El ejército de Corea del Sur halló los restos del satélite espía de Corea del Norte que se estrelló en el Mar Amarillo debido a una falla mecánica minutos después de su lanzamiento.
Las imágenes muestran una gran estructura metálica en forma de barril con algunos tubos finos y cables en el fondo, que el ejército de Corea del Sur aseguró haber encontrado a 200 kilómetros al oeste de la isla de Eocheong.
Según información preliminar brindada por militares surcoreanos, el objeto cilíndrico recuperado podría tratarse de un tanque de combustible líquido.
El Ejército de Corea del Sur tiene previsto analizar los restos de los proyectiles para determinar su funcionamiento, su procedencia y su nivel tecnológico.
Según el Estado Mayor Conjunto, el régimen de Kim Jong-un lanzó un satélite espía desde Dongchang-ri, provincia de Pyongyang, a las 6:29 hora local, pero tras una falla en el motor, se estrelló en el mar 200 km al oeste de Eocheong.
El lanzamiento norcoreano causó la activación de las alertas antimisiles en Seúl y en la prefectura japonesa de Okinawa (sudoeste), por donde habría sobrevolado el artefacto, instando a la posible evacuación ciudadana.
“El proyectil desapareció del radar antes de alcanzar el punto de llegada previsto”, dijo el Estado Mayor Conjunto citado por la agencia noticiosa surcoreana Yonhap.
Seúl y Tokio, que convocaron reuniones de urgencia para analizar la situación, denunciaron que esta nueva amenaza norcoreana sería en realidad un ensayo encubierto para probar tecnología de misiles balísticos, algo que castigan las sanciones de la ONU que pesan sobre Pyongyang.
Estados Unidos criticó el lanzamiento fallido de Corea del Norte y aseguró que el régimen norcoreano “usaba tecnología de misiles balísticos”.
”Este supuesto lanzamiento espacial involucraba tecnologías relacionadas directamente con el programa de misiles balísticos intercontinentales de la República Popular Democrática de Corea (RPDC)”, aseguró en un comunicado uno de los portavoces del Consejo de Seguridad Nacional del Gobierno, Adam Hodge.
El funcionario estadounidense animó a otros países a condenar esta nueva amenaza de Corea del Norte y llamó a las autoridades Pyongyang a “cesar sus provocaciones” y participar en un diálogo diplomático para rebajar la tensión.
Por su parte, el ministro de Defensa de Japón, Yasukazu Hamada, advirtió que “este lanzamiento, ya sea de un satélite o de un misil, viola las resoluciones de la ONU y por tanto no podemos aceptarlo”.
Debido a que los cohetes de largo alcance y los lanzadores espaciales comparten la misma tecnología, analistas consideran que desarrollar la capacidad de enviar un satélite a la órbita daría a Pyongyang la cobertura para probar los prohibidos misiles balísticos intercontinentales (ICBM).
“Kim cumplió su palabra y lanzó hoy el satélite espía”, señaló a la AFP Soo Kim, de LMI Consulting y ex analista de la CIA, en referencia al líder norcoreano, Kim Jong Un.
“Sabemos que la determinación de Kim no se acaba con esta actividad”, indicó la analista, quien agregó que el lanzamiento podría ser un “anticipo de mayores provocaciones, incluida la prueba nuclear de la cual hemos especulado por mucho tiempo”.
Tras el rompimiento del diálogo con Washington sobre el programa nuclear norcoreano en 2019, Pyongyang ha intensificado el desarrollo de su programa nuclear, con una serie de pruebas de armas, incluido el lanzamiento de varios ICBM.
“Si la actual misión satelital de Corea del Norte fue un éxito o no, se puede esperar que Pyongyang lo utilice como propaganda política de sus capacidades espaciales, así como retórica diplomática para provocar una división entre Seúl y Tokio”, comentó Leif-Eric Easley, profesor de la Universidad Ewha de Seúl.
Desde 1998, Pyongyang ha lanzado cinco satélites, tres de los cuales fallaron inmediatamente y dos parecen haber alcanzado la órbita, aunque nunca se han detectado independientemente sus señales, lo que podría deberse a una disfunción.
(Con información de EFE y AFP)
Seguir leyendo: