El conflicto entre Israel y Palestina se reavivó el pasado sábado 7 de octubre tras los ataques terroristas de Hamas. Como respuesta, Tel Aviv inició la operación “Espadas de Hierro” y decretó el estado de guerra contra el grupo extremista.
Si bien el atentado terrorista que dejó más de mil judíos muertos, no tiene precedentes, este nuevo foco de tensión representa un nuevo capítulo en el marco de un conflicto que lleva décadas sin una solución pacífica y que ya se cobró la vida de miles de israelíes y palestinos.
A continuación, un repaso por cada una de las guerras que se desarrollaron en el marco del conflicto árabe-israelí.
Primera guerra tras el nacimiento del Estado de Israel (1948)
El 9 de noviembre de 1947 la Organización de Naciones Unidas (ONU) aprobó el Plan de Partición con el objetivo de dividir el mandato británico de Palestina en dos Estados: uno judío (Israel) y uno árabe (Palestina). Al mismo tiempo, proponía que la ciudad de Jerusalén quedara bajo control internacional. Sin embargo, nunca se llegó a aplicar. Israel aceptó el plan, pero éste fue rechazado por el mandato británico y por los árabes.
Como consecuencia creció el descontento de la comunidad árabe, que terminó en un estallido de la violencia con cerca de mil muertos entre diciembre de 1947 y 1948.
Horas después de finalizado el mandato británico, el entonces presidente del Consejo Nacional Judío, David Ben-Gurión, proclamó la independencia del Estado de Israel el 14 de mayo de 1948. Apenas un día después, los cinco países vecinos de Israel (Líbano, Siria, Egipto, Transjordania e Irak) le declararon la guerra, dando comienzo a la primera guerra árabe-israelí.
Esa guerra fue llamada “de la independencia” por los israelíes y “de la infamia” o “de la catástrofe” (Nakba) por los palestinos. La primera parte del conflicto armado se extendió hasta el 11 de junio, con las batallas más violentas registradas en Jerusalén y sus alrededores. En esos primeros días las fuerzas árabes lograron un importante avance asestando un duro golpe a las fuerzas israelíes.
Con gran parte del territorio tomado, por esos días el mayor temor era que esos primeros días del Estado de Israel se convirtieran en los últimos.
La situación era seguida con gran preocupación por las Naciones Unidas. Así, el 20 de mayo de 1948 el conde Folke Bernadotte fue nombrado mediador oficial en el conflicto. Nueve días después, el Consejo de Seguridad llamó a las partes a un alto el fuego y aplicó un embargo de los envíos de armas a ambas tropas. El 9 de junio las partes aceptaron una tregua de cuatro semanas; tregua que finalmente empezó a regir el día 11.
La lucha, no obstante, se mantendría hasta fin de año.
Israel logró revertir la situación y terminó ocupando el 77% del territorio que Palestina había tenido bajo el mandato británico, incluida la mayor parte de Jerusalén. El resto del territorio que había sido asignado al Estado árabe por Naciones Unidas quedó bajo el control de Jordania y Egipto.
Segunda guerra árabe-israelí (1956)
La clara victoria de Israel en el conflicto de 1948-1949 no había puesto fin a las hostilidades. Egipto, que había mantenido el control de parte del territorio, permitió que éste sirviera para que los palestinos lanzaran ataques contra Israel. También se registraban agresiones, en menor medida, desde Siria, Jordania y Líbano.
Mientras Israel robustecía su fortaleza militar y respondía esos ataques creando unidades especializadas, Egipto estrechaba sus lazos con la Unión Soviética y también se rearmaba.
El 26 de julio de 1956, el ex presidente egipcio Gamal Abdel Nasser (1956-1970) decretó la nacionalización del Canal de Suez, punto estratégico del comercio marítimo mundial y que hasta entonces era gestionado por una compañía francesa y hasta 1955 había sido protegido militarmente por Gran Bretaña.
Francia, Reino Unido e Israel formaron una alianza para recuperar el Canal de Suez y terminar con las pretensiones de Nasser. Las fuerzas israelíes ocuparon la Franja de Gaza y la península del Sinaí. Sin embargo, en medio de las presiones de Estados Unidos y la URSS, Israel retiró sus tropas en marzo de 1957.
Guerra de los Seis Días (1967)
Entre el 5 y el 10 de junio de 1967 se desarrolló un conflicto armado que provocó grandes y duraderas consecuencias, transformando el tablero geopolítico de Medio Oriente. De hecho, muchos de sus efectos aún perduran en la región.
En ese entonces Israel se enfrentó en tres frentes a los ejércitos de Egipto, Siria y Jordania. El resultado fue una victoria contundente del Ejército israelí.
Israel le arrebató a Egipto el control de la península del Sinaí y la Franja de Gaza; los Altos del Golán a Siria; y Jerusalén Este y Cisjordania a Jordania.
Sólo en esa semana, Israel consiguió cuadruplicar su territorio y destruyó casi por completo la maquinaria bélica de sus enemigos. Esto le permitió aumentar su músculo de poder en Medio Oriente.
El detonante tuvo lugar un mes antes, en mayo. Tras décadas de tensión en la zona, Egipto había solicitado a la ONU la retirada de las unidades que custodiaban el Sinaí. Ante la falta de respuesta del organismo internacional, el coronel Nasser movilizó a sus tropas y bloqueó el estrecho de Tirán, ruta clave para las flotas israelíes. Israel advirtió en ese entonces que esa acción representaba una causa de guerra.
