El Ministerio de Agricultura, Naturaleza y Calidad Alimentaria de Países Bajos anunció este viernes que buscará prohibir la cría y venta de animales genéticamente modificados a fin de evitar su sufrimiento. La iniciativa apunta, principalmente, a la raza de perros carlinos -más conocida como Pug- y de gatos Fold escoceses.
“Este tema me afecta no sólo como ministro sino, también, como persona. Les hacemos la vida miserable a animales inocentes, simplemente porque pensamos que son ‘hermosos’ y ‘lindos’. Por eso hoy estamos dando un gran paso hacia unos Países Bajos donde ninguna mascota tenga que sufrir por su apariencia”, mencionó en un comunicado el ministro neerlandés Piet Adema.
Esta iniciativa ya había surgido hace años pero había sido embanderada, principalmente, por movimientos defensores de los animales que alertaban de que, cada vez más, la gente compraba razas “diseñadas” solamente porque eran lindas.
“Creo que desde que se ha empezado a cruzar animales existe la tendencia de priorizar la forma sobre la función. Ha aumentado la demanda de razas braquicéfalas (con la cara plana) tanto en perros como en gatos”, comentó la doctora Anne Fawcett, profesora de la Facultad de Ciencias Veterinarias de Sídney y veterinaria de Sydney Animal Hospitals.
Múltiples investigaciones han demostrado que estas razas son más proclives a sufrir problemas respiratorios y de piel, entre otras complicaciones que pueden surgirles. “La braquicefalia provoca problemas en las vías respiratorias y reduce la calidad de vida y el bienestar de estos animales”, continuó la doctora y agregó que ello “puede provocar un sufrimiento considerable a los animales”.
“Los perros y gatos con braquicefalia extrema pueden sufrir graves problemas respiratorios y la respiración es un acto vital que necesitamos realizar en todo momento”, agregó. “Si tenemos esa capacidad limitada, cualquier cosa que hagamos se verá afectada, desde hacer ejercicio hasta comer e incluso dormir”, alertó y enfatizó sobre la importancia de detener esta práctica de mutación.
Para contribuir a esta causa, el Ministerio neerlandés estudia la posibilidad de crear una lista con todas estas características extremas que puedan resultar dañinas en los animales.
En ese sentido, además de los hocicos cortos en los carlinos, se destaca la mutación genética sobre los famosos gatos de raza Scottish Fold de cara redonda, por la que sienten dolor en el cartílago de sus patas y tienen las orejas plegadas ya que no logran sostenerlas.
Estas características además disminuyen su esperanza de vida dado que suelen padecer enfermedades crónicas como la artritis.
La veterinaria Gudrun Ravetz, también opinó al respecto señaló y en una entrevista con la cadena BBC que “no hay una excusa para la cría de un animal que sabemos que va a sufrir una enfermedad dolorosa y duradera incurable. Hay un montón de gatos magníficos por ahí en casas de rescate en busca de hogar permanente y serían mascotas encantadoras”.
La iniciativa aún no ha sido aprobada en Países Bajos pero el Ejecutivo prepara dos medidas paralelas que podrían entrar en vigencia próximamente. La primera pesará sobre la prohibición de tenencia de este tipo de animales mientras que la segunda, sobre su venta, importación o exposición.
Por último, el Ministro aclaró que “las personas que ya tienen en casa un animal con esa característica que esté prohibida pueden quedarse con ese animal hasta que muera”.
(Con información de Europa Press)
Seguir leyendo: