El Ministerio taiwanés de Defensa denunció este miércoles que cuatro globos chinos cruzaron la línea media que separa Taiwán de China, tres de los cuales sobrevolaron directamente la isla. Este incidente ocurre en un contexto de creciente tensión entre ambos territorios, especialmente significativo a menos de dos semanas de unas elecciones cruciales en Taiwán.
Según un gráfico publicado por la cartera de Defensa, los globos aparecieron “al suroeste de Ching-Chuan-Kang”, ubicación de una base aérea militar en la ciudad occidental de Taichung, y se dirigieron hacia el noreste sobre Taiwán. Uno de estos globos alcanzó una altitud mínima de 3,658 metros.
Este incidente marca el segundo día consecutivo en que se detectan objetos de este tipo sobre el espacio aéreo taiwanés. Desde diciembre, el ministerio de Defensa ha reportado públicamente seis hechos similares, mostrando una postura de vigilancia y preparación para tomar “medidas apropiadas” dependiendo de la “naturaleza, altitud y posibles peligros de los objetivos”.
Ou Sifu, experto en conflictos del Instituto de Investigación de Defensa y Seguridad Nacional de Taiwán, interpretó estos acontecimientos como “coerción militar y guerra psicológica”. Según Ou, el objetivo de China con el despliegue de estos globos es influir en las elecciones presidenciales de Taiwán, buscando incrementar los votos “pro-Beijing”.
En los últimos años, China ha intensificado las presiones militares y políticas contra el gobierno de la presidenta Tsai Ing-wen, reclamando a Taiwán como parte de su territorio. Esta estrategia incluye el envío de un número sin precedentes de aviones de guerra y buques navales alrededor de la isla, tácticas que expertos en conflictos describen como de “zona gris”, destinadas a intimidar al ejército taiwanés.
Además, Beijing ha rechazado cualquier interacción con Tsai durante su mandato, debido a que ella no reconoce la reivindicación china sobre Taiwán. Su vicepresidente, Lai Ching-te, conocido por su postura a favor de la independencia de Taiwán y considerado un “trabajador pragmático” en este sentido, lidera las encuestas para las elecciones del 13 de enero. Desde Beijing, Lai es etiquetado como un “alborotador” y un “separatista”.
Relaciones China-Taiwán
La presidenta de Taiwán, Tsai Ing-wen, expresó el lunes su esperanza de que Taipei y Beijing busquen una “coexistencia pacífica a largo plazo” y dijo que las relaciones futuras deberían decidirse mediante los “procedimientos democráticos” de Taiwán.
Tsai, que terminará su mandato en mayo al concluir su segundo período de cuatro años, resaltó que durante su presidencia, Taiwán ha “obtenido confianza internacional como un socio democrático” gracias a su enfoque “no provocador e irrenunciable” ante las presiones chinas, según la agencia taiwanesa CNA.
La mandataria taiwanesa manifestó su deseo de que ambas partes del estrecho de Taiwán puedan “reiniciar el diálogo sobre la base de la paz, la reciprocidad y la democracia”, como parte de “una solución a largo plazo para la convivencia pacífica”.
En su discurso de fin de año, el presidente chino, Xi Jinping, afirmó que la “reunificación” de China con Taiwán es una “inevitabilidad histórica”.
“Todos los chinos de ambas costas del estrecho de Taiwán deberían estar unidos por un objetivo común y compartir la gloria del rejuvenecimiento de la nación china”, dijo Xi, según la reseña del discurso difundido por la cadena oficial CCTV.
Durante una reunión a mediados de noviembre con el presidente estadounidense, Joe Biden, Xi Jinping ya tildó de “inevitable” la reunificación de Taiwán.
No obstante, Tsai señaló que serán los taiwaneses quienes “tomen una decisión”, ya que la isla es “un país democrático”.
Además, Tsai enumeró los logros de su administración en los últimos ocho años, entre ellos el fomento al desarrollo de buques y aviones de guerra para “reforzar las capacidades de defensa” del territorio isleño ante la presión militar de Beijing.
Por otra parte, la mandataria alentó a los ciudadanos taiwaneses “de todas las tendencias políticas” a ejercer sus derechos democráticos en las elecciones que el territorio celebra el próximo 13 de enero, cuyo resultado determinará el rumbo de su política respecto a China, en un momento de crecientes tensiones entre Taipéi y Beijing, que reclama la soberanía sobre la isla.
(Con información de AFP y EFE)