Mientras Egipto recibía colaboración militar de sus vecinos como Jordania, Irak, Arabia Saudita, Kuwait y Argelia, entre otros, Israel -aliado de Estados Unidos- sabía que su enemigo contaba con más hombres, tanques y aviones. Por eso, no espero la invasión egipcia y la mañana del lunes 5 de junio llevó a una la Operación Foco, que consistió en un bombardeo fulminante contra la aviación egipcia: las fuerzas israelíes destruyeron siete de cada diez aviones egipcios.
Horas más tarde, por orden del rey Hussein II, Jordania respondió con un ataque sorpresa contra Israel.
El jueves 8, Nasser y Hussein II aceptaron el alto el fuego propuesto por la ONU. Siria, en cambio, mantuvo los combates dos días más, hasta que se vio obligado a deponer las armas el sábado 10.
Guerra de Yom Kippur (1973)
La tensión entre árabes y judíos persistía, y entre el 6 y el 25 de octubre de ese año Egipto y Siria encabezaron una coalición de países árabes contra Israel. Los combates tuvieron lugar, principalmente, en el Sinaí y los Altos del Golán, territorios que El Cairo y Damasco habían perdido anteriormente. Además de recuperar el Sinaí, el entonces presidente egipcio, Anwar al Sadat, también pretendía reabrir el Canal de Suez.
Los árabes lanzaron un ataque sorpresa sobre posiciones israelíes justo en Yom Kippur, el día más sagrado del judaísmo.
Tras varios y crudos enfrentamientos, Israel logró repeler a las tropas árabes y tras un alto el fuego fallido que se debía implementar el 22 de octubre, tras la mediación de la ONU, el 25 de ese finalmente las partes cortaron las hostilidades.
El 17 de septiembre de 1978, Al Sadat y el primer ministro de Israel, Menachem Begin, firmaron los acuerdos de Camp David, con la mediación de Estados Unidos, que llevaron a un importante avance en las relaciones entre Israel y Egipto tras décadas de extremas tensiones.
En virtud de esos acuerdos, Egipto recuperó la península del Sinaí, y Al Sadat se convirtió en el primer dirigente árabe en reconocer el Estado de Israel.
Un año más tarde, en 1979, se sella un acuerdo de paz entre ambos países en Washington.
Primera Intifada y Segunda Intifada
Del concepto árabe “Nafada”, que significa temblar o sacudir, una “intifada” consiste en un levantamiento popular contra una fuerza ocupante en Medio Oriente. Si bien se lo suele vincular con la causa palestina, antes de los 80 hubo “intifadas” en otros territorios.
La primera intifada palestina, también conocida como “guerra de las piedras”, comenzó en diciembre de 1987, cuando comenzó una rebelión masiva de palestinos contra la ocupación israelí; rebelión que empezó en la Franja de Gaza y se extendió rápidamente hacia Cisjordania.
Al año siguiente, Yasser Arafat, líder de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP) proclamó la independencia de Palestina.
La primera intifada terminó en septiembre de 1993 con los Acuerdos de Oslo, firmados en Washington. Tras la caída de la Unión Soviética, que era una de las principales fuentes de armas de los países árabes, la OLP optó por negociar la paz con Israel. Los acuerdos establecieron la Autoridad Nacional Palestina para gobernar Gaza y Cisjordania. Sin embargo, las diferencias se mantuvieron y en 2000 estalló la Segunda Intifada, en la que el movimiento islamita Hamas -cuya fundación se remonta a 1987 durante la Primera Intifada- asumió mayor protagonismo, aumentando la violencia en la región.
En 2007 la ANP llamó a la población a iniciar una tercera intifada con la que paralizaron la construcción del muro en los pueblos de Budrus y Bil’in, en Cisjordania. El clima de violencia volvió en 2015, con la llamada “intifada de los cuchillos”, cuando grupos de judíos entraron a rezar a la Explanada de las Mezquitas. Ese levantamiento condujo a un estallido de las protestas de 2018 a 2019.
Cinco guerras con Hamas en menos de 20 años
El grupo terrorista palestino gobierna de facto la Franja de Gaza desde 2005. Desde entonces, los extremistas lanzaron innumerables misiles y cohetes contra territorio israelí, e intentaron decenas de infiltraciones a través de los túneles construidos en la frontera.
El 27 de octubre de 2008, el Ejército de Israel lanzó la operación “Plomo fundido”, por medio de la cual realizó ataques aéreos contra el enclave para poner fin a los disparos de cohetes que venían perpetrando los terroristas desde 2007.
El 14 de noviembre de 2012 comenzó la segunda guerra entre las partes. Israel dio luz verde a la operación “Pilar defensivo”, también en Gaza, y en los ataques logró abatir a Ahmad Jaabari, jefe de las operaciones militares de Hamas.
El 8 de julio de 2014 Israel lanzó la misión “Margen protector”. El objetivo era frenar los reiterados disparos de cohetes y destruir los túneles terroristas.
Tras 50 días de guerra, Israel y Hamas llegaron a un acuerdo por un alto el fuego, con la mediación de Egipto.
El 10 de mayo de 2021, el Ejército israelí emprendió la operación “Guardián de los muros” para reducir las capacidades militares de Hamas.
La quinta y última guerra se inició el 9 de mayo de este año, cuando Israel inició una serie de bombardeos contra la Yihad Islámica, otro grupo extremista que se encuentra en Gaza, en la que se conoció como operación “Escudo y flecha”.