Las Fuerzas Armadas de Ucrania han asegurado este miércoles haber derribado más de una decena de drones de fabricación iraní utilizados por Rusia en el marco de su ofensiva, desatada el 24 de febrero por orden del presidente ruso, Vladimir Putin.
“Durante la noche del 6 al 7 de diciembre de 2022, tras tres semanas de pausa, las fuerzas ocupantes rusas atacaron nuevamente Ucrania con drones kamikaze ‘Shahed’”, ha dicho la Fuerza Aérea ucraniana a través de su cuenta en Telegram. “Un total de catorce aparatos fueron detectados, llegados aproximadamente en dirección sureste”, ha detallado.
Así, ha indicado que “las unidades de defensa aérea del Mando Oriental destruyeron once ‘Shahed’ y otros tres drones en dirección oriental fueron derribados por la defensa aérea de las Fuerzas de Tierra”, antes de agregar que “un drone ‘Orlan-10′ y otros dos drones enemigos de un tipo por especificar”.
Además subrayó que “durante el último día, la aviación de las Fuerzas de Defensa han llevado a cabo 22 bombardeos contra áreas de concentración de personal, armas y equipamiento militar, así como cuatro bombardeos contra posiciones de los sistemas de misiles antiaéreos del enemigo”.
Por su parte, el gobernador de la región de Zaporizhzhia, Oleksander Staruj, ha denunciado que el manos tres personas, entre ellas una adolescente, han resultado heridas durante las últimas horas en ataques rusos con misiles y drones. “El enemigo ha atacado dos comunidades del distrito de Zaporizhzhia con drones y misiles ‘S-300′”, ha manifestado.
“En una de las aldeas, dos viviendas han sido destruidas y otras ocho han sufrido daños”, ha apuntado, antes de agregar que en la segunda “una casa ha sido destruida y diez han resultado heridas”. “Podría haber habido muchas más víctimas y destrucción si las Fuerzas de Defensa no hubieran derribado media docena de drones”, ha dicho.
La campaña rusa de ataques contra la infraestructura civil de Ucrania fue objeto este martes de duras condenas por prácticamente todos los miembros del Consejo de Seguridad de la ONU, que advirtieron del dramático invierno que se avecina para la población del país.
“Rusia continúa su agresión y está usando el invierno como un arma de guerra”, denunció Nicolas de Rivière, el embajador ante Naciones Unidas de Francia, que junto a México convocó al máximo órgano de decisión de la organización para abordar la situación humanitaria en Ucrania.
Según De Rivière, los ataques “sistemáticos” contra la infraestructura ucraniana en un momento en que las temperaturas se sitúan bajo cero “reflejan un claro deseo de Rusia de hacer que los ucranianos sufran, de privarles de agua, calefacción y electricidad con la esperanza de minar su resistencia”.
El representante de México, Juan Ramón de la Fuente, destacó que los bombardeos contra la red eléctrica, unidos al frío, están creando una nueva dimensión en la crisis humanitaria que se vive en Ucrania.
(Con información de Europa Press)
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