Cómo utiliza Israel la Inteligencia Artificial para combatir en Gaza

Los algoritmos eligen los sitios a bombardear, los robots exploran los túneles antes de que lleguen los soldados, las tropas se mueven al ritmo que les marca un mapa digital. Qué hace y cómo funciona la plataforma “Evangelio” sobre la que operan los militares

Guardar
El sistema Cúpula de Hierro israelí, que funciona en una base de Inteligencia Artificial, intercepta misiles lanzados desde la Franja de Gaza sobre la ciudad de Tel Aviv (EFE/EPA/Mohammed Saber)
El sistema Cúpula de Hierro israelí, que funciona en una base de Inteligencia Artificial, intercepta misiles lanzados desde la Franja de Gaza sobre la ciudad de Tel Aviv (EFE/EPA/Mohammed Saber)

El ejército israelí cuenta con una plataforma de Inteligencia Artificial denominada Habsora (Evangelio) para “producir objetivos a gran velocidad”, elaborar mapas interactivos para el movimiento de las tropas y marcar las posiciones de Hamas, entre muchas otras aplicaciones bélicas. Las Fuerzas de Defensa Israelíes (FDI) afirman que “mediante la extracción rápida y automática de inteligencia”, Evangelio produce recomendaciones de objetivos para sus investigadores “con el objetivo de una coincidencia completa entre la recomendación de la máquina y la identificación llevada a cabo por una persona”. Y esta es apenas una de las múltiples plataformas de tecnología avanzada que utilizan los israelíes y también en forma más acotada los terroristas de Hamas en la que se convirtió en la primera guerra en la que la Inteligencia Artificial es un instrumento fundamental del combate.

“En esta guerra estamos presenciando algo que no habíamos visto en guerras anteriores: las fuerzas terrestres, incluido el cuerpo blindado, se benefician de la información de inteligencia precisa y en tiempo real que se les transmite directamente”, declaró el general de brigada Hisham Ibrahim, comandante del cuerpo blindado de las FDI. “La información de las unidades de inteligencia se transmite rápidamente a las fuerzas de combate”.

Al comenzar la guerra, Habsora tenía una base de datos de unos 30.000 líderes y milicianos de Hamas con todos los datos específicos de sus actividades y vida civil y militar. “Esto nos permitió tener objetivos muy claros en las primeras horas de la guerra y los bombardeos. También marca claramente quién es un objetivo y su categoría, algo que es de gran ayuda para el oficial que tiene que tomar una decisión en tiempo real”, explicó una fuente militar al sitio israelí +972/Local Call. Aviv Kochavi, que fue jefe de las FDI hasta enero pasado, había dicho en una entrevista anterior que Habsora es “una máquina que produce grandes cantidades de datos con más eficacia que cualquier ser humano, y los traduce en objetivos para el ataque”. Y dio como ejemplo de su eficacia que “en el pasado producíamos 50 objetivos en Gaza al año; ahora, esta máquina produce 100 objetivos al día, con un 50% de ellos atacados.”

Mapa de la Franja de Gaza generado por la Inteligencia Artificial en el que se ve el territorio dividido por celdas. (Israel Breaking News)
Mapa de la Franja de Gaza generado por la Inteligencia Artificial en el que se ve el territorio dividido por celdas. (Israel Breaking News)

Los expertos afirman que los sistemas de apoyo a la toma de decisiones basados en IA para la selección de objetivos analizan grandes conjuntos de información procedente de diversas fuentes, como imágenes de drones, comunicaciones interceptadas, datos de vigilancia e información extraída del seguimiento de los movimientos y patrones de comportamiento de individuos y grandes grupos.

Según cifras publicadas por las FDI en noviembre, durante los primeros 35 días de la guerra Israel atacó 15.000 objetivos en Gaza, una cifra considerablemente superior a la de anteriores operaciones militares en el densamente poblado territorio. En comparación, en la guerra de 2014, que duró 51 días, atacaron entre 5.000 y 6.000 objetivos.

