Las autoridades chinas ordenaron este lunes la detención de Tang Shuangning, presidente del conglomerado financiero estatal Everbright Group entre 2007 y 2017, meses después de que su sucesor en el cargo, Li Xiaopeng (2017-2022), fuese también arrestado, informa la agencia oficial de noticias Xinhua.
La Fiscalía Popular Suprema del país asiático acusa de aceptar sobornos y malversación a Tang, que fue expulsado a principios de este mes del Partido Comunista (PCCh) tras una investigación que determinó que se había aprovechado de su puesto para apropiarse de activos públicos o de aceptar “grandes sumas” de dinero y bienes a cambio de ayudas a terceros en materia de préstamos o ascensos.
Además, indicó Xinhua el pasado día 6, Tang -cuyas “ganancias ilícitas” serán confiscadas- “debilitó” el control de Everbright por parte del PCCh y fue “ineficiente” a la hora de “prevenir y desactivar” riesgos financieros.
Por el momento, las autoridades siguen investigando el caso de Tang, de 69 años y con una larga carrera en el banco central chino, así como una etapa de cuatro años como vicepresidente del regulador bancario del país previa a su nombramiento como presidente de Everbright.
Aunque el arresto del exejecutivo no fue ordenado hasta hoy, el diario digital privado Caixin ya había informado en julio de 2023 de que se había perdido contacto con él y de rumores que apuntaban a que estaba siendo investigado por las autoridades.
Tras aquella noticia, en octubre, se conoció la detención de su sucesor en el cargo, al que también se acusaba de supuestamente aceptar sobornos.
Campaña anticorrupción
El caso se enmarca de la cruzada anticorrupción emprendida hace años por las autoridades en el sector financiero, que se ha saldado hasta ahora con la imputación de numerosos funcionarios de organismos reguladores y de altos ejecutivos de empresas.
Hace algo menos de un año, la Comisión Central para la Inspección de la Disciplina (CCDI, órgano anticorrupción del PCCh) prometió reforzar su campaña contra las conductas ilícitas en el sector financiero apenas días después de la misteriosa desaparición del conocido banquero Bao Fan, del que posteriormente anunció que estaba “cooperando en una investigación”, según el banco de inversión del que es fundador, China Renaissance.
Tras ello, el pasado 27 de marzo, el brazo anticorrupción del PCCh anunció una nueva ronda de investigaciones en más de 30 empresas estatales, asegurando asimismo que “volvería a revisar” cinco compañías financieras que ya se habían enfrentado a pesquisas, entre ellas, precisamente, Everbright Group.
A principios de este año, la CCDI anunció que aumentaría la presión y los castigos contra los casos de corrupción en varios sectores entre los que figuraban el financiero y el de las empresas estatales.
Tras su llegada al poder en 2012, el actual secretario general del PCCh y presidente del país, Xi Jinping, comenzó una campaña anticorrupción en la que numerosos altos cargos chinos han sido condenados por aceptar sobornos millonarios.
Si bien esta iniciativa, uno de los programas estrella de Xi, ha destapado importantes casos de corrupción en el seno del PCCh, algunos críticos han apuntado a que también podría estar siendo utilizada para acabar con la carrera política de algunos de sus rivales.
(Con información de EFE)