Irán cargó nuevamente contra Israel y Estados Unidos y los acusó de haber estado detrás de las explosiones que tuvieron lugar más temprano este miércoles, durante una reunión de miles de personas en el Cementerio de los Mártires de Kerman, con motivo del cuarto aniversario de la muerte del general Qassem Soleimani.
“Washington dice que Estados Unidos e Israel no tuvieron nada que ver con el atentado terrorista en Kermán, Irán. ¿De verdad? (...) No se equivoquen, la responsabilidad de este crimen recae en los regímenes estadounidenses y sionistas, y el terrorismo es sólo una herramienta”, declaró Mohammad Jamshidi, un alto asesor del presidente Ebrahim Raisi, sobre este episodio que dejó al menos 95 muertos y 200 heridos.
A continuación, el primer mandatario iraní extendió sus condolencias a las víctimas y exigió a las autoridades que tomen medidas urgentes para identificar a los culpables y hacerlos pagar por sus actos.
“Sin lugar a dudas, los autores intelectuales de este acto cobarde pronto serán identificados y llevados ante la Justicia por las fuerzas de seguridad y de aplicación de la ley”, dijo en un mensaje e insistió en que ataques como este aumentan la convicción de su país con sus principios. “Los enemigos de la nación deben saber que tales acciones nunca podrán socavar la determinación y la voluntad inquebrantables del pueblo iraní de defender los ideales islámicos”, agregó en ese sentido.
Hasta el momento, Israel no se ha pronunciado sobre estas acusaciones mientras que sí lo hizo Estados Unidos, que se distanció por completo de los actos.
“Parece un ataque terrorista, el tipo de cosas que el ISIS (Estado Islámico) ha hecho en el pasado. Esa es nuestra suposición en curso en este momento”, indicó un funcionario de la Administración de Joe Biden.
Asimismo, momentos antes el portavoz del Departamento de Estado, Matthew Miller, había tildado de “ridícula” la teoría iraní. “Estados Unidos no estuvo involucrado de ninguna manera y cualquier sugerencia en sentido contrario es ridícula. No tenemos razones para creer que Israel estuviera implicado en esta explosión. No tenemos información para creer que ese sea el caso”, aseguró en una rueda de prensa.
Este miércoles se registraron dos explosiones en la provincia de Kermán, al sur del país, donde descansa el cuerpo del jefe de la Fuerza Quds de la Guardia Revolucionaria, muerto en enero de 2020 en Bagdad, Irak, durante un bombardeo ejecutado por Estados Unidos.
Según lograron reconstruir medios locales, la primera tuvo lugar a unos 700 metros de la tumba y la segunda se produjo minutos más tarde en una zona cercana, cuando tenía lugar un acto de conmemoración. Se cree que los explosivos habían sido colocados en varias bolsas que estaban desplegadas en la zona y se activaron por control remoto.
Este incidente, sin embargo, elevó aún más la tensión luego de que, la víspera, Irán, Hezbollah y Hamas también acusaran a Israel -y en última instancia a Estados Unidos por su apoyo y presencia en la región- de la muerte de Saleh al Arouri, uno de los líderes de Hamas en Beirut.
“Los cobardes asesinatos cometidos por el ocupante sionista contra los líderes y símbolos de nuestro pueblo palestino dentro y fuera de Palestina no lograrán quebrar ni la voluntad ni la resiliencia de nuestro pueblo, ni entorpecer la continuación de su valiente resistencia”, declaró en un comunicado Ezzat al Rishq, miembro de la oficina política de Hamas mientras la milicia libanesa aseguró que “este crimen no pasará sin respuesta y castigo”.
(Con información de AFP)