“La vida es un misterio
Todos deben estar solos
Te escucho decir mi nombre
Y se siente como en casa”.
El 7 de octubre, alrededor de 247 personas fueron secuestradas por la organización terrorista palestina Hamas, en un mortal ataque en el que murieron más de 1.200 personas. Un alto el fuego de una semana de duración provocó el intercambio de docenas de rehenes por decenas de prisioneros palestinos retenidos por Israel.
Pero aproximadamente 129 rehenes permanecen en la Franja de Gaza, según el ejército israelí. La mayoría son hombres, pero sigue habiendo mujeres y niños, de acuerdo al portavoz militar Daniel Hagari. La gran mayoría son israelíes, pero también hay personas de otros países.
Esta situación se ha apoderado de la nación, y el llanto de los familiares que aún claman por el regreso de sus seres queridos resuena en todo el mundo.
En el mes de noviembre, en un intento de concientizar sobre la situación crítica de los cautivos, el proyecto Koolulam, asociado a las familias de los rehenes secuestrados por Hamas y el Teatro de Cámara de Tel Aviv, lanzó un videoclip de la canción Like a Prayer de Madonna. Esta versión del tema incluye a familiares de los rehenes en Israel y a simpatizantes de más de 100 países como Argentina, Australia, Brasil, Alemania, Japón, Canadá y Estados Unidos.
Michal Shahaf, cofundadora & CEO global de Koolulm, dijo en diálogo con Infobae que “este proyecto tiene dos objetivos principales. El primero es crear conciencia en todo el mundo sobre la importancia de recuperar a los rehenes que todavía están retenidos en Gaza: mujeres, niños, bebés y personas mayores. Y queremos que la gente de todo el mundo comprenda la pesadilla que están pasando las familias aquí y la pesadilla que están pasando los rehenes que están retenidos en Gaza, y que hagan todo lo posible para liberarlos de inmediato”.
“El segundo objetivo es mostrar a los ciudadanos de Israel cuántas comunidades diferentes en todo el mundo nos abrazan, nos apoyan y nos ayudan a superar esta pesadilla”.
El videoclip comienza en Tel Aviv, mostrando a los cantantes detrás de sillas vacías con carteles de los secuestrados e incluye un collage fotográfico con todos los rehenes y el hashtag #BringThemHomeNow. Los organizadores del proyecto han manifestado su apoyo a las familias, afirmando su voluntad de “hacer lo que mejor sabemos hacer, cantar juntos, para crear una armonía humana que llama al mundo a devolver a los civiles, niños y ancianos a sus hogares”.
Shahaf afirmó que eligieron la canción Like a Prayer porque “habla sobre el deseo de escuchar la voz de alguien a quien amamos. Creemos que todas sus letras -y también la propia Madonna- apoyan el mensaje que queremos llevar y cuánto anhelamos obtener información de nuestros familiares que están detenidos en Gaza en este momento”.
Luego del ataque, la misma Madonna se refirió al ataque de Hamas: “Lo que está sucediendo ahora entre Israel y Palestina obviamente es desgarrador. Veo niños arrojados de motocicletas, secuestrados, bebés decapitados, niños en fiestas de paz siendo asesinados a tiros, ¿qué carajo está pasando en el mundo?”.
El director de Koolulam, Ben Yefet, elaboró un nuevo arreglo de la canción originalmente lanzada en 1989, que, con esta nueva interpretación, adquirió un significado inquietante.
La iniciativa de Koolulam ha generado un notable eco en la comunidad internacional, reflejando el poder de la música como herramienta de unión y protesta en tiempos de crisis. Las acciones de solidaridad y el eco en las redes sociales continúan en un esfuerzo por influir en una resolución positiva y rápida del secuestro masivo orquestado por Hamas.
“La música es un lenguaje internacional”, resume Shahaf, “y es una gran herramienta para recordarle a la gente las cosas que nos acercan, además de las cosas que nos separan, porque la música está en todas partes”.