Las autoridades de Turquía anunciaron en la madrugada de este lunes que detuvieron a la mujer sospechosa de haber perpetrado el atentado suicida en la concurrida avenida Istiklal de Estambul, que dejó seis muertos y culpó del ataque al Partido de los Trabajadores de Kurdistán (PKK)
El ministro del Interior, Suleiman Soylu, informó a los medios que la persona que presuntamente dejó la bomba que causó una explosión que dejó al menos seis muertos y 81 heridos fue detenida por el Departamento de Policía de Estambul.
“La persona que lanzó la bomba ha sido detenida. La organización terrorista PKK/PYD está en el marco de nuestros hallazgos. En un futuro cercano, les mostraremos una recompensa en la que aquellos que nos causaron este dolor pueden experimentar más y más dolor”, dijo Soylu en declaraciones recogidas por el canal de televisión TRT.
El PKK es considerado una organización terrorista por Turquía, Estados Unidos y la Unión Europea, y mantiene una lucha armada contra el gobierno turco desde los años 1980.
Ankara lo ha señalado en el pasado como responsable de sangrientos ataques en territorio turco.
El líder de la cartera ministerial vinculó a través de este mensaje a la atacante con el grupo armado PKK, a quien señaló como responsable último del incidente.
“La cara del terror es amarga, pero continuaremos esta lucha hasta el final sin importar el costo. Especialmente la falta de sinceridad de nuestros llamados aliados, quienes esconden a todos los terroristas que parecen ser amigos nuestros en su propio país, o dar vida a terroristas en las áreas que ocupan, en las áreas que gobiernan, y enviarles dinero desde sus propios senados, es obviamente insincero”, lamentó Soylu.
El atentado suicida perpetrado este domingo en la avenida Istiklal provocó la muerte de seis personas, mientras que 81 resultaron heridas, encontrándose dos de ellas en estado grave.
La avenida Istiklal ya había sido el escenario de ataques en el pasado, especialmente durante los años 2015-2016, cuando Estambul y otras ciudades como Ankara, la capital, sufrieron una serie de atentados.
Esos ataques, reivindicados por el grupo terrorista Estado Islámico, mataron a casi 500 personas e hirieron a más de 2.000.
La policía acordonó el lugar por temor a una segunda explosión. Un imponente despliegue de las fuerzas de seguridad bloqueó también el acceso al barrio y a las calles aledañas.
“Estaba a unos 50-55 metros de distancia, de repente hubo un ruido de explosión. Vi a tres o cuatro personas en el suelo”, declaró a la AFP un testigo, Cemal Denizci, de 57 años.
“La gente corría presa del pánico. El ruido era enorme. Había humo negro. El ruido era tan fuerte, casi ensordecedor”, informó.
La explosión, que provocó llamas, se escuchó de lejos y desencadenó un movimiento de pánico, según imágenes difundidas en las redes sociales.
En las imágenes se ve un gran cráter negro y varios cuerpos tendidos en el suelo.
En el barrio vecino de Galata, muchas tiendas decidieron cerrar y algunos transeúntes, que llegaron corriendo desde el lugar de la explosión, tenían lágrimas en los ojos, según un periodista de la AFP.
<b>Prohibido difundir imágenes</b>
El Consejo Superior de Radiotelevisión (RTÜK) prohibió rápidamente a los medios difundir imágenes del ataque para “evitar sembrar el miedo, el pánico y la agitación en la sociedad y servir los objetivos de organizaciones terroristas”.
También se restringió el acceso a las redes sociales tras el atentado, según Netblocks, una organización que monitorea el acceso a internet.
La avenida Istiklal, de 1,4 km y que significa “Independencia”, está situada en el barrio histórico de Beyoglu. Es una de las vías peatonales más famosas de la ciudad, donde acuden tanto locales como turistas.
El atentado de este domingo, que se produce siete meses antes de unas elecciones presidenciales y legislativas cruciales, generó una ola de condenas y expresiones de solidaridad.
“Nuestros pensamientos están con el pueblo de Turquía en estos difíciles momentos”, dijo el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel.
El secretario general de la OTAN, de la que forma parte Turquía, expresó su “solidaridad con nuestro aliado”, al igual que Suecia, candidata a ingresar en la Alianza Atlántica, y la Casa Blanca en Washington.
En Grecia, país con el Turquía mantiene tensas relaciones, el Ministerio de Relaciones Exteriores “condenó inequívocamente el terrorismo y expresó sus sinceras condolencias al gobierno y al pueblo turco”.
(Con información Europa Press y AFP)
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