Al menos nueve soldados sirios murieron y más de una veintena resultaron heridos este martes en un ataque perpetrado por el grupo yihadista Estado Islámico (EI) contra varias de sus posiciones en la provincia oriental de Deir al Zur, informó el Observatorio Sirio de Derechos Humanos.
Combatientes de la formación yihadista atacaron anoche una serie de “posiciones y congregaciones” pertenecientes a las fuerzas leales al dictador sirio, Bashar al Assad, en una zona desértica de la demarcación administrativa, indicó en un comunicado la ONG, con sede en el Reino Unido.
Según la ONG, que cuenta con una amplia red de colaboradores sobre el terreno, la operación se prolongó hasta primera hora de esta mañana y acabó con la vida de al menos nueve efectivos progubernamentales, algunos de ellos pertenecientes a las filas de la milicia Fuerzas de Defensa Nacional.
Además de herir a otra veintena de militares sirios, los atacantes destruyeron tres camionetas todoterreno y se incautaron de un cuarto vehículo equipado con un cañón antes de abandonar la zona.
El Estado Islámico fue derrotado territorialmente en Siria en marzo de 2019, pero todavía mantiene células en activo en varias zonas del país, concentradas principalmente en el vasto desierto central de Badia, donde la complicada orografía ayuda a su supervivencia.
Según datos del Observatorio, al menos 693 personas murieron a lo largo de 2023 en operaciones llevadas a cabo por el Estado Islámico en diferentes partes de Siria, la mayoría de ellas miembros del Ejército del país árabe y de las milicias que lo apoyan.
La ONG contabilizó un total de 171 ataques perpetrados por el Estado Islámico en el vasto desierto central del país, donde estima que el grupo aún tiene presencia en un área equivalente a unos 4.000 kilómetros cuadrados.
Por su parte, en los últimos doce meses el grupo terrorista solo perdió a 82 miembros en diferentes ofensivas terrestres, bombardeos aéreos, asesinatos selectivos o enfrentamientos con oponentes de distinto signo.
(Con información de EFE)