El yuan chino cayó a un mínimo de 15 años respecto al dólar el martes después de que el presidente Xi Jinping reforzara su poder con un tercer mandato al frente del Partido Comunista.
El yuan onshore (CNY), que circula dentro de China, perdió un 0,6% hasta los 7,3084 por dólares, su nivel más bajo desde diciembre de 2007.
Por su parte, el yuan offshore (CNH), que circula fuera de China continental y es comercializado más libremente que la divisa doméstica, se situó en 7,3735 por dólar, el más bajo desde que en 2010 se creara este tipo de cambio para las transacciones internacionales.
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Como otras divisas importantes, el yuan chino se resintió del agresivo tono de la Reserva Federal estadounidense, que ha empujado a los inversores hacia el dólar.
Además, los mercados se mostraron inquietos por un posible mantenimiento de la política de “cero COVID” después de que el presidente Xi Jinping consiguiera un tercer mandato en el poder y copara los puestos de mandos del partido con aliados y protegidos.
El yuan y la Bolsa de Hong Kong se derrumbaron el lunes a pesar de unos datos de crecimiento económico mejores de lo esperado para el tercer trimestre.
Después de que el líder del PCCh y del país lograse copar la cúpula directiva de la formación con sus fieles y dejar fuera de ella a otras facciones consideradas más reformistas o liberales tras obtener un inédito tercer mandato, la Bolsa de Hong Kong experimentó ayer su mayor caída en una sola jornada desde 2008, con un desplome del 6,36%.
Xi fue elegido nuevamente como Secretario General del gobernante Partido Comunista, informó la agencia estatal Xinhua, inclinando al país de vuelta a un gobierno unipersonal después de décadas de poder compartido entre la élite.
“Quiero agradecer sinceramente a todo el partido por la confianza que ha depositado en nosotros”, dijo a periodistas en el Gran Salón del Pueblo de Beijing tras el anuncio de la votación a puerta cerrada.
Prometió “trabajar con diligencia en el cumplimiento de nuestros deberes y probar la valía de la gran confianza en nuestro partido y nuestro pueblo”.
Xi también fue designado nuevamente como jefe de la Comisión Central Militar de China.
Con los nombramientos, el líder de 69 años tiene prácticamente asegurada su designación como presidente de China por un tercer período, que se anunciará formalmente durante las sesiones legislativas anuales de marzo.
Su designación puso fin al congreso del Partido Comunista, celebrado en Beijing a lo largo de la última semana, que también aprobó un profundo reacomodo en el poder con la renuncia de varios antiguos rivales de Xi.
(Con información de AFP y EFE)
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