Durante su reunión con el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, el secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, se comprometió a trabajar junto a Israel en pos de la recuperación y estabilización de Gaza, con el fin de lograr una estabilidad a largo plazo en la región.
Tras el encuentro que mantuvieron esta tarde en Tel Aviv, Blinken señaló se está “trabajando urgentemente” junto al Estado judío “para forjar un camino hacia una paz y seguridad duraderas”.
“No será fácil y no sucederá de la noche a la mañana pero acordamos trabajar juntos y coordinar nuestros esfuerzos para ayudar a que Gaza se estabilice y se recupere, trazar un camino político para los palestinos y trabajar por la paz, la seguridad y la estabilidad a largo plazo en la región en su conjunto”, declaró a la par que manifestó al mandatario israelí la posibilidad de crear “un Estado palestino”, una idea a la que Tel Aviv aún se opone pero que tiene gran apoyo entre las naciones de la región.
“Estamos trabajando urgentemente para forjar un camino hacia una paz y seguridad duraderas” pero “los dirigentes israelíes tendrán que tomar decisiones difíciles por sí mismos”, agregó Blinken. “Israel debe ser un socio de los líderes palestinos que estén dispuestos a dirigir a su pueblo y debe dejar de tomar medidas que menoscaben la capacidad de los palestinos para gobernarse a sí mismos con eficacia”, continuó.
Asimismo, señaló a su homólogo Yisrael Katz que existen “posibilidades reales” para una integración de Israel con Oriente Próximo aunque es indispensable que, antes, se supere este “momento muy difícil”.
En ese sentido, el funcionario estadounidense recalcó a Netanyahu la importancia de preservar la vida de los civiles palestinos que quedaron en medio del fuego cruzado entre las Fuerzas de Defensa y Hamas, y lo instó a buscar formas para “evitar más (de estos) daños” y “aumentar el nivel de asistencia humanitaria que llega a los civiles” en el enclave palestino.
El número de víctimas gazatíes, especialmente de niños, es “demasiado alto”, lamentó, por lo que son necesarios “más alimentos, agua y medicinas”.
De todas formas, el funcionario insistió en que Estados Unidos apoya “el derecho de Israel” de continuar su ofensiva y defenderse tras las masacres “para impedir que se repitan los ataques terroristas del 7 de octubre”. “No tenemos que elegir entre defender a Israel y ayudar a los civiles palestinos. Podemos y debemos hacer ambas”, agregó al respecto.
Otro de los temas abordados en el encuentro fue la situación de los cerca de 130 rehenes que aún siguen en manos de Hamas en Gaza, cuya liberación es una de las prioridades del gabinete de guerra. Ellos, al igual que los civiles palestinos, comparó Blinken, se enfrentan a una “aguda inseguridad alimentaria”, entre otros riesgos.
Mientras tienen lugar estos encuentros diplomáticos, el Ejército de Benjamin Netanyahu anunció este martes que su ofensiva terrestre en Gaza, principalmente en Khan Younis, en el sur, se había ampliado, con más ataques que dejaron unos 40 terroristas abatidos. Previamente, el sábado, las tropas habían confirmado el desmantelamiento total de la estructura militar de Hamas en el norte, por lo que los terroristas allí operan esporádicamente, “sin comandantes” y ya no se registra una fuerte amenaza.
Para el centro y el sur, habían adelantado incursiones más selectivas, “de otra manera”. “Esto lleva tiempo, no hay atajos en la lucha contra el terrorismo”, indicaron entonces.
Gracias a estos avances, la ONU finalmente está lista para llevar a cabo una misión de evaluación que permita que los “palestinos desplazados del norte de la Franja de Gaza” regresen “con seguridad a sus hogares”, adelantó Blinken en su rueda de prensa “Debe permitírseles volver a sus hogares tan pronto como las condiciones lo permitan”, continuó.
Por otro lado, el enviado estadounidense abordó la escalada de tensiones en la región y las formas de evitar que nuevos actores se sumen a la guerra, algo que “no interesa a ninguno” de los aliados regionales.
“Nadie quiere que se abran más frentes en este conflicto. Los países de la región están utilizando su influencia para asegurarse de que eso no ocurra”, comentó.
Sobre esto, el ministro de Defensa, Yoav Gallant, le había manifestado previamente que “un aumento en la presión sobre Irán es crítico y puede prevenir” dicho escenario, que la última semana se volvió más posible luego de un ataque en el Líbano y otro en Kermán.
Por último, Blinken aprovechó la oportunidad para señalar nuevamente que las consecuencias de este conflicto bélico son culpa de la milicia terrorista ya que “Hamas podría haber acabado con esto el 8 de octubre si no se hubiera escondido detrás de los civiles, si hubiera depuesto las armas, si se hubiera rendido, si hubiera liberado a los rehenes. Nada de este sufrimiento habría ocurrido si Hamas no hubiera hecho lo que hizo el 7 de octubre y si hubiera tomado decisiones diferentes después. Esto podría terminar mañana si Hamas toma esa decisión”, concluyó.
Previo a su llegada al Estado judío, el funcionario estadounidense visitó Turquía, Grecia, Jordania, Qatar, los Emiratos Árabes Unidos y Arabia Saudí, y continuará su gira por Cisjordania, con el fin de transmitir a todos estos actores -influyentes en el conflicto- las visiones y perspectivas de cara a los próximos pasos del conflicto.