El Gobierno de Moscú, mantiene cautivos a unos 2.500 soldados que fueron hechos presos en la acería de Azovstal, en la ciudad costera ucraniana de Mariúpol, cuando la urbe fue tomada totalmente por los rusos, informó el presidente de Ucrania, Volodímir Zelensky.
En un encuentro con periodistas que reproducen medios locales ucranianos, Zelenski reconoció, no obstante, que es difícil cuantificar exactamente el número de soldados que fueron capturados en la acería, tras soportar el bloqueo y los bombardeos rusos durante semanas.
“En cuanto a los prisioneros, hay más de 2.500. Es difícil decir con más precisión. Esta no es la cantidad de personas que abandonaron Azovstal cuando nosotros estábamos involucrados en este proceso”, señaló el mandatario ucraniano.
Zelensky recordó que la dirección principal de Inteligencia del Ministerio de Defensa de Ucrania está tratando el tema de la liberación de los soldados ucranianos aunque dijo que no podía, por el momento, ofrecer más detalles sobre este asunto.
Según él, los rusos “no torturan a los defensores ucranianos de Azovstal, porque no les conviene hacerlo”, ya que “nuestros combatientes se han convertido en figuras públicas”.
El ejército ucraniano estuvo defendiendo la ciudad de Mariúpol, a orillas del mar de Azov, durante más de 80 días.
La evacuación de los soldados ucranianos que se habían refugiado en las instalaciones de la planta siderúrgica de Azovstal, bloqueada por los invasores rusos, comenzó el 16 de mayo y duró varios días.
Por otra parte, el Gobierno de Japón añadió este martes dos bancos rusos y uno bielorruso a su lista de entidades sancionadas como castigo por la invasión rusa de Ucrania y prohibió exportar bienes que contribuyan a reforzar la infraestructura industrial de Moscú, dijo el Ministerio nipón de Exteriores en un comunicado.
La decisión de hoy afecta a dos bancos rusos, el Banco de Crédito de Moscú y el Banco Agrícola de Rusia, así como al Banco Bielorruso de Desarrollo y reconstrucción, medidas dirigidas a “contribuir a los esfuerzos internacionales por la paz en Ucrania”, según el Ministerio.
El portavoz del Ejecutivo, Hirokazu Matsuno, afirmó este martes en rueda de prensa que “con el objetivo de parar a Rusia lo antes posible y buscar el camino del diálogo, es necesario asistir a Ucrania y tomar medidas fuertes contra la Federación”, y apuntó que seguirán tomando medidas con base en el desarrollo de la situación.
En relación a las exportaciones, Japón solo señaló que se congelarían las de bienes que puedan reforzar la infraestructura industrial de Rusia, pero no aclaró ninguna medida concreta al respecto.
El aumento de sanciones de hoy se produce casi un mes después de que el Gobierno japonés anunciara otra ronda de sanciones contra Rusia, que incluían la congelación de activos de 141 personas, entre ellas el primer ministro del país, Mikhail Mishustin, y la prohibición de las exportaciones a 71 empresas rusas.
En sus tandas previas de sanciones, Japón decidió dejar de exportar semiconductores y componentes para microchips que pudieran ser empleados por la industria militar rusa, y entre otras categorías de productos, paralizó también las ventas de automóviles de lujo a Rusia.
(Con información de EFE)
SEGUIR LEYENDO: