Los rebeldes hutíes de Yemen, respaldados por el régimen de Irán, declararon el viernes “blancos legítimos” de sus operaciones los intereses de Estados Unidos y Reino Unido, debido a los bombardeos llevados a cabo por esos países en este país situado a la entrada del mar Rojo.
El Consejo Político Supremo de los rebeldes amenazó con tomar represalias tras los ataques perpetrados durante la noche contra decenas de objetivos militares en territorio controlado por los hutíes.
“Los estadounidenses y los británicos no deben creer que escaparán al castigo de nuestras heroicas fuerzas armadas”, dijo el Consejo Político Supremo de los hutíes en un comunicado en sus medios oficiales.
“La alegría de los agresores no durará mucho, y nuestra mano será la vencedora, si Dios quiere”, añadió.
“Todos los intereses estadounidenses y británicos se han convertido en blancos legítimos de las fuerzas armadas yemenitas tras la agresión directa y declarada contra la República de Yemen”, concluyó el Consejo Político Supremo.
Los duros ataques, en los que murieron cinco personas, según los rebeldes, se produjeron después de semanas de ataques hutíes contra la navegación vinculada a Israel en el Mar Rojo, en protesta por la guerra contra el grupo terrorista Hamas.
La OTAN dijo que los ataques de EEUU y el Reino Unido fueron “defensivos”
“Estos ataques fueron defensivos y estaban diseñados para preservar la libertad de navegación en una de las vías navegables más importantes del mundo. Los ataques hutíes deben terminar”, afirmó el portavoz de la OTAN, Dylan White, en una declaración facilitada a EFE.
Añadió que las fuerzas hutíes cuentan con el apoyo, los suministros y el equipamiento que les proporciona Irán y consideró que Teherán “tiene una responsabilidad especial a la hora de dominar a sus fuerzas subsidiarias”.
Por su parte, el Gobierno británico aseguró este viernes en una argumentación jurídica que el ataque lanzado contra posiciones de rebeldes hutíes en Yemen ha sido necesario y proporcionado, al tiempo que defendió que su respuesta armada está permitida por la legalidad internacional.
El Ejecutivo del Reino Unido publicó hoy un comunicado en el que resume su posición legal para dar respuesta a las “docenas de graves ataques” perpetrados durante un periodo de tiempo prolongado por hutíes en el mar Rojo contra barcos de bandera británica “y de otros muchos Estados”.
Londres adelantó que notificará al Consejo de Seguridad de la ONU sobre las acciones militares que ha adoptado contra los hutíes en virtud del artículo 51 de la Carta de Naciones Unidas, que estipula el derecho de los Estados a la defensa propia.
En la nota, Downing Street -oficina del primer ministro, Rishi Sunak- advirtió que Londres entiende que los ataques de los rebeldes continuarán “a menos que se tomen medidas para disuadirlos”.
“La intervención militar para golpear objetivos cuidadosamente seleccionados a fin de limitar de manera eficaz las capacidades de los hutíes y evitar más ataques es legal”, subrayó el Gobierno.
Sunak indicó hoy desde Kiev que el Reino Unido debe enviar “un fuerte mensaje” a los rebeldes hutíes en el mar Rojo de que no pueden continuar con sus ataques “con impunidad”.
El Gobierno del Yemen acusó a los rebeldes hutíes de “arrastrar al país” hacia una nueva guerra
El Gobierno internacionalmente reconocido del Yemen acusó hoy a los rebeldes hutíes de “arrastrar al país a un escenario de enfrentamiento militar”, después de que Estados Unidos y el Reino Unido bombardearan posiciones de los insurgentes en respuesta a sus ataques contra la navegación en el mar Rojo.
“El Gobierno responsabiliza a las milicias hutíes de arrastrar al país a un escenario de enfrentamiento militar con fines propagandísticos”, dijo el Ejecutivo en un comunicado difundido por la agencia de noticias oficial yemení Saba.
Asimismo, indicó que sigue “con gran preocupación la escalada militar en el país” y justificó los ataques estadounidenses y británicos “en respuesta a los continuos ataques y amenazas de las milicias terroristas hutíes” contra la seguridad marítima en el mar Rojo y en el estrecho de Bab al Mandeb.
(Con información de EFE y AFP)