Putin firmó un decreto para “proteger los valores rusos tradicionales”: persecución, censura y la amenaza de los “países hostiles”

El documento busca un mayor control del Kremlin sobre la sociedad rusa y muestra su visión conservadora y reaccionaria del mundo

Guardar
Vladimir Putin, presidente de Rusia
Vladimir Putin, presidente de Rusia (Sputnik/Sergey Bobylev/Pool via REUTERS)

El presidente de Rusia, Vladimir Putin, aprobó este miércoles por decreto lo que serían los “fundamentos de la política estatal para la preservación y el fortalecimiento de los valores espirituales y morales tradicionales rusos”, informó agencia estatal rusa Tass.

Con el decreto, el Kremlin busca aumentar su control sobre la población y tener mayores herramientas para perseguir a todo aquel que no se ajuste a los llamados valores tradicionales. Además, el documento es una muestra del giro cada vez más tiránico de Moscú en donde los medios de comunicación independientes, la disidencia política y la población LGBTQ serán cada vez más perseguidos.

El decreto, que entra en vigor hoy, se centra en ocho ejes: valores tradicionales; trabajo juvenil; reformas en el campo de la educación; acciones de los Estados Unidos y países hostiles; patriotismo y servicio a la patria; creación de un aparato estatal de propaganda; interacción entre las autoridades y los medios; y propaganda gay.

Valores tradicionales

Rusia considera los valores tradicionales como la base de su sociedad. “La Federación Rusa considera los valores tradicionales como la base de la sociedad rusa, lo que hace posible proteger y fortalecer la soberanía de Rusia, garantizar la unidad de nuestro país multinacional y multiconfesional, salvar al pueblo de Rusia y desarrollar el potencial humano“, dice el documento.

Según el decreto, Rusia creará en el mundo la imagen de un país que protege los valores tradicionales. Y entre los objetivos para lograr esto está “la preservación y el fortalecimiento de los valores tradicionales, asegurando su transmisión de generación en generación”, así como “contrarrestar la propagación de la ideología destructiva”.

Sin embargo, no aclara lo que quiere decir por “ideología destructiva” y ante la ambigüedad del concepto se teme que se use para perseguir a la disidencia o a todo aquel que no se ajuste a los llamados “valores tradicionales”.

De acuerdo con el documento, los valores tradicionales se pueden ajustar cada seis años.

“La implementación de la política estatal en esta área contribuirá a la preservación y el crecimiento del pueblo de Rusia, la preservación de la identidad civil de toda Rusia, el desarrollo del potencial humano, el mantenimiento de la paz civil y armonía en el país, el fortalecimiento de la ley y el orden, la formación de un espacio de información seguro, la protección de la sociedad rusa contra la propagación de ideologías destructivas, el logro de los objetivos de desarrollo nacional, el aumento de la competitividad y el prestigio internacional de la Federación Rusa”, dice el documento.

Activistas por los derechos de
Activistas por los derechos de los homosexuales gritan consignas durante una marcha tradicional del Primero de Mayo en San Petersburgo (AP Photo/Dmitry Lovetsky)

Acciones de los Estados Unidos y países hostiles

Según el decreto, Estados Unidos, junto con conjunto de países denominados hostiles, representan una de las mayores amenazas a los valores tradicionales.

“Los valores tradicionales se ven amenazados por las actividades de organizaciones extremistas y terroristas, ciertos medios de comunicación de masas, las acciones de los Estados Unidos de América y otros estados extranjeros hostiles, una serie de empresas transnacionales y organizaciones extranjeras sin fines de lucro, así como así como las actividades de ciertas organizaciones e individuos en el territorio de Rusia”, dice el documento.

Propaganda gay

De acuerdo con el decreto, la llamada propaganda gay está clasificada como un sistema de valores que es destructivo para la sociedad rusa.

“El impacto ideológico y psicológico en los ciudadanos lleva a plantar un sistema de ideas y valores que es ajeno al pueblo ruso y destructivo para la sociedad rusa, incluido el cultivo del egoísmo, la permisividad, la inmoralidad, la negación de los ideales del patriotismo, el servicio a la Patria, la continuación natural de la vida, el valor de una familia fuerte, el matrimonio, las familias numerosas, el trabajo creativo, una contribución positiva de Rusia a la historia y la cultura mundial, la destrucción de la familia tradicional mediante la promoción de la no relaciones sexuales tradicionales”, dice el decreto.

