A través de una votación en el Congreso, Estados Unidos revocó oficialmente el jueves el estatus comercial de Rusia y Bielorrusia en respuesta a la guerra en Ucrania, abriendo así el camino a aranceles punitivos contra estos dos países. Además, votó a favor de convertir en ley el veto a la importación de petróleo ruso.
Esta medida, que fue presentada por el presidente Joe Biden a mediados de marzo, recibió un fuerte apoyo bipartidista en el Congreso. La Cámara de Representantes siguió el ejemplo del Senado horas antes, que aprobó ambas iniciativas de ley por unanimidad, con 100 votos a favor y ninguno en contra. Con el respaldo de ambas cámaras, se espera ahora que los dos proyectos de ley sean promulgados por el presidente Joe Biden.
Biden había anunciado la iniciativa en un discurso el mes pasado en el que argumentó que Rusia debe “pagar el precio” por el derramamiento de sangre en Ucrania, donde los rusos han negado las acusaciones de cometer atrocidades.
“Putin debe rendir cuentas absolutamente por los detestables y despreciables crímenes de guerra que está cometiendo contra Ucrania: las imágenes que hemos visto de ese país... son simplemente pura maldad”, dijo el líder de la mayoría en el Senado, Chuck Schumer.
El representante Richard Neal, demócrata por Massachusetts, dijo que ucranianos inocentes estaban siendo masacrados incluso mientras los legisladores se reunían.
“No tenemos tiempo que perder y debemos castigar de inmediato a Vladimir Putin”, sostuvo Neal. “Lo que hemos presenciado en Bucha en el transcurso de las últimas 72 horas justifica con creces las posiciones que hemos tomado antes y seremos más asertivos y enérgicos en el futuro”.
Las relaciones comerciales normales permanentes (PNTR), como son conocidas en Estados Unidos, es un principio clave de la Organización Mundial del Comercio, el llamado estatus de nación mas favorecida. Exige que los países se garanticen mutuamente un tratamiento arancelario y normativo igual.
Las últimas sanciones comerciales -que también se aplican a Bielorrusia, aliada de Rusia- culminan varias rondas de medidas destinadas principalmente a romper los lazos económicos y financieros de Moscú con el resto del mundo.
Han incluido la prohibición de las importaciones de petróleo ruso, el embargo de los activos de multimillonarios vinculados a Putin y la congelación de reservas del país.
Convertir en ley el veto a la energía rusa significa que la medida podría durar más tiempo, ya que Biden no tendrá el poder de retirar ese castigo sin el apoyo del Congreso.
El miércoles el país tomó medidas para bloquear las inversiones extranjeras en Rusia y en las empresas estatales y aplicó nuevas sanciones a los bancos y a los altos funcionarios del país.
El secretario de Estado, Antony Blinken, dijo a NBC News que los castigos globales habían sumido a la economía rusa en una “profunda recesión”.
“Y lo que estamos viendo es una probable contracción de la economía rusa de alrededor del 15%”, dijo.
Desde el punto de vista energético, EEUU depende mucho menos que Europa de Rusia y solo importa el 8% del petróleo que consume de ese país, por lo que puede sustituirlo con producción interna o importaciones de otras naciones.
Rusia tampoco es uno de los principales socios comerciales de EEUU, pero el intercambio bilateral es notable: en 2019, las exportaciones rusas al país norteamericano ascendieron a 22.300 millones de dólares, según la Oficina del Representante de Comercio estadounidense.
(Con información de EFE, AFP, AP)
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