El ministro de Defensa de Israel, Yoav Gallant, adelantó este martes que sus tropas se están preparando para intensificar sus ofensivas en la frontera norte y evitar una escalada en los ataques que Hezbollah lanza desde el Líbano.
El titular de la cartera explicó que, una vez controlada la situación en Gaza -donde el Ejército avanza a un paso veloz tanto por el norte como por el sur-, los soldados se concentrarán en repeler los “ataques a corta distancia” provenientes de este frente.
Las acciones buscarán no sólo neutralizar a las milicias terroristas pro iraníes que operan desde el Líbano sino, también, brindar a las decenas de miles de residentes de las localidades del norte -muchos de los cuales se han visto obligados a evacuar sus casas- mayor seguridad ya sea para continuar allí o para regresar con garantías concretas.
“Permitiremos a los residentes regresar a sus hogares sólo cuando las condiciones sean propias para hacerlo, cuando estemos seguros de que podemos brindarles protección”, dijo Gallant durante una reunión con los alcaldes de la zona y precisó que ello se logrará gracias a la presencia de fuerzas israelíes y por medio de “un concepto general de defensa, con una disposición distinta” a nivel militar.
Intentaremos evitar “amenazas en el área” con misiles antitanque y “la presencia de Hezbollah” y otros grupos armados “que puedan atacar el territorio israelí desde corta distancia en la frontera”, insistió Gallant en un intento por dejar en claro que es una de las prioridades del Ejército revertir el clima de hostilidades actual.
El Ministro sumó que, en primera instancia, el gabinete de Tel Aviv apelará a alcanzar un acuerdo diplomático “mediado por partes internacionales” para garantizar este cese del fuego pero enfatizó en que si las fuerzas enemigas se oponen a esta iniciativa, no dudarán en actuar militarmente.
“La segunda posibilidad es que nos veamos obligados” a alejar a Hezbollah “por la fuerza”. “No queremos la guerra pero si llegamos a una situación en la que necesitemos establecer nuestra seguridad, no dudaremos en ello”, dijo.
Por último, Gallant advirtió nuevamente a la milicia chií y al pueblo del Líbano sobre las consecuencias de sus acciones y de no adherir a una propuesta de paz, tal como viene haciendo desde el inicio del conflicto el pasado 7 de octubre.
“Cuanto más logremos en Gaza, más claras serán las cosas. Cada persona en el Líbano puede tomar un mapa, una fotografía aérea de Gaza, ponerlos sobre la imagen aérea de Beirut y preguntarse si esto es lo que quiere que suceda” en la capital libanesa, alertó.
Este miércoles, las FDI siguieron cruzando fuego con Hezbollah, con bombardeos tanto por tierra como por aire.
La milicia alcanzó las bases del Ejército israelí en Arab al-Aramshe y Monte Hermón, y lanzó al menos 10 misiles contra Beersheba, a lo que Tel Aviv respondió con ataques de tanques, un avión militar y artillería varia sobre un centro de mando e infraestructura militar.
Hezbollah fue junto a la Yihad Islámica y los rebeldes hutíes de Yemen una de las milicias terroristas pro iraníes que más manifestó su apoyo a Hamas en la guerra contra Israel, con ofensivas casi diarias contra el territorio, en un intento por debilitarlo y obstaculizar su avance sobre Gaza.
Tal fue su grado de involucramiento que ya se han registrado al menos 120 muertos. 10 de ellos fueron en Israel -siete soldados y tres civiles- mientras que los restantes 110 perdieron la vida en el Líbano. En su caso fueron por lo menos 80 combatientes, 12 integrantes de otras milicias palestinas, un soldado y 17 civiles -tres periodistas y tres niños entre ellos-.
(Con información de EFE)