Arabia Saudita y Rusia anunciaron el martes que prorrogarán sus recortes voluntarios de la producción de petróleo hasta finales de año, a pesar del repunte del precio del crudo y de las expectativas de los analistas de una oferta ajustada en el cuarto trimestre.
Los precios del petróleo subieron con fuerza tras conocerse la noticia, y el Brent superó los 90 dólares el barril por primera vez desde noviembre, a pesar del aumento constante de las exportaciones de crudo iraní y venezolano, ya que el mercado cree que Estados Unidos no está aplicando las sanciones con tanto rigor como en años anteriores.
Los recortes de producción del mayor exportador de crudo del mundo se anunciaron en junio tras una reunión de la OPEP+ y entraron en vigor por primera vez en julio.
Este grupo reúne a miembros de la Organización de Países Productores de Petróleo (OPEP), liderada por Arabia Saudita, junto a otros Estados aliados, incluida Rusia.
”La producción del reino para los meses de octubre, noviembre y diciembre será de alrededor de nueve millones de bd”, dijo el ministerio en un comunicado.
Esta estrategia será “revisada mensualmente con miras a reducir aún más la producción o aumentarla”, afirmó.
Según Arabia Saudita esta política tiene como objetivo “apoyar la estabilidad y el equilibrio de los mercados petroleros”.
El anuncio de este martes se produce el mismo día que el de Rusia, que también dijo que mantendría la reducción de sus exportaciones de petróleo en 300.000 bd hasta fin de año.
Esta medida “tiene como objetivo fortalecer las medidas de precaución tomadas por los países de la OPEP+ para mantener la estabilidad y el equilibrio de los mercados petroleros”, aseguró el vice primer ministro ruso, Alexander Novak, a cargo de la energía, en Telegram.
La reducción unilateral de la producción saudita sigue a la decisión tomada en abril por varios miembros de la OPEP+ de reducir su producción en más de un millón de bd, que hizo aumentar los precios brevemente pero sin permitir una recuperación sostenible.
Alrededor de las 15:45 GMT el martes, el petróleo Brent del Mar del Norte para entrega en noviembre subía un 2,3%. En tanto la cotización en Texas llegaba a 87,90, lo que representa una suba del 2,7%.
“Un costo” para Riad
”Las reducciones adicionales parecen haber estimulado los precios, y la oferta parece restringida en el cuarto trimestre a pesar del aumento de la producción de Irán y algunos otros países”, dijo a AFP Justin Alexander, director de la consultora Khalij Economics.
”Sin embargo, este esfuerzo ha tenido un costo para el reino, que ha reducido su oferta”, agregó.
La producción diaria del mayor exportador de crudo del mundo es de unos nueve millones de bd, muy por debajo de su capacidad diaria, oficialmente de 12 millones de barriles.
En agosto, el gigante petrolero saudita Aramco anunció ganancias de 30.080 millones de dólares para el segundo trimestre, una disminución del 38% en comparación con el mismo período de 2022, cuando los precios se dispararon tras la invasión rusa de Ucrania.
Esta disminución de los beneficios “refleja principalmente el impacto de la caída de los precios del crudo y el debilitamiento de los márgenes del refinado y los productos químicos, dijo la compañía, el principal motor de la economía saudita.
Arabia Saudita posee el 90% de las acciones de Aramco y depende en gran medida del petróleo para financiar el ambicioso programa Vision 2030 del príncipe heredero Mohammed bin Salmán, que incluye reformas económicas y sociales para limitar la dependencia del país de su oro negro.
(con información de AFP)