Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) localizaron un alijo de morteros escondidos en una guardería en el norte de Gaza, según muestran imágenes publicadas por el ejército, mientras continúa la ofensiva terrestre en el interior del enclave controlado por Hamas.
Asimismo, las FDI dijeron que la unidad de reconocimiento de la Brigada Golani asaltó la escuela al-Karmel en la ciudad de Gaza, y encontró armas de fuego, granadas propulsadas por cohete y equipo militar.
Los hallazgos parecen confirmar que el grupo terrorista utiliza edificios civiles, como escuelas y hospitales, para encubrir sus actividades, tal como afirma Israel.
Entre los edificios en cuestión se encuentra el hospital Al Shifa, el mayor de la Franja, que Israel registró este viernes por tercer día consecutivo. Israel ha defendido su operación en Al Shifa afirmando que encontró rifles, munición, explosivos y la entrada a un túnel en el complejo hospitalario.
El primer ministro, Benjamín Netanyahu, afirmó que incluso podría haber rehenes retenidos en el centro médico.
“Teníamos fuertes indicios de que estaban retenidos en el Hospital Shifa, que es una de las razones por las que entramos en el hospital”, declaró a CBS Evening News. “Si lo estaban, fueron sacados”, añadió.
Israel dijo que sus fuerzas estaban registrando Al-Shifa “edificio por edificio”.
Por otra parte, las IDF dijeron que tropas de la 7ª Brigada Blindada y del 12º Batallón Golani identificaron a un grupo de operativos de Hamas en la ciudad de Gaza e intentaron perseguirlos. Mientras los hombres armados huían, las tropas solicitaron un ataque con drones para matarlos.
El ejército también dijo que las tropas habían recuperado los restos de la soldado secuestrada Noa Marciano, de 19 años, “de una estructura adyacente al hospital Al-Shifa”. Israel había confirmado su muerte esta semana, sin indicar la causa. Hamás dijo que había muerto en un bombardeo israelí.
El jueves, el ejército dijo que los soldados que se encontraban cerca de Al-Shifa habían hallado el cadáver de otro rehén. Se trata de Yehudit Weiss, de 65 años, que había sido secuestrada en la comunidad kibutz de Beeri.
Israel prometió “aplastar” a Hamas en respuesta al ataque del 7 de octubre, cuando el grupo atravesó la frontera militarizada de Gaza para matar a unas 1.200 personas, la mayoría civiles, y tomar como rehenes a unas 240, según funcionarios israelíes.
La campaña aérea y terrestre del ejército ha matado a unas 11.500 personas, entre ellas miles de niños, según Hamas, que gobierna Gaza desde 2007.
En respuesta a una petición de Estados Unidos, el gabinete de guerra israelí decidió por unanimidad permitir “la entrada de dos camiones cisterna de combustible diésel al día para las necesidades de la ONU de apoyo a las infraestructuras de agua y alcantarillado... siempre que no llegue a Hamas”, dijeron funcionarios israelíes.
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