Una filmación grabada por las cámaras de seguridad mostró el momento en el que un autobús cae de un puente de la ciudad de Mestre, cerca de Venecia, un accidente que causó al menos 21 muertos y conmocionó a Italia el martes.
Los bomberos explicaron que el vehículo se precipitó de un puente que cruzaba una vía de tren y se incendió entre las localidades de Mestre y Marghera, pertenecientes al municipio de Venecia.
En las imágenes de las cámaras ubicadas en el lugar del accidente, se ve al autobús transitar a baja velocidad y de repente caer del puente. Según la filmación, no parece haber ningún intento de frenada u algún tipo de desperfecto del vehículo. El video será clave para que los investigadores esclarezcan las causas del siniestro.
La fiscalía local está investigando si el conductor Alberto Rizzotto sufrió una enfermedad repentina que le hizo perder el control del vehículo.
”Una de las hipótesis es que el conductor se sintiese mal”, dijo el ministro de Transportes, Matteo Salvini, al revelar que “la carretera era una recta sin obras, sin interrupciones, el autobús era nuevo, eléctrico”.
El concejal de Venecia Renato Boraso dijo que el hombre, quien falleció en el accidente, era un conductor experimentado.
El autobús se accidentó poco después de las 19H30 locales en medio de un trayecto entre el centro histórico de Venecia y un camping situado en tierra firme.
“El autobús quedó volteado. El impacto fue terrible porque cayó de unos diez metros”, dijo el comandante de los bomberos de Venecia, Mauro Luongo. “En el impacto, las baterías eléctricas del autobús se incendiaron”, agregó.
Entre los 21 muertos había dos niños y varios turistas extranjeros.
Los trabajadores de emergencias pasaron la noche retirando los cadáveres de los escombros del vehículo, que finalmente fueron retiradas a primeras horas del miércoles.
La escena del accidente atrajo la atención de los transeúntes. Un par de lugareños dijeron que el paso elevado tenía más de 60 años y que nunca había ocurrido nada parecido allí, mientras un hombre con chaqueta de motorista detenía su motocicleta para atar a un poste un ramo de flores de plástico.
El autobús transportaba turistas extranjeros desde la Piazzale Roma de Venecia hasta el camping Hu el martes por la noche. Los turistas suelen alojarse en barrios situados al otro lado de la laguna, lejos de los canales del famoso centro histórico de Venecia, para encontrar alojamientos más baratos.
Entre los heridos, cinco de ellos graves, hay ciudadanos franceses, españoles, austriacos y croatas, según las autoridades locales. El Ministerio de Asuntos Exteriores español dijo el miércoles que dos personas de España resultaron heridas en el accidente, y que ambas estaban hospitalizadas y en buen estado.
Un funcionario municipal dijo que entre los muertos había turistas ucranianos. La agencia de noticias italiana ANSA también informó de víctimas franceses, alemanas y búlgaras que se alojaban en el camping cercano al lugar del accidente.
Entre los heridos, había tres ucranianos, un croata, un alemán y un francés, dijo el funcionario municipal. Varios de los heridos estaban en graves condiciones, según informaron el miércoles los medios locales.
El relato de los testigos
Godstime Erheneden contó que estaba en su apartamento cerca del accidente cuando oyó un estruendo en el exterior. Salió corriendo y fue de los primeros en entrar en el autobús.
“Cuando entramos, vimos al conductor enseguida. Estaba muerto. Saqué a hombros a una mujer y luego a un hombre”, declaró Erheneden al periódico local Il Gazzettino.
“La mujer gritaba: ‘mi hija, mi hija’, y yo volví a entrar. Vi a una niña que debía de tener dos años. Tengo un hijo de un año y 10 meses, y son del mismo tamaño. Sentí como si tuviera a mi hijo en brazos. Fue terrible. No sé si sobrevivió. Pensé que estaba viva, pero cuando llegaron los equipos de rescate se la llevaron inmediatamente”, relató Erheneden.
El alcalde de Venecia, Luigi Brugnaro, escribió en X, antes conocido como Twitter, que la escena era “apocalíptica” y declaró el estado de luto.
La primera ministra italiana, Giorgia Meloni, expresó “sus profundas condolencias” a las víctimas.
El patriarca de Venecia, Francesso Moraglia, se desplazó al lugar del siniestro y dio la última bendición a las víctimas, cuyos cuerpos estaban cubiertos con sábanas blancas sobre las que alguien había depositado flores rojas.
El más grave accidente de este tipo en Italia ocurrió el 28 de julio de 2013, cuando un autobús que transportaba unas 50 personas originarias de la provincia de Nápoles, que regresaban de una excursión de tres días, cayó 30 metros desde un viaducto cerca de Avellino. En ese desastre murieron 38 personas.