Según el documento, la propaganda gay tiene un impacto ideológico que es destructivo sobre los ciudadanos y se convierte en una amenaza para la situación demográfica del país.

Sobre este punto, la Duma del Estado o Cámara Baja de Rusia aprobó a finales de octubre por unanimidad en primera lectura un proyecto de ley que prohíbe la “propaganda de relaciones sexuales no tradicionales”, conocida como ley anti-LGBT.

FOTO DE ARCHIVO. Un hombre
FOTO DE ARCHIVO. Un hombre fuma mientras pasa por delante de un mural, que fue pintado en un edificio en apoyo al ejército ruso (REUTERS/Evgenia Novozhenina)

Patriotismo y servicio a la Patria

Para Rusia, el patriotismo y el servicio a la patria, son ideales morales que se clasifican como valores tradicionales. Sin embargo, luego de la invasión a Ucrania, estos ideales no se han visto reflejados dentro de la población masculina, donde muchos hombres se niegan a unirse al ejército para pelear contra el país europeo.

“Los valores tradicionales son pautas morales que forman la visión del mundo de los ciudadanos rusos, transmitidas de generación en generación, que subyacen a la identidad cívica de toda Rusia y un espacio cultural único del país, fortaleciendo la unidad cívica, que han encontrado su manifestación única y original en el desarrollo espiritual, histórico y cultural del pueblo multinacional de Rusia”, señala el documento.

Interacción entre las autoridades y los medios

El decreto establece que la interacción entre las autoridades y los medios de comunicación se convertirá en una herramienta para fortalecer los valores tradicionales en Rusia. No obstante, la intervención del Estado en los medios de comunicación perjudica su independencia.

Sobre este punto, desde hace unos años atrás el Kremlin intensificó su persecución y censura contra los medios y periodistas críticos con el poder. Con este nuevo decreto se teme que el avasallamiento sea aún mayor.

“Una herramienta de información para la implementación de la política estatal para preservar y fortalecer los valores tradicionales es la interacción de las autoridades públicas con los medios de comunicación y comunicación masiva con el fin de popularizar y promover los valores tradicionales”, señala el decreto.

Dmitry Muratov, premio Nobel de
Dmitry Muratov, premio Nobel de la Paz y editor en jefe del periódico de investigación Novaya Gazeta, perseguido por el Kremlin (REUTERS/Evgenia Novozhenina)

Trabajo juvenil

“La política de Estado para la preservación y fortalecimiento de los valores tradicionales se implementa en el campo de la educación y la formación, el trabajo con la juventud, la cultura, la ciencia, las relaciones interétnicas e interreligiosas, los medios de comunicación y la comunicación masiva, y la cooperación internacional. Autoridades del Ejecutivo Federal participarán en la ejecución de dicha política de Estado, teniendo a su cargo los asuntos de defensa, seguridad del Estado, asuntos internos, seguridad pública y demás autoridades públicas dentro de sus atribuciones”, dice el documento.

Reformas en el campo de la educación

“A fin de preservar y fortalecer los valores tradicionales, para evitar la propagación de ideologías destructivas, las reformas en el campo de la educación y la formación, la cultura, la ciencia, los medios de comunicación y las comunicaciones de masas deben llevarse a cabo teniendo en cuenta las tradiciones históricas y la experiencia acumulada por la sociedad rusa, sujeto a una amplia discusión pública”, señala el decreto.

Creación de un aparato estatal de propaganda

De acuerdo con el decreto, Rusia formará una orden estatal de obras para preservar y fortalecer los valores tradicionales. En este ítem derivaría en la formación de un aparato propagandístico para adoctrinar a la población rusa y ejercer mayor influencia en el mundo.

“Formación de un orden estatal para la investigación científica, la creación de materiales informativos y metodológicos (incluidas las crónicas cinematográficas y otros materiales audiovisuales), las obras literarias y artísticas, la prestación de servicios destinados a preservar y popularizar los valores tradicionales, así como garantizar la calidad y control de la implementación de este orden estatal “, dice el decreto.

Además, este órgano tendría como fin luchar contra los supuestos intentos de falsificar la historia y combatir la propagación de ideología considerada por el poder como destructiva.

Seguir leyendo:

Guardar