Cuatro personas murieron este martes en un presunto ataque terrorista con arma blanca en un centro comercial de Beersheba (Israel), y al menos otras dos personas resultaron heridas en el incidente, según los servicios de emergencia.
El Magen David Adom (servicio nacional de emergencia y asistencia médica) se encuentra en el lugar de los hechos y la policía está registrando la zona ante la sospecha de que pueda haber otro prófugo. El atacante murió tras ser neutralizado por un transeúnte.
Los primeros informes indican que el atacante embistió primero a las víctimas y luego salió del coche y empezó a apuñalarlas. El atacante, identificado como Muhammad Alab Ahmed abu Alkiyan, es un beduino israelí de la ciudad de Hura que ha cumplido condena en cárceles israelíes en el pasado, según The Jerusalem Post.
Alkiyan fue detenido en 2015, junto con otros sospechosos, por apoyar y promover al ISIS entre los alumnos de una escuela en la que daba clases, según información del medio israelí.
Grupos militantes palestinos aún no han publicado declaraciones ni se han atribuido el atentado.
El jefe de la Policía de Israel, Kobi Shabtai, se dirigió al lugar de los hechos tras el ataque. Al parecer, el Shin Bet (servicio de inteligencia) se ha unido a la investigación.
El primer ministro israelí, Naftali Bennett, expresó sus condolencias a las familias de las víctimas y elogió el accionar de los civiles que dispararon al terrorista por mostrar “ingenio y valor y evitar más víctimas”. El político añadió que las fuerzas de seguridad están en alerta máxima y que el Estado actuará con mano dura contra los terroristas y quienes les ayuden.
Mientras que el ministro de Asuntos Exteriores, Yair Lapid, también expresó sus condolencias a las familias de las víctimas y dijo que “cualquiera que intente dañar a civiles inocentes debe saber que el Estado de Israel pondrá sus manos sobre él y lo perseguirá con todo el peso de la ley”.
Se trata del tercer ataque con arma blanca esta semana en Israel. El domingo, dos policías resultaron heridos en en el barrio de Ras al-Amud, en Jerusalén oriental. Mientras que el sábado, un hombre de 35 años fue apuñalado y herido levemente en la carretera de Hebrón, cerca de la Primera Estación de Jerusalén.
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