Ucrania denunció este jueves que las tropas de Vladimir Putin han llevado al territorio de la central nuclear de Zaporizhzhia, que controlan desde el pasado 4 de marzo, varios sistemas de lanzacohetes múltiples Grad y advirtió de que Rusia prepara “otra provocación”.
En un comunicado en Telegram que recoge la agencia Ukrinform, Energoatom, la empresa estatal de energía nuclear, señala que los sistemas fueron trasladados ayer a la central nuclear y que las tropas invasoras los colocaron cerca de la unidad de potencia número 6 de la central.
En concreto, los sistemas se encuentran directamente junto al territorio de la instalación de almacenamiento de combustible gastado de la planta, donde previamente habían construido en secreto algunas “estructuras de protección”, “violando todas las normas de seguridad nuclear y de radiación”, según indica la empresa.
Energoatom considera que lo más probable es que las tropas rusas bombardeen con los sistemas Grad la orilla opuesta del río Dnipro, en particular, las ciudades de Nikopol y Marhanets, directamente desde el territorio de la central nuclear, “escudándose en las unidades de energía y las instalaciones de almacenamiento de combustible gastado”.
Energoatom hace así un llamamiento a la Organización Internacional de la Energía Atómica (OIEA) y a toda la comunidad nuclear internacional, “al informar sobre el despliegue adicional de sistemas Grad” directamente en el recinto de la central.
“Una vez más instamos a la creación de una zona de seguridad dentro y alrededor de la planta con su completa desmilitarización y desocupación”, agrega.
La Unión Europea (UE) consideró este jueves que hay “fuertes indicios” de que las fuerzas rusas han cometido crímenes de guerra en los territorios bajo su control en Ucrania, de acuerdo con un reciente informe de la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos.
“Estos hallazgos esbozados en el último informe son muy graves, y por desgracia no hacen sino confirmar aún más los peores supuestos de las atrocidades que están cometiendo las fuerzas invasoras de Rusia en las ciudades y regiones ucranianas que están o estaban bajo su control”, indicó el portavoz comunitario de Exteriores Peter Stano, en la rueda de prensa diaria de la Comisión Europea.
El portavoz del alto representante de la UE para Asuntos Exteriores, Josep Borrell, aludió a datos incluidos en el mencionado informe de la ONU, que aborda los asesinatos de civiles cometidos en zonas de Ucrania que estaban bajo la ocupación militar rusa hasta abril.
Según el documento, al menos 441 civiles fueron asesinados por las fuerzas rusas en los primeros días de la invasión, en ejecuciones sumarias y ataques en decenas de ciudades de tres regiones de Ucrania.
“Acogemos con satisfacción los esfuerzos de la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos por documentar la violación de los derechos humanos y del derecho internacional humanitario en el contexto de la agresión ilegal rusa contra Ucrania”, dijo Stano.
El portavoz enfatizó que, como afirma el informe de la ONU, hay “fuertes indicios de que las ejecuciones extrajudiciales documentadas hasta ahora pueden equivaler al crimen de guerra de asesinato intencionado”.
“Esto es por supuesto sólo una de las muchas violaciones cometidas por los soldados invasores rusos en suelo ucraniano”, concluyó.
El alto comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, Volker Türk, dijo este miércoles desde Ginebra que los observadores que tiene la organización en Ucrania reciben a diario nuevas informaciones sobre crímenes de guerra.
“La cantidad de víctimas civiles, así como el gran daño y destrucción a la infraestructura civil, incluidos hospitales y colegios, es brutal”, comentó, tras haber vuelto de un viaje de cuatro días a Ucrania en el que visitó zonas liberadas.
Los crímenes más frecuentes atribuidos a las fuerzas rusas son las ejecuciones sumarias, torturas, detenciones arbitrarias, desapariciones forzadas y violencia sexual contra niños, mujeres y hombres, indicó.
(Con información de EFE)
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