43 minutos imposibles de borrar: Israel proyectó imágenes inéditas de la masacre terrorista de Hamas

La embajada israelí en Buenos Aires convocó a políticos, líderes sociales, periodistas y artistas a una proyección cerrada sobre la barbarie yihadista del 7 de octubre

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Almohadas cubiertas de sangre yacen en el sofá de una casa destruida, tras el mortal ataque del 7 de octubre perpetrado por terroristas de Hamas desde la Franja de Gaza, en el kibutz Kfar Aza, sur de Israel (Reuters)
Almohadas cubiertas de sangre yacen en el sofá de una casa destruida, tras el mortal ataque del 7 de octubre perpetrado por terroristas de Hamas desde la Franja de Gaza, en el kibutz Kfar Aza, sur de Israel (Reuters)

Las imágenes se sucedían una tras otra como un frenético torbellino de terror imposible de borrar. Fueron un total de 43 minutos donde el gobierno de Israel, mediante su cancillería, proyectó escenas de la mañana del 7 de octubre pasado, cuando miles de terroristas de Hamas cruzaron desde la Franja de Gaza para asesinar, violar, torturar, decapitar, incinerar y secuestrar a niños, mujeres, soldados y civiles dentro de sus casas o en la vía pública, en una cacería impiadosa que duró interminables horas.

La Embajada de Israel en Buenos Aires convocó a políticos, empresarios, líderes sociales, de la comunidad judía, periodistas y artistas, a ser testigos de los hechos cometidos hace más de un mes por los terroristas palestinos. La presentación estuvo a cargo del embajador en la Argentina Eyal Sela, y el Agregado de Defensa israelí, Coronel Amit Guy, quienes explicaron la dinámica y las condiciones del encuentro. Entre los presentes también estaba el embajador de los Estados Unidos, Marc Stanley. Todas las imágenes, crudas y sin editar, fueron autorizadas por los familiares de las víctimas, que quisieron que el mundo fuera testigo de la barbarie yihadista. Sin embargo, estuvo prohibida su reproducción pública total o parcial.

Conjuntamente con la proyección, se repartió un fragmento de la carta fundacional de Hamas -publicada el 18 de agosto de 1988- en la cual se explicita de manera abierta que el objetivo de la agrupación extremista es desde entonces la “destrucción” de Israel y la “muerte” de los judíos. “El Día del Juicio no llegará hasta que los musulmanes no luchen contra los judíos y les den muerte. Entonces, los judíos se esconderán detrás de las rocas y de los árboles y éstos últimos gritarán: ‘¡Oh, musulmán!, un judío se esconde detrás de mí, ven a matarlo’”, dice el artículo 7 de ese documento.

Bajo esos preconceptos y motivaciones la cúpula de Hamas, conducida por Yahya Sinwar en Gaza, ordenó la matanza del 7 de octubre. La emisión hecha por la embajada de Israel muestra grabaciones hechas, en su mayoría, por los propios terroristas que se vanagloriaban constantemente de asesinar a los “perros”, como llamaban una y otra vez a los judíos que eran alcanzados por sus disparos. “¡Alá es grande!”, fue otro de los gritos de guerra que se escucharon repetidas veces durante la perturbadora proyección.

Civiles asesinados por Hamas, yacen en el piso en Sderot, Israel, el 7 de octubre de 2023 (AP)
Civiles asesinados por Hamas, yacen en el piso en Sderot, Israel, el 7 de octubre de 2023 (AP)

Así como durante el epílogo de la Segunda Guerra Mundial el mundo pudo observar la barbarie nazi en los campos de concentración con fotografías y filmaciones desgarradoras e imborrables, estas grabaciones en alta definición obtenidas de cámaras de seguridad y de tránsito, bodycam de los propios yihadistas, teléfonos celulares y redes sociales, también actuarán como un símbolo de lo que el terrorismo islámico es capaz de hacer conducido por el odio hacia los judíos.

El video de 43 minutos expuso secuestros, decapitaciones, el ultraje de cuerpos sin vida, fusilamientos en plena ruta, incendios de viviendas, todo dado en un marco de sadismo sin límites. Las imágenes muestran, incluso, la desesperación por la supervivencia de las víctimas, que intentan esconderse de los verdugos para no ser localizados y tratan de hacer silencio adivinando, bajo susurros, dónde estarán los islamistas... sin suerte: segundos después son hallados y ejecutados. Los extremistas festejan nuevamente: “¡Alá es grande!”; “¡soy un héroe!”; “¡muere, perro!”.

Al concluir la grabación ninguno de los presentes, unos cien invitados, emitió sonido alguno. Fue un silencio apabullante. No había nada para comentar. Minutos después, el embajador Sela respondió breves preguntas a los periodistas y dejó algunos conceptos: “La idea de mostrar esto es para que se sepa que existió, que entraron hasta las casas”; “lo que más me duele es ver cómo festejan (los asesinatos)”; “es la peor masacre (contra judíos) desde la Segunda Guerra Mundial, desde el Holocausto”; “cada uno que no condena esto, premia a Hamas”; “no hay información de los secuestrados”; “el primer objetivo de Israel es liberar a los rehenes”.

Hamas asesinó a 1.200 víctimas y secuestró a 240 personas el 7 de octubre pasado. Fue el mayor ataque terrorista antisemita de la historia. Al terminar el programa organizado por la embajada de Israel, sobre una Avenida de Mayo cortada al tránsito, una ruidosa manifestación agitaba banderas de Palestina.

Twitter: @TotiPI

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