Los datos de inflación publicados este viernes en los distintos países que integran la Unión Europea (UE) mostraron crecimientos y cifras récord, como en el caso de Suecia.
Hungría registró en diciembre pasado una inflación interanual del 24,5%, la más alta en la UE, que en el caso de los alimentos se situó en el 44,8% y en el de las fuentes de energía en el 55,5%, informó hoy la Oficina Central de Estadísticas (KSH).
La tasa de inflación media a lo largo de 2022 fue del 14,5%, una cifra no registrada desde 1998, aseguró la KSH, siendo la subida de los alimentos la más pronunciada con un 26% a lo largo del año.
En diciembre y en comparación con el mismo mes de 2021 el precio del gas por tubería aumentó incluso un 97,8%, la leña un 58,6% y la electricidad el 27,8%.
El dato de inflación húngaro supera en la UE al de Letonia (20,7%), Lituania (20%) y Estonia (17,5%).
El Gobierno del ultranacionalista Viktor Orbán ha introducido un precio tope a varios alimentos, entre otros, el aceite, los huevos o la leche.
En noviembre pasado el Gobierno decidió eliminar el precio tope de los combustibles, lo que se refleja en la fuerte subida de diciembre.
El Ejecutivo planea mantener los precios tope de los alimentos al menos hasta mayo, a pesar de que analistas apuntan a que estos alargan y profundizan la inflación.
Por su parte, en Suecia la inflación interanual se situó en diciembre en el 12,3%, el nivel más alto desde febrero de 1991, informó este viernes la Oficina Central de Estadística (SCB) de este país nórdico.
La subida de la inflación, medida como índice de precios al consumo (IPC), estuvo impulsada por los altos precios de la electricidad y por los tipos de interés al alza.
Los tipos de interés contribuyeron a la subida de la inflación con 2,3 unidades porcentuales, explicó en un comunicado el SCB.
Los precios de la electricidad aumentaron un 28,8% comparados con el mes anterior, mientras los de los alimentos se han incrementado un 18,6% a lo largo del año.
La inflación se había situado en noviembre en el 11,5%.
Mientras que Francia registró una inflación media del 5,2% durante el 2022, 3,6 puntos porcentuales más que en el año anterior, según anunció este viernes el Instituto Nacional de Estadística (Insee) al confirmar que la cifra interanual de subida de precios de diciembre fue del 5,9%.
La inflación se vio impulsada por la aceleración de los precios de la energía (23,1% frente al 10,5% de 2021) y de la alimentación (6,8% tras el 0,6% de 2021).
En “menor medida” contribuyeron a esta subida los productos manufacturados (3% frente al 0,3% de 2021) y de los servicios (3% contra el 0,3 del año anterior), según detalló el Insee en un comunicado.
El organismo encargado de las estadísticas oficiales confirmó también que la inflación interanual se situó en el 5,9% en diciembre pasado, como ya había anticipado en sus reportes de cifras provisionales a comienzos de este mes de enero.
Ello supuso tres décimas menos que en noviembre de 2022, gracias sobre todo a una ralentización de los precios de la energía.
Si se toma de forma aislada el mes de diciembre, los precios en Francia retrocedieron un 0,1%, después de la subida del 0,3% en noviembre.
(Con información de EFE)
Seguir leyendo: