El Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Volker Turk, manifestó su preocupación por la detención del político y periodista opositor Vladimir Kara Murza, acusado en Rusia de cooperar con “un país de la OTAN”.
“El Alto Comisionado de Derechos Humanos de la ONU, Volker Turk, está preocupado por la continua detención del político y periodista de la oposición Vladimir Kara Murza desde abril de 2022″, indicó su oficina en Twitter.
Turk pidió que “se respeten los procedimientos justos” y el derecho a la defensa del periodista, quien suma ya varias imputaciones desde que fue detenido en abril, inicialmente por desobediencia a un agente de la Policía.
El opositor, que se enfrenta a una pena de hasta 20 años de cárcel por ser visto por el Kremlin como un agente extranjero y por “cooperar con países de la OTAN”, fue detenido en abril junto a su casa después de que la cadena CNN emitiera una entrevista en la que criticó la invasión rusa a Ucrania.
“Nuestro cliente ha sido acusado de hablar y criticar a las autoridades rusas en tres ocasiones en actos públicos en Lisboa, Helsinki y Washington. Estos discursos no amenazaban a Rusia de ninguna manera, eran críticas públicas”, dijo el abogado de Vladimir Kara Murza, Vadim Prokhorov, citado por la agencia de noticias rusa TASS.
“Estas intervenciones no amenazaban en absoluto la seguridad de Rusia, se trataba de críticas públicas”, añadió, precisando que Kara-Mourza rechazaba estas acusaciones.
El periodista ruso cuestionó abiertamente al Kremlin durante años y era amigo cercano del fallecido político liberal Boris Nemtsov, asesinado en Moscú. Sobrevivió a dos envenenamientos casi fatales, en 2015 y 2017, atribuidos por una investigación del portal Bellingcat al Servicio Federal de Seguridad (FSB) de Rusia.
Vladimir Kara-Murza ya había sido objeto de otras dos causas penales. En abril, fue detenido en Moscú tras haber criticado duramente la ofensiva en Ucrania, en particular en las redes sociales, y acusado de “difundir información falsa” sobre el ejército ruso, un delito castigado con diez años de prisión.
Posteriormente, en agosto, durante su encarcelamiento, fue acusado también de haber trabajado para una organización designada “indeseable” en Rusia, organizando en 2021 en Moscú una conferencia sobre los presos políticos.
Vladimir Kara-Murza, de 41 años, es una de las últimas figuras de la oposición rusa que aún se encuentran en el país.
El Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) condenó a Moscú por haber anulado la candidatura de Vladimir Kara-Mourza a elecciones en Rusia por tener doble nacionalidad: rusa y británica.
El opositor posee la nacionalidad rusa desde su nacimiento y obtuvo la nacionalidad británica después de haberse trasladado al Reino Unido con su madre cuando tenía 15 años.
(Con información de Europa Press y AFP)
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