Xi Jinping regresó a Wuhan, epicentro del COVID-19, y elogió la gestión china de la pandemia

El jefe del régimen realizó una gira por aquella ciudad donde se conocieron los primeros casos de coronavirus que se extendieron al mundo provocando

Guardar
El jefe del régimen chino,
El jefe del régimen chino, Xi Jinping, visitó nuevamente Wuhan, epicentro del COVID-19, este martes 28 de junio de 2022 (Xinhua)

6.33.2788 muertos. Esa es la cifra que publica la Universidad de Medicina John Hopkins, el prestigioso centro de educación científica que desde un inicio registró cada contagio y deceso del COVID-19 en todo el planeta. Esa enfermedad, originada en diciembre de 2019 en la ciudad china de Wuhan -provincia de Hubei- se extendió pronto por todo el país hasta cruzar fronteras. El régimen de Beijing demoró en alertar al resto de los países sobre el brote y las muertes comenzaron a multiplicarse.

Este martes, el jefe del régimen Xi Jinping retornó a esa ciudad que se convirtió en un símbolo de la pandemia y de las sospechas de ocultamiento por parte de las autoridades de Beijing. Es que allí funciona un laboratorio de alta peligrosidad que se dedica, entre otras cosas, al estudio de los coronavirus en los murciélagos, los animales que habrían sido portadores de la cepa que se extendió a todo el planeta entre 2020 y 2021 provocando millones de decesos. China no permitió un acceso total a sus instalaciones y dificultó el trabajo de los científicos que se acercaron allí para recolectar pruebas.

Ahora, Xi regresó al epicentro del COVID-19. De acuerdo a información publicada por el diario oficial China Daily, el jefe de estado elogió los avances en materia de seguridad de esa ciudad de la provincia de Hubei, en el centro de la nación, y destacó la manera en que se gestionó la pandemia del coronavirus. “Xi hizo hincapié en el fomento de tecnologías y sectores más avanzados, en la apertura de nuevas esferas de desarrollo económico y en la creación de nuevas ventajas en la competencia internacional”, señaló aquel medio estatal y agregó: “Al hablar de la lucha contra el COVID-19, Xi dijo que las medidas de respuesta y la política antiepidémica de China han protegido al máximo la vida y la salud de las personas”.

Si China hubiera adoptado la política de ‘inmunidad de rebaño’ o un enfoque de no intervención, dada su gran población, el país se habría enfrentado a consecuencias catastróficas, dijo Xi. El Comité Central del Partido Comunista de China formuló la política dinámica de cero-COVID basándose en la naturaleza y el propósito del Partido, así como en las condiciones nacionales del país, señaló Xi”, informó China Daily.

En su regreso a Wuhan,
En su regreso a Wuhan, epicentro del COVID-19, Xi Jinping elogió la gestión de la pandemia por parte del régimen de Beijing (Xinhua)

Lo cierto es que los datos oficiales distan de generar seguridad en el resto del mundo y el freno a la economía provocada por los continuos encierros de decenas de millones de personas bajo condiciones infrahumanas generan desconfianza e incertidumbre hacia el futuro. Las fuertes herramientas de censura que se registran en el país hacen imposible visibilizar las quejas de la población por las políticas.

Pero para Xi, las consecuencias económicas no son motivo de preocupación. “Incluso si hay algunos impactos temporales en la economía, no pondremos en peligro la vida y la salud de las personas, y debemos proteger a los ancianos y a los niños en particular. Si hacemos una evaluación global, nuestras medidas de respuesta COVID-19 son las más económicas y eficaces”.

Producto de las restricciones que ordenó el régimen de Beijing la economía global ha sufrido grandes pérdidas. Las cadenas de suministros se han visto afectadas severamente y los países han experimentado grandes frenos en sus producciones y aumentos alarmantes en alimentos y productos elaborados. La invasión de Rusia, socia de China, a Ucrania también ha alimentado esta tendencia.

El diario oficial del Partido Comunista -que encabeza el propio Xi Jinping- señaló también que el jefe del régimen pidió hacer los “máximos esfuerzos para promover un desarrollo económico estable y sólido”. Para ello ordenó a los comités del Partido y a los gobiernos de todos los niveles a que ayuden a resolver las dificultades de la gente y a reducir el impacto en la economía y en el trabajo y la vida de las personas.

Confiamos en nuestra capacidad para lograr un equilibrio entre la respuesta a la COVID-19 y el desarrollo económico y social, y nos esforzamos por lograr un rendimiento relativamente bueno en el desarrollo económico de este año”, concluyó Xi.

SEGUIR LEYENDO:

Guardar