Varios entrevistados dijeron al diario británico The Guardian y a +972/Local Call que cuando se autorizaba un ataque contra viviendas particulares de personas identificadas como milicianos operativos de Hamás o de la Yihad Islámica, los investigadores sabían de antemano el número de civiles que se esperaba que murieran. Cada objetivo, dijeron, tiene un archivo que contiene una puntuación de daños colaterales que estipula cuántos civiles es probable que mueran en un ataque. Una fuente que trabajó hasta 2021 en la planificación de ataques para las IDF dijo que “la decisión de atacar la toma el comandante de turno de la unidad”, algunos de los cuales son “más de gatillo fácil que otros”. La fuente que habló con el corresponsal de The Guardian dijo que había habido ocasiones en las que “hubo dudas sobre un objetivo” y “matamos lo que yo pensaba que era una cantidad desproporcionada de civiles”.

Un portavoz militar israelí respondió: “En respuesta a los bárbaros ataques de Hamás, las IDF operan para desmantelar las capacidades militares y administrativas de Hamás. En marcado contraste con los ataques intencionados de Hamás contra hombres, mujeres y niños israelíes, las FDI se atienen al derecho internacional y toman las precauciones factibles para mitigar los daños a civiles.” La doctora Marta Bo, investigadora del Instituto Internacional de Estocolmo para la Investigación de la Paz, afirma que incluso cuando “los humanos están a cargo” existe el riesgo de que desarrollen un “sesgo de automatización” y “confíen excesivamente en los sistemas, que llegan a tener demasiada influencia sobre decisiones humanas complejas”.

En el mundo científico se debate sobre la magnitud del número de víctimas y de la destrucción que están provocando los bombardeos diseñados por la Inteligencia Artificial. (Mohammed Talatene/dpa)
En el mundo científico se debate sobre la magnitud del número de víctimas y de la destrucción que están provocando los bombardeos diseñados por la Inteligencia Artificial. (Mohammed Talatene/dpa)

Todo el sistema de Inteligencia Artificial que utiliza en esta guerra el ejército israelí está siendo constantemente actualizado con las nuevas informaciones y evidencias que se recolectan en el campo de batalla. En una reunión informativa para periodistas celebrada el lunes en una base militar al norte de Tel Aviv, el ejército israelí compartió parte del material recogido en el transcurso de la guerra entre los combatientes muertos y en zonas del interior de la Franja de Gaza, que incluye mapas, panfletos, transmisores, teléfonos, cámaras de vídeo, walkie-talkies, ordenadores portátiles y ordenadores. La información está siendo analizada por una nueva unidad israelí encargada de garantizar que los resultados lleguen rápidamente a la base de datos.

Apenas un día más tarde, la oficina de prensa de las FDI difundió una fotografía de lo que dijo eran altos mandos militares de Hamás en el norte de Gaza disfrutando de una comida en el interior de un túnel, afirmando que cinco de los hombres habían muerto. El ejército dijo que una unidad de inteligencia israelí había analizado la foto después de que fuera incautada en Gaza en un túnel cerca del Hospital Indonesio. El ala militar de Hamás, las Brigadas Al Qassam, había confirmado previamente que tres de los hombres de la foto habían muerto.

El general Aviv Kochavi dijo en la entrevista publicada antes de la guerra que las FDI “poseen capacidades similares a las de Matrix: cada brigada tiene ahora un sofisticado aparato de inteligencia parecido al de la película Matrix, que proporciona inteligencia en tiempo real”. “Entre todas las revoluciones tecnológicas, la inteligencia artificial será probablemente la más radical, para bien o para mal. Las Fuerzas de Defensa de Israel reconocieron este campo hace años y lo aprovecharon para mejorar la eficacia en combate”. Añadió que hace tres años se creó una “Dirección de Objetivos”. “Se trata de una unidad formada por cientos de oficiales y soldados, con capacidades de inteligencia artificial”, afirmó.

