Siete personas murieron y dos más resultaron heridas después de que el autobús donde viajaban cayera desde un puente a un río en la región de Galicia (noroeste de España).
El accidente se produjo el sábado poco antes de las 21:30 hora local, en un puente en el municipio de Cerdedo-Cotobade, situado en Galicia, cerca de la frontera con Portugal, indicaron el domingo las autoridades locales.
En total, nueve personas se hallaban en el autobús, que unía las localidades de Lugo y Vigo. Entre los accidentados, dos pudieron ser rescatados vivos: el conductor del vehículo, de unos sesenta años, y una mujer.
La búsqueda de la última víctima se reanudó hoy después de que el hijo de única pasajera superviviente, junto al conductor, avisase de que su madre le había comunicado que faltaba esa mujer, con la que viajaba a bordo.
Este dato lo confirmó el delegado del Gobierno en Galicia, José Miñones, en su visita de esta jornada al lugar en el que el autocar se accidentó.
El domingo se dio por finalizado de manera provisional el operativo de búsqueda con los datos de seis fallecidos y dos supervivientes, a lo que hoy se suma la séptima y última víctima mortal.
La cantidad de usuarios que estaban dentro del bus no estaba clara, dado que esta cifra la dio el conductor, en base a sus recuerdos de las paradas, y la rectificó en varias ocasiones, debido a sus recuerdos de las paradas.
El autocar, con nueve personas en su interior, se salió de la carretera y cayó al río Lérez tras destrozar la valla de protección del puente que lo atravesaba.
Seis muertos son de nacionalidad española y una de las víctimas es peruana, todos con edades entre 21 y 70 años. Fueron localizados, tres de ellos en el interior del autobús y los otros en diferentes tramos del río Lérez, y sus cuerpos han sido retirados por los equipos de rescate.
Las dos primeras víctimas fueron encontradas cerca de los restos del vehículo, unas horas después del accidente. Los cuerpos de las otras cuatro personas fueron recuperados en el río Lérez, donde se produjo la tragedia, según la Guardia Civil.
Hasta entonces, el número de personas desaparecidas era incierto, ya que el conductor tenía “dudas” sobre cuántos viajaban en el autobús en el momento del accidente.
La caída del autobús fue de unos 75 metros, y la primera alerta fue de un particular que vio la barrera de protección destrozada, aunque se asomó al puente y no fue capaz de ver nada. Minutos después llegó una llamada desde dentro del propio autobús, que detallaba lo ocurrido y permitió iniciar el operativo de rescate.
Lluvias torrenciales
“Los equipos de salvamento confirman que fueron rescatadas todas las personas que estaban desaparecidas”, indicó el servicio de Emergencias de Galicia en Twitter, precisando que el dispositivo de búsqueda iba a concluir.
Según la Guardia Civil, cinco españoles oriundos de Galicia figuran entre los fallecidos, entre ellos una madre y su hijo. La sexta víctima mortal es una mujer de nacionalidad peruana que cuidaba de un anciano en Cerdedo-Cotobade.
Entre los pasajeros del autobús había personas que visitaban a familiares detenidos en el centro penitenciario de Monterroso, ubicado en el centro de Galicia, con motivo de la Nochebuena, señaló el diario regional La Voz de Galicia.
Las operaciones de salvamento fueron complicadas por las intensas lluvias caídas durante la noche, que provocaron un aumento del caudal del río, donde se precipitó el autobús, pero también por relieve de la zona.
Bajo el puente hay “un desnivel bastante grande” de “treinta metros”, confirmó un portavoz de la Guardia Civil. En un comunicado, los rescatistas mencionaron que incluso alcanzaba los 75 metros en ciertas partes.
Esas condiciones obligaron a suspender las labores de búsqueda varias horas y retomar el domingo por la mañana, con un equipo que incluía unidades de rescate de montaña, espeleólogos y un helicóptero.
El siniestro “es una tragedia sin paliativos”, declaró a los medios el alcalde de Cerdedo-Cotobade, Jorge Cubela, quien destacó el “profesionalismo” de los rescatistas desplegados en el lugar del suceso.
Se abrió una investigación para determinar las causas del accidente, todavía desconocidas. Según el portavoz de la Guardia Civil, el conductor del autobús tiene experiencia al volante y, además, dio negativo en el control de alcoholemia y drogas.
“No sabemos las causas todavía con certeza”, pero “es verdad que las condiciones meteorológicas eran muy malas ayer (sábado) por la noche”, confirmó el presidente de la comunidad de Galicia, Alfonso Rueda.
(Con información de AFP y EFE)
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