poder continuar con sus ofensivas y poder defenderse de estos ataques enemigos. “Para avanzar, para mover la línea del frente, necesitamos municiones, necesitamos más mano de obra, necesitamos armas. Si no lo conseguimos ahora, no nos moveremos a ninguna parte. Si el enemigo entiende que no tenemos recursos, fácilmente puede presionarnos”, advirtió un soldado en el campo de batalla.
(Con información de AFP, EFE y Europa Press)