Un francotirador del ejército ucraniano apodado con el nombre de guerra de “Muerte”, cree que es un “milagro” estar vivo. Acaba de tomarse un descanso este jueves en medio de los combates en el frente sureste, cerca de Zaporizhzhia. “Donde estábamos peleando... uno no vive mucho. Todo depende solo de tu suerte”, dijo.
Su función no es la misma que la del resto de los soldados. “Muerte” es un francotirador de 37 años. Hace poco más de 15 meses, antes de la invasión de las tropas de Putin a Ucrania, nunca se hubiera imaginado semejante “nick” ni tarea por delante: “Nunca había disparado un arma”. asegura.
“Incluso aquí (en la línea del frente sureste de Zaporizhzhia), donde vivimos en las aldeas, los aviones enemigos lanzan constantemente misiles pesados sobre nosotros. Tenemos una casa y hay un sótano, donde teóricamente es posible esconderse de los bombardeos. Pero los cráteres que quedan del cohete son más profundos que este sótano”, explica “Muerte”.
El francotirador contó que su unidad está bajo constantes ataques con misiles en la línea del frente sureste de Zaporizhzhia. “Un cohete golpeó a 150 metros de mí hace cinco días, destrozó nuestro auto”, recordó.
Muerte se unió al entrenamiento de francotiradores este jueves en un lugar no revelado cerca de Zaporizhzhia.
Un instructor de francotiradores de 36 años, apodado con el nombre de guerra “Checheno” dijo que se necesitan al menos dos o tres meses para enseñar correctamente a un francotirador.
“Puede tomar de uno a tres meses. Nuestro curso de formación acelerado dura un mes. Pero para enseñar adecuadamente a un francotirador, se necesitan al menos dos o tres meses”, dijo alias “Checheno”.
“Nos diferenciamos de otros soldados en que no nos apresuramos por ir a ningún lado, no hacemos movimientos rápidos. somos lentos”, agregó.
El ejército de Ucrania dijo el jueves que había recuperado el control de más de 100 kilómetros cuadrados (38 millas cuadradas) de territorio en una contraofensiva contra las fuerzas rusas y Kiev agregó que las fuerzas de Ucrania habían avanzado en sectores clave de la línea del frente.
“Cuando comenzó la guerra a gran escala, nosotros mismos defendimos la ciudad de Kharkiv. Soy de Kharkiv, estuve allí. Bueno, entré en una unidad”, dijo Muerte, quien además reconoció que antes de la guerra jamás había disparado un arma.
“Al principio, durante los primeros seis meses, fui conductor y artillero. Posteriormente, comenzamos a ir a los campos de tiro, a disparar. Nunca antes había disparado un arma en la vida civil, descubrí el tiro de alta precisión. Es decir, mi tiro fue lo suficientemente bueno, tengo buena vista”, agregó.
Entretanto, la capital ucraniana se vio sacudida esta mañana por las explosiones de sus defensas aéreas, que respondieron a un ataque con misiles lanzado por las fuerzas rusas poco después de que una delegación de siete líderes africanos llegara en tren a Kiev para reunirse con el presidente Volodímir Zelensky.
“Explosiones en la capital. En la zona de Podil. En Kiev aún hay misiles en el aire”, escribió el alcalde de la ciudad, Vitali Klichkó, en su cuenta de Telegram. La Administración Militar de la ciudad confirmó que las defensas antiaéreas se activaron para hacer frente al ataque.
La Fuerza Aérea de Ucrania afirmó que derribó una docena de proyectiles rusos, incluidos seis hipersónicos Kinzhal, durante un ataque contra la capital del país.
Además de los seis misiles hipersónicos, fueron derribados seis misiles de crucero Kalibr y dos drones de reconocimiento, precisó la Fuerza Aérea en Telegram. El jefe de la administración militar de Kiev, Serguéi Popko, dijo que todos fueron interceptados en la zona de la capital.
La misión africana de paz liderada por el presidente sudafricano, Cyril Ramaphosa, llegó a Ucrania en su primera parada de una gira que los llevará también a Moscú. En el momento de las explosiones, los líderes africanos se encontraban en la ciudad de Bucha, en los alrededores de Kiev.
(Con información de Reuters)
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