Canadá envió el primer tanque Leopard 2 a Ucrania para combatir la injustificada invasión de Putin

La ministra de Defensa de Canadá, Anita Anand, anunció el envío del primer tanque Leopard 2 a Ucrania para combatir la invasión rusa.

Una aeronave perteneciente a la Real Fuerza Aérea Canadiense despegó este sábado desde la ciudad de Halifax, en la provincia de Nueva Escocia, con el primer carro de combate Leopard 2 que el Gobierno de Canadá a puesto a la orden del presidente ucraniano, Volodimir Zelensky.

“Canadá está con el pueblo de Ucrania y seguiremos proporcionando a las Fuerzas Armadas de Ucrania el equipamiento que necesitan para ganar”, indicó la responsable de Defensa a través de un mensaje en Twitter, alegando que el apoyo del país a Ucrania es “inquebrantable”.

Este envío sería el primero de otros cuatro tanques Leopard 2 que el Gobierno canadiense espera mandar a Ucrania en las próximas semanas.

“Estos vehículos fuertemente blindados y de gran protección proporcionan a los soldados una ventaja táctica en el campo de batalla gracias a su excelente movilidad, su potencia de fuego y su capacidad de supervivencia”, afirmó Anand este jueves en declaraciones recogidas por CBC.

Preguntada por el número de los tanques y si el Ejecutivo tenía pensado hacer más envíos, la titular de Defensa añadió que Canadá solo donaría vehículos que pudiera garantizar con piezas de repuesto y formación y que se desplegaría en coordinación con el resto de aliados.

“Tenemos que asegurarnos de que nuestro ejército tiene el número adecuado de tanques para entrenar y para cumplir con nuestros compromisos con la OTAN”, aseguró la ministra. “Así que existe la posibilidad de nuevas donaciones”, agregó según declaraciones del medio citado.

Por su parte, el presidente ucraniano, Volodimir Zelensky, celebró este sábado el inicio de la formación de los soldados ucranianos en el manejo de los tanques Challenger enviados por el Gobierno británico.

“He dado las gracias al primer ministro y a todo el pueblo británico por ayudar a nuestro país. Ahora, en el Reino Unido, nuestros chicos ya han empezado a entrenarse con los tanques Challenger. Es un buen vehículo. Y será muy importante en el campo de batalla”, indicó el líder ucraniano durante su discurso diario.

Zelensky también alertó sobre la situación actual en el este de Ucrania, que clasificó como “difícil” y denunció nuevos ataques de Moscú.

“Ahora es muy duro en Bajmut, en Vuhledar y hacia Lyman”, afirmó Zelensky. Pero confía en que la “firmeza” de los ucranianos acabe por imponerse.

Rusia está “abalanzando más y más a sus fuerzas para romper nuestra defensa”, dijo el mandatario.

Avdiivka, en la línea de frente de la región de Donetsk, fue blanco de un bombardeo “masivo” de artillería. Kramatorsk, aunos 100 km al norte, había sido impactada por disparos de cohetes, indicaron las autoridades ucranianas.

Entre viernes y sábado, tan solo en la provincia meridional de Zaporizhzhia se registraron bombardeos contra “infraestructuras civiles” de 26 localidades, de acuerdo con las mismas fuentes.

La artillería rusa también hostigó la ciudad de Kherson, que las tropas rusas habían tomado al inicio de la guerra hace casi un año pero que fue recuperada en noviembre por una contraofensiva ucraniana.

Los guardias fronterizos ucranianos indicaron que habían rechazado “un ataque de los invasores” y que los habían obligado a replegarse de un suburbio de Bajmut.

El enfrentamiento se produjo cuando una misión de reconocimiento aéreo detectó que “el enemigo se preparaba a atacar” esa localidad que los ucranianos defienden desde hace semanas con uñas y dientes.

“Esta semana, las fuerzas de ocupación rusas desplegaron todos sus esfuerzos para penetrar nuestras defensas y rodear Bajmut y lanzaron una gran ofensiva en el sector de Lyman. Pero fracasaron, gracias a la resistencia de nuestros soldados”, afirmó la viceministra ucraniana de Defensa, Hanna Maliar.

“Nadie entregará Bajmut [...] Combatiremos tanto cuanto podamos” para defender esa “fortaleza”, declaró Zelensky el viernes.

Algunos barrios de esta ciudad, en la cual quedan apenas 6.500 habitantes de los 70.000 que tenía antes de la guerra, fueron reducidos a ruinas, comprobaron varios reporteros de la agencia de noticias AFP.

Odesa, una ciudad portuaria a orillas del mar Negro, sufrió un apagón que afectó a 500.000 habitantes.

El incidente se debió a una avería en una central eléctrica que en los últimos tiempos fue bombardeada varias veces por Rusia, indicó el jefe de la administración regional, Maksym Marchenko.

El jefe de la administración presidencial ucraniana, Andrii Yermak, dio parte de un canje de 116 presos ucranianos por 63 rusos.

(Con información de Europa Press y AFP)

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