El presidente francés, Emmanuel Macron, acogió este lunes en París a su par de Emiratos Árabes Unidos, Mohamed bin Zayed al Nahyan, para conversar especialmente sobre el abastecimiento de combustible, en plena alza de precios.
Vestido con un atuendo tradicional, el dirigente emiratí, conocido como MBZ, recorrió la alfombra roja desplegada en el Palacio del Elíseo, sede de la presidencia francesa, antes de saludar a su homólogo y a su esposa, Brigitte Macron.
En la agenda, un almuerzo de trabajo antes de una cena de gala en el Gran Trianón del Palacio de Versalles, en presencia de un centenar de invitados. El mandatario recibirá también la Gran Cruz de la Legión de Honor.
MBZ efectúa en París su primer viaje internacional desde que sucediera en mayo a su hermanastro, el jeque Jalifa, al frente de este país del Golfo, rico en petróleo y que incluye Abu Dabi y Dubái.
Ambos países firmaron varios acuerdos energéticos durante la primera jornada de la visita de Estado, entre ellos un acuerdo de asociación estratégica a nivel global para la cooperación a nivel energético y a largo plazo entre los dos países. El objetivo es abrir la vía a nuevos proyectos comunes a nivel industrial o de inversión en sectores como el hidrógeno, las renovables o la nuclear.
También se establece la posibilidad de crear un fondo común para la financiación de proyectos verdes en el sector energético.
Este acuerdo tiene una “doble importancia estratégica: Nos permite afrontar a los restos urgentes de la seguridad energética a corto plazo mientras preparamos un futuro sin carbono”, aseguró el ministro francés de Economía, Bruno Le Maire, en un comunicado de su Gobierno.
Además, TotalEnergies y la emiratí ADNOC anunciarán otro acuerdo para el suministro de gasóleo a Francia, aunque por ahora no se han divulgado cifras o plazos.
Esto se inscribe en el objetivo francés de diversificar sus fuentes de aprovisionamiento energético en el marco de la guerra de Ucrania, señaló la fuente francesa.
Emiratos exporta a la segunda economía de la Unión Europea productos petroleros refinados, pero no diésel. Las exportaciones en total se elevaron en 2019 a 1.500 millones de euros (1.525 millones de dólares al cambio actual).
Los jefes de Estado francés y emiratí también tenían en la agenda discutir además sobre sus “esfuerzos conjuntos” para fortalecer “la estabilidad y la seguridad” en Oriente Medio, especialmente sobre la negociación nuclear con Irán, según el Elíseo.
Defensores de derechos humanos, entre ellos la FIDH, la LDH y el Gulf Center for Human Rights (GCHR), llamaron a Macron a abordar la cuestión de los derechos humanos con su homólogo emiratí y a suspender la venta de armas a su país.
“Desde el inicio de la escalada del conflicto en Yemen, varias oenegés revelaron la presencia de material francés vendido a la coalición liderada por Arabia Saudita, de la que forma parte Emiratos”, escriben las ONG.
Las relaciones entre ambos países se estrecharon en los últimos años. Francia cerró en diciembre un contrato récord para vender 80 aviones de combate Rafale por 14.000 millones de euros y dispone además de una base militar en Abu Dabi.
(Con información de AFP y EFE)
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