El número dos de la oficina política del grupo terrorista palestino Hamas, Saleh Al Arouri, murió este martes en un bombardeo en el sur de Beirut, la capital de Líbano.
Acusado por Israel de ser el cerebro de múltiples atentados, Saleh Al Arouri fue uno de los fundadores del brazo armado de Hamas y en 2017 fue elegido adjunto de Ismail Haniyeh, el jefe del Buró Político de la organización terrorista. Estuvo preso en distintas cárceles israelíes durante más de una década y fue liberado en 2010 bajo condición de exiliarse. Desde 2018 residió en Líbano y era uno de los líderes en exilio más prominentes de Hamas, que cuenta con varios representantes en el Líbano así como en otro países de la región.
“Al Arouri financia y dirige las operaciones militares de Hamas en Cisjordania y se le ha vinculado con varios atentados terroristas, raptos y secuestros”, explicó un antiguo comunicado del Departamento de Estado de EEUU donde pedía colaboración para su captura. “En 2014, Al Arouri anunció la autoría de Hamas en el atentado terrorista del 12 de junio, donde fueron secuestrados y asesinados tres adolescentes israelíes en Cisjordania, entre ellos el ciudadano israelí y estadounidense Naftali Fraenkel. Al Arouri elogió públicamente los asesinatos, a los que denominó como una ‘operación heroica’”, añadió el texto estadounidense.
En septiembre de 2015, Washington clasificó a Saleh Al Arouri como “Terrorista Global Especialmente Designado” y lo sancionó con el bloqueo de todos sus bienes sujetos a la jurisdicción de EEUU.
Nacido en 1966 en la localidad cisjordana de Aroura, se le atribuye la responsabilidad de varios ataques contra Israel desde suelo libanés pero también era considerado el líder de Hamas en Cisjordania.
Miembro de Hamas desde 1987, encabezó la delegación del grupo terrorista en las sucesivas conversaciones de reconciliación con el partido Al Fatah en Cisjordania. En 2011 ayudó a negociar la liberación del soldado israelí capturado Gilad Shalit a cambio de 1.027 presos palestinos detenidos en cárceles israelíes. Y en septiembre de 2020 llegó a un acuerdo con el secretario general de Al Fatah, Jibril Rajoub, en Estambul para coordinar la celebración de elecciones legislativas y presidenciales palestinas al año siguiente, que finalmente fueron canceladas por el presidente Mahmud Abbas.
En octubre de 2017 lideró una delegación de Hamas a Irán para una reunión con Ali Shamkhani, secretario del Consejo de Seguridad Nacional iraní, y días después, en noviembre, mantuvo un encuentro público con Hasán Nasralá, jefe máximo del grupo terrorista libanés Hezbollah.
Además, ha sido uno de los principales intermediarios en el acuerdo para intercambiar presos palestinos en Israel por rehenes secuestrados por Hamas el pasado 7 de octubre. Hace ahora un mes, en declaraciones a la cadena de televisión Al Jazeera, afirmó que el resto de prisioneros del grupo terrorista eran soldados o antiguos soldados y que no serían liberados hasta que Israel pusiera fin a los ataques sobre la Franja de Gaza.
Este martes Hamas confirmó la muerte de Al Arouri en un bombardeo contra una oficina del grupo terrorista a las afueras de Beirut, donde también fallecieron otras cinco personas. En un comunicado, Hamas culpó a “la ocupación sionista”, en alusión a Israel, de asesinar “cobardemente” a líderes palestinos “dentro y fuera de Palestina”.
(Con información de AFP, AP, EFE y EuropaPress)