La Guardia Costera de Boston está en una operación de búsqueda y rescate para intentar dar con el Titan, un submarino que perdió el contacto durante una expedición para ver los restos del Titanic en el fondo del Océano Atlántico.
“Estamos explorando y movilizando todas las opciones para traer a la tripulación de vuelta sana y salva”, dijo la compañía OceanGate en un comunicado a BBC News. “Toda nuestra atención se centra en los tripulantes del sumergible y sus familias”.
Según promociona la compalía, el viaje en su sumergible de fibra de carbono es “una oportunidad para salir de la vida cotidiana y descubrir algo verdaderamente extraordinario”.
El modelo Titan de OceanGate, con capacidad para sumergirse a 4.000 metros, puede llevar a cuatro personas más el piloto y, con ese número a bordo, puede estar hasta 96 horas bajo agua.
Mide 6,7m x 2,8m x 2,5m y pesa 10.432 kilos, con una carga útil de 685 kilos.
“Gracias al uso innovador de materiales modernos, Titán pesa menos y su movilización es más rentable que la de cualquier otro sumergible de inmersión profunda”, destaca la empresa, que además promociona como “una ventaja única” el sistema de monitorización en tiempo real del estado del casco, asegurando que ello proporciona una función de seguridad sin precedentes. El sistema usa sensores acústicos y medidores de deformación para analizar los efectos de los cambios de presión en el buque a medida que el sumergible se sumerge a mayor profundidad y evaluar con precisión la integridad de la estructura, lo que “proporciona al piloto una detección de alerta temprana con tiempo suficiente para detener el descenso y regresar a la superficie con seguridad”.
Su capacidad máxima de sumersión es de 4.000 metros, suficiente para visitar los restos del Titanic, ubicados a 3.800 metros de profundidad.
Puede viajar a una velocidad de 3 nudos.
Con la búsqueda en marcha, el dato clave es cuánto tiempo puede sobrevivir la tripulación. El soporte vital es de 96 horas para cinco tripulantes, y podría ser mayor si había menos personas a bordo. Tampoco se conoce qué cantidad de agua lleva en cada viaje.
En caso de que hubiese turistas a bordo, se da por descontado que serían personas de alto nivel adquisitivo. En el sitio web de la compañía se anuncian viajes de siete días para ver los restos del Titanic y se especifica que su precio son unos 250.000 dólares. Dura aproximadamente ocho horas: dos horas y media de bajada, tres horas en el fondo marino y otras dos horas y media de subida.
El Titanic realizaba su viaje inaugural el 15 de abril de 1912 desde Southampton, Inglaterra, a la ciudad de Nueva York cuando chocó contra un iceberg frente a Terranova en el Atlántico Norte. El transatlántico de lujo se hundió en cuestión de horas, un accidente que cobró la vida de unas 1.500 personas.
Los restos no fueron localizados hasta más de siete décadas después, en 1985.
Están dividido en dos partes, con la proa y la popa separadas por unos 800 metros entre sí. En el medio y alrededor hay un enorme campo de escombros del naufragio.
En 2021, OceanGate Expeditions comenzó lo que esperaba que se convirtiera en un viaje anual para relatar el deterioro del icónico transatlántico que chocó contra un iceberg y se hundió en 1912.
La empresa dijo entonces que, además de arqueólogos y biólogos marinos, las expediciones también incluirían a unos 40 turistas de pago que se turnarían para manejar el equipo de sonar y realizar otras tareas en el sumergible de cinco personas. El grupo inicial de turistas financiaría la expedición con entre 100.000 y 150.000 dólares cada uno.
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