El presidente surcoreano, Yoon Suk-yeol, afirmó este viernes que el dictador Kim Jong-un, “pagará por sus provocaciones temerarias”, horas después de que Pyongyang disparó un nuevo tipo de drone submarino capaz de generar tsunamis radiactivos.
“Corea del Norte está avanzando en sus armas nucleares día a día, y llevando a cabo provocaciones de misiles con una intensidad sin precedentes”, dijo Yoon en una ceremonia en memoria de los 55 marinos caídos en el mar Amarillo celebrada en el cementerio nacional de Daejeon, a 139 kilómetros al sur de Seúl.
“Nuestro Gobierno y nuestro Ejército reforzarán de forma dramática el sistema surcoreano de tres ejes, frente a los avances y las provocaciones de misiles del Norte, y estrechará la cooperación de seguridad con Estados Unidos y con Japón”, dijo Yoon en alusión a la estrategia militar que incluye defensas antimisiles, una plataforma de ataques preventivos y planes para desarmar al régimen norcoreano.
Los medios de propaganda de Corea del Norte informaron este viernes que el dictador Kim Jong-un probó esta semana un drone submarino capaz de generar tsunamis radiactivos similar al sistema ruso conocido como Poseidón.
El artefacto se desplegó frente a la costa norcoreana y “alcanzó el punto objetivo en aguas de la bahía de Hongwon establecido como puerto enemigo simulado con su ojiva de prueba, detonando bajo el agua el jueves por la tarde”, según la agencia KCNA.
El dispositivo se probó coincidiendo con las grandes maniobras que estos días realizan Seúl y Washington en el sur de la península, calificados por Pyongyang como “ejercicios de guerra persistentes y provocadores”.
“La misión de este armamento es penetrar sigilosamente en aguas operativas y provocar un tsunami radiactivo a gran escala mediante una detonación submarina que destruya grupos de ataque navales y los principales puertos operacionales del enemigos”, explicó el texto de KCNA.
Este viernes, las agencias del régimen describieron estas últimas maniobras, bautizadas como Escudo de Libertad, como un entrenamiento para “ocupar” Corea del Norte.
El despliegue de este drone submarino sirvió para “alertar al enemigo de una verdadera crisis nuclear”.
Además, Kim Jong-un afirmó que el ejercicio demostró que la “ilimitada capacidad de disuasión nuclear” de Pyongyang “está creciendo a una mayor velocidad”.
Corea del Norte declaró el año pasado que su estatus de potencia nuclear era “irreversible” y su líder pidió un aumento “exponencial” en la producción armamentística.
Por su parte, Estados Unidos ha reiterado su compromiso de defender Corea del Sur con “el abanico completo de sus capacidades militares, incluidas las nucleares”.
Los nuevos lanzamientos se producen cerca de una semana después de que Corea del Norte confirmara haber lanzado un misil Hwasong-17 al mar de Japón.
La idea de que Pyongyang tenga “un drone submarino con capacidad nuclear debe recibirse con escepticismo”, dijo Leif-Eric Easley, profesor en la Universidad Ewha de Seúl.
“Las reivindicaciones de Pyongyang sobre nuevos sistemas de armas no siempre equivalen a una demostración creíble de su capacidad”, añadió.
En un mensaje en Twitter, el analista Ankit Panda no descartó que el anuncio sea “un intento de engaño o una operación psicológica”.
Aun así, la reivindicación es “chocante”, dijo a la AFP Cheong Seong-chang, del Instituto Sejong en Seúl.
De ser verdad, es difícil ver cómo Seúl “podría responder a una nueva arma tan formidable de Corea del Norte que puede destruir por completo los grandes puertos operacionales del Sur”.
La información de KCNA asegura que “Pyongyang está más que dispuesta a usar sus armas nucleares tácticas en cualquier momento”, apuntó An Chan-il, un desertor norcoreano convertido en investigador.
(Con información de EFE y AFP)
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