El Consejo de Seguridad de Naciones Unidas se reunirá el martes a puerta cerrada para discutir la escalada de tensiones por la violencia entre israelíes y palestinos en Jerusalén, según indicaron este lunes fuentes diplomáticas. Francia, Irlanda, China, Noruega y Emiratos Árabes Unidos (EAU) fueron los países que solicitaron la reunión.
Una nueva ola de violencia dejó el domingo más de 20 heridos alrededor de la Explanada de las Mezquitas en Jerusalén, dos días después de que se registraran 150 heridos en otros enfrentamientos.
Según la policía israelí, a primera hora del domingo, “cientos” de manifestantes palestinos habían comenzado a acumular “piedras” en la explanada poco antes de la llegada de los judíos religiosos al lugar, considerado el más sagrado para el judaísmo y el tercero para los musulmanes.
Fue entonces que las fuerzas de orden israelíes intervinieron en la explanada, situada en la Ciudad Vieja de Jerusalén Este, para “desalojar” a estos manifestantes y “restablecer el orden”, precisó la policía. Testigos y socorristas indican que una decena de palestinos resultaron heridos en estos disturbios.
La Media Luna Roja Palestina informó que 19 palestinos resultaron heridos, algunos por disparos de balas de goma. Además, un hospital informó de otros siete heridos por lanzamiento de piedras en las afueras de la Ciudad Vieja.
Desde la toma y posterior anexión de Jerusalén Este por parte de Israel en 1967, algo no reconocido por la comunidad internacional, los judíos pueden acceder a la explanada en determinados momentos, pero no rezar en ella.
La oración se realiza normalmente en el Muro Occidental o de las Lamentaciones, aunque desde hace años los judíos religiosos rezan en secreto en la explanada.
Los últimos incidentes se produjeron cuando se celebraba el domingo la misa de Pascua cristiana, las oraciones por Pésaj, la pascua judía, y por el mes musulmán de Ramadán en la Ciudad Vieja de Jerusalén, confluencia a veces conflictiva de las tres religiones monoteístas.
Jordania, que administra el recinto de la mezquita, culpó el domingo a Israel de la nueva escalada de violencia, y el rey Abdalá II pidió al Estado judío que “ponga fin a las medidas ilegales y provocadoras que conducen a una mayor escalada”.
Este lunes se produjeron nuevos enfrentamientos entre musulmanes palestinos y la Policía israelí que ha intervenido para despejar la Explanada de las Mezquitas para la visita de fieles judíos. Es la tercera vez en una semana que se producen disturbios.
Los palestinos han intentado impedir la visita de los judíos, pero la Policía israelí utilizó balas de goma para obligarlos a refugiarse en la Cúpula de la Roca y la Mezquita de Al Aqsa. Varias ventanas del templo quedaron rotas.
“Las numerosas detenciones de los últimos días demuestran que la Policía de Israel no teme actuar con decisión y fuerza contra cualquiera que intente poner en riesgo la seguridad e incite a la violencia”, indicó el jefe de la Policía israelí, Yaakov Shabtai.
Este año la tensión se ha multiplicado porque el mes santo musulmán del Ramadán coincide con la Pascua judía y la Semana Santa cristiana y sus actos en la ciudad de Jerusalén.
Los no musulmanes tienen reservados unos horarios para visitar la Explanada de las Mezquitas y además tienen prohibido rezar en el lugar, según la normativa israelí. Los musulmanes quieren utilizar el lugar día y noche coincidiendo con el Ramadán, mientras los judíos más radicales han hecho llamamientos a ocupar el lugar durante la Pascua judía.
La Autoridad Palestina recordó las recientes resoluciones, como la de la UNESCO, que ratifican que “la mezquita es una mezquita para los musulmanes”.
En este contexto de creciente tensión, un cohete fue disparado hacia Israel este lunes desde el enclave palestino de la Franja de Gaza, y fue derribado por los sistemas de defensa israelíes, indicó el ejército israelí.
“Las sirenas resonaron en el área que rodea la Franja de Gaza. Un cohete fue disparado desde la Franja de Gaza hacia territorio israelí. El cohete fue interceptado por el sistema de defensa Cúpula de Hierro”, explicó el ejército en un comunicado.No se reportaron víctimas.
Hamas, el grupo terrorista que gobierna en la Franja de Gaza, advirtió el domingo que la mezquita de Al Aqsa, situada en la Explanada de las Mezquitas, “es nuestra y solo nuestra” y prometió defender el derecho de los palestinos a orar allí.
(Con información de AFP y Europa Press)
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