El régimen chino confinó a más de 15 millones de personas en Shanghái para realizar pruebas masivas de coronavirus

El país aplica una política de “casos cero” para contener la pandemia, lo que conlleva drásticas medidas como las que se vienen aplicando en algunas ciudades en los últimos meses

Guardar
Personas hacen fila para realizarse test en Shanghái (REUTERS/Aly Song)
Personas hacen fila para realizarse test en Shanghái (REUTERS/Aly Song)

Las autoridades de Shanghái ampliaron los distritos que se verán afectados este fin de semana por el cribado masivo de pruebas para detectar casos de COVID-19, de tal manera que más de 15 millones de personas volverán a tener restringida su movilidad apenas una semana después de que concluyese un confinamiento de dos meses.

El jueves, sólo se contemplaba aplicar estas nuevas medidas a la zona de Mihang, pero este viernes se ha anunciado que serán otros siete distritos más. Las autoridades levantarán el confinamiento sólo en aquellas áreas donde no se detecten positivos por coronavirus.

China aplica una política de “casos cero” para contener la pandemia, lo que conlleva drásticas medidas como las que se vienen aplicando en algunas ciudades en los últimos meses. En el último día, el gigante asiático ha sumado apenas 73 nuevos positivos, de los cuales once corresponden a Sanghái, según la agencia Bloomberg.

El temor a nuevos confinamientos se extiende también a Pekín, ya que las pruebas masivas han detectado hasta este viernes más de una veintena de casos y más de 4.400 personas, consideradas contactos estrechos, han sido trasladadas a instalaciones de cuarentena habilitadas por el Gobierno.

El presidente, Xi Jinping, abogó el jueves durante una visita a la región de Sichuán por ceñirse a la política de ‘casos cero’ y llamó a dar prioridad a las medidas sanitarias, aunque también reconoció la necesidad de tener en cuenta criterios de desarrollo social y económico para las restricciones.

Trabajadores con trajes de protección en una calle tras el brote de COVID-19 en Shanghái (REUTERS/Andrew Galbraith)
Trabajadores con trajes de protección en una calle tras el brote de COVID-19 en Shanghái (REUTERS/Andrew Galbraith)

En otro orden, la Organización Mundial de la Salud (OMS) publicó un nuevo informe sobre los orígenes del COVID-19, en el que lamentan que aún faltan “datos clave que aún no están disponibles para comprender completamente cómo comenzó la pandemia de COVID-19″.

Los 27 expertos responsables de la elaboración del documento, dentro del Grupo de Asesoramiento Científico sobre los Orígenes de los Nuevos Patógenos (SAGO, por sus siglas en inglés), resaltan que “es necesario realizar más estudios para seguir con varias lagunas en nuestros conocimientos” sobre el SARS-CoV-2.

“Por ejemplo, la fuente del virus y su introducción en el mercado de Huanan (Wuhan) no está clara y aún no se ha determinado dónde se produjo el evento o eventos de contagio inicial. Es necesario examinar las muestras ambientales recogidas en puestos y desagües específicos del mercado en enero de 2020 que dieron positivo en zonas en las que se sabe que se vendieron animales vivos”, ejemplifica el SAGO.

Además, la OMS critica que aún “no se han completado los estudios de seguimiento para identificar las posibles fuentes animales de las que podría haberse originado la contaminación ambiental”, una tarea que debería ser responsabilidad de China.

Otros estudios “esenciales” para la OMS son “el mapeo detallado” del comercio de animales silvestres/domésticos vendidos en la ciudad de Wuhan y la provincia de Hubei, así como “el historial clínico y la seroprevalencia de anticuerpos contra el SARS-CoV-2 en humanos y animales de las granjas de origen de los animales vendidos en los mercados de Wuhan”.

“Se ha solicitado a China más información sobre los estudios de las pruebas de estos animales, el rastreo de estos animales hasta las granjas de origen y las investigaciones serológicas de las personas que criaron y vendieron/comercializaron estos animales”, explicó la OMS.

(Con información de Europa Press)

SEGUIR LEYENDO:

Guardar