Un drone israelí, manejado por un sistema de Inteligencia Artificial, lanza gases lacrimógenos para dispersar a manifestantes palestinos en Cisjordania. (REUTERS/Mohammed Salem)
Un drone israelí, manejado por un sistema de Inteligencia Artificial, lanza gases lacrimógenos para dispersar a manifestantes palestinos en Cisjordania. (REUTERS/Mohammed Salem)

La ventaja tecnológica de Israel en materia de IA se muestra especialmente en el uso de drones o vehículos aéreos no tripulados (UAV) como el Golden Eagle desarrollado por los técnicos militares y que se utilizan desde hace años para vigilar los territorios ocupados. Los drones Golden Eagle utilizan IA para fijar objetivos estáticos y en movimiento y realizar un seguimiento en tiempo real. Según la empresa mixta que los produce “garantizan impactos precisos en tierra o aire, independientemente de las condiciones de iluminación”. Desde que los utilizaron por primera vez en la guerra en 2021, cuando las FDI lanzaron la denominada “Operación Guardián de los Muros” sobre Gaza, que dejó 261 palestinos muertos e hirió a 2.200, estos aparatos fueron mejorados y ahora proveen permanentemente de información a los sistemas de análisis y decisión como el Evangelio.

El Golden Eagle es ya un producto de exportación. Se sabe que ya los tienen las fuerzas armadas de Chile, China, India, Corea del Sur y Turquía. De esta tecnología derivó, por ejemplo, la aplicación Waze que se utiliza en todo el mundo para orientar a los conductores de autos. Dicen que Google la compró en 2013 por más de 1.000 millones de dólares.

El sistema de defensa denominado Cúpula de Hierro, que intercepta cohetes y misiles de corto y mediano alcance lanzados por Hamas desde Gaza, el Hezbollah desde El Líbano o los houthies desde Yemen, también fue mejorado con IA. Su funcionamiento implica la utilización de análisis predictivos y aprendizaje automático para identificar y neutralizar los proyectiles. El sistema puede detectar un cohete entrante a distancias de hasta 70 kilómetros teniendo en cuenta diversos factores como la velocidad, las condiciones meteorológicas y el tamaño del proyectil para calcular con precisión su trayectoria y el posible punto de impacto. Una vez recopilados estos datos críticos, el sistema los analiza y despliega un contramisil para interceptar y eliminar la amenaza. Tiene un nivel de eficacia superior al 90%.

La tropas israelíes son dirigidas por la información recolectada por el sistema de Inteligencia Artificial, Habsora. (IDF Photo/Europa Press)
La tropas israelíes son dirigidas por la información recolectada por el sistema de Inteligencia Artificial, Habsora. (IDF Photo/Europa Press)

Las FDI también incorporaron la IA a sus operaciones de logística. Este sistema se denomina Fire Factory (Fábrica de Fuego) y se utiliza para calcular las cargas de munición necesarias o asignar objetivos a aviones de combate y drones militares. También detecta movimientos similares en las filas enemigas, como el transporte de armas, municiones y soldados. El general retirado Eyal Zamir habló sobre este sistema en la Conferencia de Herzliya, un encuentro anual sobre seguridad militar. “Si lo comparamos a cómo trabajábamos hace diez años atrás, este sistema ahorra días y días de trabajo y permite a los oficiales concentrarse en la batalla en vez de estar preocupados por la llegada o no de un camión de pertrechos”.

Estos son apenas algunos de los elementos basados en la Inteligencia Artificial que se conocen. Hay muchos más en desarrollo y que seguramente tendrán su primera experiencia en esta guerra. Particularmente, se verán en acción cuando comience la lucha por el control final de la red de túneles que Hamas controla en Gaza. Pero también se sabe que Israel tiene enormes inversiones en el desarrollo de Sistemas de Armas Autónomas Letales (LAWS) que podrían también tener alguna prueba en esta guerra tan asimétrica cuando aún no hay ninguna legislación para su control.

Guardar