Uno de los principales líderes del brazo armado de Hamas murió durante un ataque israelí en la Franja de Gaza, confirmaron este martes tanto el ejército israelí y el grupo terrorista palestino.
“Ayman Nofal, ‘Abu Ahmad’, miembro del consejo militar general y comandante del mando central en las Brigadas Al-Qassam, murió” en un ataque israelí en el centro de la Franja de Gaza, dijo Hamas en un comunicado, refiriéndose a su ala militar.
Al confirmar su muerte, el ejército israelí describió a Nofal como “una de las figuras más dominantes” de la organización terrorista.
“Aviones de combate de las FDI, bajo la dirección conjunta de inteligencia con el Shin Bet, mataron a uno de los miembros de alto rango de la organización terrorista Hamas, Ayman Nofal”, indicaron las Fuerzas de Defensa de Israel en un comunicado.
El 7 de octubre, los militantes de Gaza atacaron Israel, matando a más de 1.400 personas y desencadenando ataques de represalia israelíes en Gaza, donde han muerto unas 3.000 personas, según funcionarios de ambas partes.
Un comunicado del ejército israelí describió a Nofal como el antiguo jefe de inteligencia militar del grupo, implicado en la fabricación de armas y en la dirección de cohetes disparados contra Israel.
Nofal también estuvo “implicado en la planificación del secuestro de Gilad Shalit”, un soldado liberado en 2011 tras permanecer retenido durante más de cinco años, según el ejército.
Anteriormente, el martes, el ejército dijo que había matado a otro alto militante de Hamas, Osama Mazini, un anuncio que el grupo aún no ha comentado.
Israel había anunciado también la muerte de otros comandantes o dirigentes de Hamas desde que comenzó a bombardear objetivos en Gaza.
Hamas informó por separado de que las fuerzas israelíes habían atacado una vivienda de la ciudad de Gaza perteneciente a la familia del jefe de Hamas, Ismail Haniyeh, que reside en Qatar.
La propiedad pertenece al hermano de Haniyeh, dijo a la AFP una fuente de seguridad de Gaza.
Ante la escalada de las hostilidades, Israel ha evacuado muchas de sus comunidades fronterizas.
A los 2,4 millones de habitantes de Gaza les ha sido imposible abandonar el territorio palestino, ya que todas las salidas permanecen cerradas.