La región rusa de Belgorod, fronteriza con Ucrania, se ofreció el viernes a trasladar a algunos residentes de su capital a un lugar seguro, después de que las fuerzas de Kiev bombardearan intensamente la ciudad.
La oferta se produjo después de que bombardeos nocturnos este jueves hirieran al menos a dos personas, destruyeran autos y derribaran los cristales de los rascacielos, provocando el pánico entre los residentes.
“Veo varios llamamientos en las redes sociales en los que la gente escribe: Tenemos miedo, ayúdennos a llegar a un lugar seguro”, dijo Gladkov, en un mensaje de vídeo. “Por supuesto que lo haremos. Ya hemos trasladado a varias familias”, añadió.
Dijo que los residentes serían transportados a las localidades de Stary Oskol y Gubkin, más alejadas de la frontera, donde serían alojados en “condiciones confortables”.
“Permanecerán allí el tiempo que sea necesario”, agregó, pero advirtió de que no habría suficientes alojamientos temporales para albergar a todos.
“Haré un llamamiento a mis colegas, los gobernadores de otras regiones, para que nos ayuden”, dijo.
Escombros y daños
El viernes las calles de la ciudad estaban llenas de escombros metálicos y coches dañados. Según el gobernador regional, los sistemas de defensa antiaérea habían derribado 10 objetivos aéreos a última hora del jueves. Gladkov afirmó que los objetivos fueron derribados cuando se aproximaban a la ciudad.
Dos personas estaban siendo tratadas en el hospital por heridas, dijo Gladkov. Además, las ventanas de un edificio de departamentos de varias plantas estallaron por el bombardeo y 30 coches sufrieron daños.
El ayuntamiento de Belgorod había advertido anteriormente a los propietarios de viviendas que aseguraran sus ventanas con cinta adhesiva para protegerse de las ondas expansivas.
El Kremlin ha intentado mantener una apariencia de normalidad en el frente interno, pero los recientes ataques mortíferos sobre Belgorod han acercado la realidad del conflicto a los rusos.
Belgorod, con una población de unos 340.000 habitantes, es la mayor ciudad rusa cercana a la frontera. Situada a unos 100 kilómetros al norte de Kharkiv, la segunda ciudad más grande de Ucrania, puede alcanzarse con armas relativamente sencillas y móviles, como lanzacohetes múltiples.
En los últimos días Ucrania atacó sobre todo con cohetes Vilkha y misiles Tochka-U, de fabricación soviética, que tienen un alcance de hasta 120 kilómetros y una ojiva que puede transportar municiones de racimo.
El jueves, las escuelas cercanas a la frontera ucraniana en la región recibieron la orden de prolongar sus vacaciones de invierno debido a la amenaza de atentados.
Inquietar a la opinión pública rusa
El lado ruso de la frontera ha sido objeto de ataques cada vez más frecuentes en los últimos días. A lo largo de la guerra, las aldeas fronterizas han sido blanco esporádico del fuego de la artillería ucraniana, cohetes, granadas de mortero y drones lanzados desde espesos bosques donde son difíciles de detectar.
Atacar Belgorod y perturbar la vida de la ciudad es una forma dramática de que Ucrania demuestre que puede contraatacar a Rusia, cuyo ejército supera en número y en armamento a las fuerzas de Kiev.
El 31 de diciembre los bombardeos de Belgorod mataron a 25 personas, entre ellas cinco niños, el ataque más mortífero contra civiles en Rusia desde que comenzó la guerra en febrero de 2022. Otro civil murió el martes en una nueva salva.
La táctica parece estar teniendo cierto éxito, con indicios de que los ataques están inquietando a la opinión pública, a los líderes políticos y a los observadores militares.
El Presidente ruso, Vladimir Putin, prometió intensificar los ataques en respuesta al ataque del pasado sábado, y las fuerzas de Moscú atacaron zonas de toda Ucrania a lo largo de la semana.
Ataque contra Sebastopol
Ucrania también dijo haber atacado el jueves un puesto de mando ruso cerca de la ciudad portuaria de Sebastopol, en Crimea, en un ataque aéreo que, según Rusia, hirió a una persona.
El Ministerio de Defensa de Rusia dijo que repelió un ataque ucraniano con drones sobre Crimea a primera hora del viernes, destruyendo e interceptando 36 drones sobre la península anexionada.
(Con información de AFP, Reuters y AP)