Las tensiones entre Serbia y Kosovo estallaron nuevamente esta semana después de que la policía del enclave allanó áreas dominadas por los serbios en el norte de la región y tomó los edificios municipales locales para custodiarlos.
Ha habido enfrentamientos violentos entre la policía de Kosovo y las fuerzas de mantenimiento de la paz dirigidas por la OTAN por un lado y los serbios locales por el otro, dejando decenas de heridos en ambos bandos.
Serbia elevó la preparación para el combate de sus tropas estacionadas cerca de la frontera y advirtió que no se quedaría de brazos cruzados si los serbios en Kosovo fueran atacados nuevamente. La situación ha vuelto a alimentar los temores de que se reanude el conflicto de 1998-1999 en Kosovo que se cobró más de 10.000 vidas y dejó a más de 1 millón sin hogar.
¿POR QUÉ SE ENCUENTRAN SERBIA Y KOSOVO?
Kosovo es un territorio poblado principalmente de etnia albanesa que anteriormente era una provincia de Serbia. Declaró la independencia en 2008.
Serbia se ha negado a reconocer la condición de Estado de Kosovo y todavía lo considera parte de Serbia, aunque no tiene control formal allí.
La independencia de Kosovo ha sido reconocida por unos 100 países, incluido Estados Unidos. Rusia, China y cinco países de la Unión Europea, la mayoría de ellos con regiones separatistas propias, se han puesto del lado de Serbia. El punto muerto ha mantenido las tensiones a fuego lento y ha impedido la estabilización total de la región de los Balcanes después de las sangrientas guerras de la década de 1990.
¿CÓMO REACCIONARON LOS ALIADOS DE SERBIA?
El canciller ruso, Sergei Lavrov, dijo que la situación en Kosovo es alarmante y que podría provocar otro conflicto en el corazón de Europa.
“Se está preparando una gran explosión en el centro de Europa, en el lugar donde, en 1999, la OTAN atacó a Yugoslavia, violando todos los principios (internacionales) imaginables”, dijo, según la agencia estatal de noticias rusa RIA Novosti.
China dijo que estaba siguiendo de cerca los acontecimientos.
El portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de China, Mao Ning, instó a la OTAN a respetar la soberanía y la integridad territorial “de los países pertinentes y hacer realmente lo que conduzca a la paz regional”.
¿DE QUÉ SE TRATA EL ÚLTIMO ESTALLIDO?
Los serbios boicotearon las elecciones locales del mes pasado celebradas en el norte de Kosovo, donde son mayoría. El viernes pasado, los alcaldes de etnia albanesa recién elegidos se mudaron a sus oficinas con la ayuda de la policía antidisturbios de Kosovo.
Los serbios intentaron impedir que los nuevos alcaldes tomaran el recinto, pero la policía disparó gases lacrimógenos para dispersarlos.
El lunes, los serbios participaron en feroces enfrentamientos con las fuerzas de paz de la OTAN, dejando más de 50 manifestantes y 30 soldados internacionales heridos.
El boicot electoral siguió a la renuncia colectiva de funcionarios serbios de la zona, incluido personal administrativo, jueces y policías, en noviembre de 2022.
¿QUÉ HACE LA OTAN EN KOSOVO?
Hasta esta semana, unos 3.800 soldados de la OTAN estaban estacionados en Kosovo, principalmente en tareas de mantenimiento de la paz, pero también para vigilar las fronteras, especialmente la frontera con Serbia, donde Belgrado ha estado reforzando su presencia militar.
El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, dijo el martes que la alianza había enviado 700 soldados más a Kosovo para ayudar a sofocar las protestas violentas y había puesto otro batallón en espera en caso de que se extendieran los disturbios.
¿CUÁN PROFUNDO ES EL CONFLICTO ÉTNICO EN KOSOVO?
La disputa sobre Kosovo tiene siglos de antigüedad. Serbia considera a la región el corazón de su estado y religión.
Numerosos monasterios cristianos ortodoxos serbios medievales se encuentran en Kosovo. Los nacionalistas serbios ven una batalla de 1389 contra los turcos otomanos allí como un símbolo de su lucha nacional.
La mayoría de la etnia albanesa de Kosovo ven a Kosovo como su propio país y acusan a Serbia de ocupación y represión. Los rebeldes de etnia albanesa lanzaron una lucha para librar al país del dominio serbio en 1998.
La brutal respuesta de Belgrado provocó una intervención de la OTAN en 1999, que obligó a Serbia a retirarse y ceder el control a las fuerzas de paz internacionales.
¿HABIDO INTENTOS PARA RESOLVER LA DISPUTA?
Ha habido esfuerzos internacionales constantes para encontrar puntos en común entre los dos antiguos enemigos de la guerra, pero hasta ahora no ha habido un acuerdo integral final.
Funcionarios de la UE han mediado en negociaciones diseñadas para normalizar las relaciones entre Serbia y Kosovo. Se han alcanzado numerosos acuerdos, pero rara vez se implementaron sobre el terreno. Algunas áreas han visto resultados, como la introducción de la libertad de movimiento dentro del país.
¿QUIÉNES SON LOS PRINCIPALES JUGADORES?
Tanto Kosovo como Serbia están dirigidos por líderes nacionalistas que no han mostrado disposición a comprometerse.
En Kosovo, Albin Kurti, exlíder de protestas estudiantiles y preso político en Serbia, lidera el gobierno y es el principal negociador en las conversaciones mediadas por la UE. También era conocido como un feroz partidario de la unificación de Kosovo con Albania y está en contra de cualquier compromiso con Serbia.
Serbia está dirigida por el presidente populista Aleksandar Vucic, quien fue ministro de información durante la guerra en Kosovo. El ex ultranacionalista insiste en que cualquier solución debe ser un compromiso para que dure y dice que el país no se conformará a menos que gane algo.
¿QUÉ SUCEDERÁ?
Los funcionarios internacionales esperan acelerar las negociaciones y llegar a una solución en los próximos meses.
Ambas naciones deben normalizar los lazos si quieren avanzar hacia la membresía de la UE. Ningún gran avance significaría una inestabilidad prolongada, un declive económico y un potencial constante de enfrentamientos.
Cualquier intervención militar serbia en Kosovo significaría un enfrentamiento con las fuerzas de paz de la OTAN estacionadas allí.
(con información de AP)
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