Youssouf, de 78 años, sufrió heridas leves de arma blanca al intentar repeler al agresor en Annecy el jueves.
Cuatro niños pequeños y dos jubilados fueron apuñalados en el ataque perpetrado en la tranquila localidad montañosa francesa de Annecy, y el gobierno francés declaró que el presunto agresor era un refugiado sirio.
En declaraciones a la agencia de noticias Reuters el viernes, Youssouf dijo sentirse relativamente tranquilo al relatar el incidente.
“Sentí que no había ninguna razón para que viniera a atacarme. Me quedé tranquilo, no fui tras él, a perseguirlo. Me quedé quieto, sentado, pero él vino así y probablemente quería crear una víctima más, molestar a otra persona”, precisó Youssouf.
“Puedo imaginar el estrés de los familiares de los niños y sus seres queridos, o de otros niños que vieron el incidente”, añadió.
“Es terrible, especialmente con niños atacados así, es terrible y especialmente en un lugar tranquilo y conocido por eso, no sé por qué Annecy, por qué aquí, pero bueno, no podemos razonar con eso”, concluyó.
Un vídeo del ataque, tomado por un transeúnte y verificado por Reuters, muestra al agresor saltando un muro bajo hacia un parque infantil y arremetiendo repetidamente contra un niño en un cochecito, apartando a una mujer que intenta esquivarlo.
Este video contiene IMÁGENES SENSIBLES:
Dos de los niños heridos y un adulto se encuentran hospitalizados en estado grave, mientras que las demás víctimas se encuentran estables.
Al único detenido por el crimen se le investiga por intento de asesinato, ya que en principio las autoridades han descartado el móvil terrorista. No constan antecedentes penales y se ha fijado para este viernes un examen psiquiátrico que permita determinar su estado, informó la cadena BFMTV.
El portavoz del Ejecutivo, Olivier Véran, evitó especular en una entrevista a Franceinfo sobre los motivos que le llevaron a perpetrar el crimen, al igual que ha esquivado las derivadas que el caso pueda tener para el debate sobre temas migratorios y de asilo, agitado especialmente por la ultraderecha.
El sospechoso se identificó ante la Policía como un cristiano sirio y, de hecho, los vídeos captados en el momento del ataque muestran que gritó alusiones a Jesucristo.
Véran acusó a la dirigente de Agrupación Nacional Marine Le Pen de plantear quejas “erróneas” y defendió la obligatoriedad de examinar las peticiones de asilo. El detenido llegó a Francia de forma legal y desde abril de este año contaba con el estatus de refugiado en Suecia, el país en el que residía previamente.
Para Le Pen, se debe restringir “considerablemente” el derecho de asilo. “Cuando un país de la Unión Europea concede este derecho, la persona beneficiada no debería poder ir a otro país (...) para que podamos recuperar la capacidad de controlar la inmigración”, señaló la ex candidata presidencial en la emisora Europe1.
(Con información de Reuters y Europa Press)
Seguir leyendo: