El jefe del organismo de la ONU para refugiados advirtió el lunes que más personas podrían verse forzadas a dejar sus hogares en Ucrania tras los ataques rusos con misiles en Kiev y otras ciudades ucranianas.
“El horror de lo que ocurrió hoy (lunes) en Ucrania (...) es inexcusable”, declaró el Alto Comisionado de la ONU para Refugiados, Filippo Grandi, a periodistas en Ginebra.
“El bombardeo de civiles, de casas (...) de infraestructura no militar en una forma indiscriminada en muchas ciudades a lo largo de Ucrania significa que la guerra se ha vuelto más difícil para los civiles”, indicó.
“Temo que los eventos de estas últimas horas van a provocar más desplazamientos”, acotó.
Rusia lanzó el lunes su mayor ola de ataques en meses en Ucrania, una represalia por la explosión el fin de semana de un puente que conecta a Rusia con la península de Crimea.
El puente es un símbolo de la anexión rusa de Crimea en 2014.
Desde que Rusia invadió Ucrania el 24 de febrero, más de 7,6 millones de ucranianos salieron a Europa en busca de asilo.
Aunque muchos de ellos han regresado, más de 4,2 millones de ucranianos se registraron para obtener la condición de protección temporal en países de la Unión Europea.
Casi siete millones más de personas han sido desplazadas dentro del país, según la Organización Internacional para las Migraciones (OIM).
Grandi indicó que la gente podría movilizarse dentro de Ucrania tras los ataques del lunes, que según Kiev dejaron al menos 14 muertos y casi 100 heridos.
Rusia utilizó 83 misiles y 17 drones de fabricación iraní en los bombardeos efectuados este lunes contra varias ciudades ucranianas, según un informe del viceministro de Defensa de Ucrania, Hanna Maliar.
Según un portavoz de la fuerza aérea ucraniana, citado por el diario Kyviv Independent, 43 de los misiles lanzados fueron derribados por las defensas ucranianas.
El viceministro de Defensa de Ucrania confirmó también la utilización por parte de las fuerzas rusas de 17 drones tipo Shahed, fabricados por Irán, lanzados desde Bielorrusia y Crimea.
El uso ruso de drones iraníes en Ucrania demuestra dos cosas: la creciente participación de Teherán en este sector y ciertas deficiencias de la industria rusa de drones. Irán ha entregado a Rusia centenares de drones a mediados de este año, según la Casa Blanca, y éstos ya comenzaron a ser desplegados en el frente.
“El Shahed 136 es un drone suicida bastante grande y de bajo costo de fabricación. Alcanza su objetivo por coordenadas de GPS introducidas antes del despegue. Luego avanza de manera autónoma, volando bastante bajo y alcanza un objetivo fijado a cientos de kilómetros”, sostuvo Pierre Grasser, investigador francés asociado al Centro Sirice de París.
El dron Shaded 136 (“testigo” en persa) es un aparato aéreo teledirigido y no tripulado, desarrollado por la compañía HESA y que entró en servicio en 2021. Con un rango de acción de 2.500 kilómetros, se utilizan exclusivamente para ataques selectivos y los explosivos que pueden transportar detonan al impactar contra su objetivo.
(Con información de AFP)
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