Alemania y Francia anunciaron este martes nuevos envíos de armas para Ucrania, en el marco de la cumbre de la OTAN que se celebra hoy y mañana en Vilna, y en la que está invitado el presidente ucranianano Volodimir Zelensky.
El presidente francés, Emmanuel Macron, anunció el envío de misiles de alcance medio de tipo Scalp que deben permitirle “defender su territorio”.
Macron justificó este paso suplementario en el equipamiento militar por la situación sobre el terreno y la contraofensiva de Ucrania para tratar de recuperar territorio ocupado por Rusia.
Serán -señaló, sin querer dar cifras- “nuevos misiles para poder bombardear en profundidad” para “permitir a Ucrania defender su territorio”.
Los Scalp son la versión británica de los Storm Shadow que Londres ha entregado a Kiev desde hace meses. Se disparan desde aviones y tienen un peso de 1.300 kilos y un alcance máximo de 560 kilómetros.
Por su parte, Alemania anunció un nuevo paquete de ayuda militar por valor de casi 700 millones de euros para las fuerzas armadas ucranianas y que incluye, entre otros, sistemas de defensa aérea, tanques y artillería.
“Estoy muy satisfecho de que hoy aquí en Vilna hayamos podido cerrar otro paquete para apoyar a Ucrania en su lucha de defensa contra la agresión rusa. Responde a las prioridades de Ucrania: defensa aérea, tanques, artillería”, declaró el ministro alemán de Defensa, Boris Pistorius.
El paquete incluye dos lanzadores Patriot procedentes de las existencias de la Bundeswehr (fuerzas armadas alemanas), además de cuarenta vehículos de combate de infantería Marder, 25 carros de combate universal LEOPARD 1 A5 y cinco tanques de recuperación blindados Bergepanzer 2 procedentes de existencias industriales o en proceso de acondicionamiento o producción.
Además, el paquete contiene 20.000 proyectiles adicionales de munición de artillería y 5.000 proyectiles de munición de humo de 155 mm.
La ayuda comprende, asimismo, un amplio paquete de medios de reconocimiento y antidrones, así como un sistema de drones LUNA; un paquete zapador, con capacidad de interceptación de minas, y un paquete de servicios médicos tácticos, que incluye subcomponentes para un hospital de campaña.
En total se trata de 31 artículos procedentes de las existencias de la Bundeswehr o puestas a disposición en colaboración con los socios de la industria, resume el comunicado.
Mensaje claro y positivo
Sobre la cumbre que se va a prolongar hasta mañana, más allá de congratularse del acuerdo para integrar a Suecia como nuevo miembro de la Alianza Atlántica (una vez superado el veto que mantenía Turquía), Francia insistió en que lo importante es “dar un mensaje de apoyo a Ucrania, de unidad de la OTAN, y de determinación para decir que Rusia no puede, no debe ganar esta guerra”.
En la misma línea, el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, dijo este martes confiar en que los líderes de la Alianza den “un mensaje claro y positivo” a Ucrania sobre el proceso de adhesión del país a la organización transatlántica en el texto que acordarán durante la cumbre que celebran en Vilna.
“También espero que los aliados envíen un mensaje claro y positivo sobre la senda hacia la membresía para Ucrania”, declaró el político noruego a su llegada a la reunión de los mandatarios aliados.
Stoltenberg celebró que el presidente de Ucrania, Volodímir Zelensky, vaya a asistir a la cumbre de la OTAN hoy y mañana, pero no quiso detallar en lenguaje exacto sobre el proceso de entrada de Ucrania en la Alianza que los líderes de la organización usarán en el comunicado que pactarán en Vilna.
“La OTAN enviará un mensaje fuerte, unido y positivo sobre el camino adelante para Ucrania”, se limitó a afirmar.
Añadió que ese será el mensaje no solo con respecto a la membresía de Kiev, sino también en relación con “la tarea más inminente”, en referencia al apoyo militar de los países aliados a esa antigua república soviética.
“Salvo que garanticemos que Ucrania gana esta guerra, salvo que garanticemos que Ucrania prevalece como una nación independiente y soberana, no hay cuestión que debatir sobre la membresía”, comentó e incidió en que la cuestión prioritaria es asegurar que el presidente ruso, Vladímir Putin, no gane la guerra.
Los jefes de Estado y de Gobierno de la OTAN acordarán en su cumbre medidas para acercar a Ucrania a la Alianza, pero no propondrán su ingreso en la misma.
En concreto, estudian un paquete con tres elementos, el primero consistente en intensificar el apoyo práctico mediante un programa plurianual que garantice la plena interoperatividad de las fuerzas ucranianas con las de la OTAN.
El segundo se trata de elevar el nivel de la relación política mediante la creación del Consejo OTAN-Ucrania, un foro en el que ambas partes participarán como iguales.
El tercero se refiere a eliminar el requisito del plan de acción para la adhesión (MAP, por sus siglas en inglés), un paso que deben cumplir los aspirantes a entrar en la Alianza.
Ese último punto supondría que el procedimiento para la adhesión futura de Ucrania pasara “de un proceso de dos pasos a un proceso de un solo paso”, detalló Stoltenberg.
Por otro lado, al margen de la cumbre de la OTAN, varios países aliados preparan garantías de seguridad bilaterales o multilaterales con Ucrania que consistirían en compartir armas, proporcionar entrenamiento y dar información de inteligencia.
Stoltenberg dijo que esos convenios complementarán las decisiones tomadas en la cumbre de Vilna.
Sobre el levantamiento del veto turco al ingreso de Suecia en la OTAN, el secretario general quiso reivindicar la rapidez en los procedimientos de adhesión de Estocolmo y Finlandia, que solicitaron la entrada en la Alianza en mayo del año pasado.
Seguir leyendo: