El jefe de la Administración Militar Regional de Sumy, Dmytro Zhyvytskyi, ha alertado este lunes sobre una fuga de amoníaco “altamente tóxico” en una planta química tras un ataque ruso a la ciudad de Sumy, en el noreste de Ucrania.
Zhyvytskyi hizo un llamado a todos los residentes en un radio de cinco kilómetros de la planta química para que busquen sótanos o apartamentos en alguna planta baja donde para evitar entrar en contacto con el producto químico.
“El gas, de fuerte olor, es más ligero que el aire. Es necesario dejar el área infectada perpendicular a la dirección del viento, y si no es posible salir del área de infección, procuren refugiarse en sótanos, o plantas bajas”, ha explicado el jefe de la Administración Militar Regional.
Más tarde, el Servicio Estatal de Emergencias ha indicado en su cuenta en Telegram que “el accidente con emisiones de amoniaco en la región de Sumy ha sido controlado”. “Los empleados de la empresa han empezado su trabajo habitual para restaurar el proceso”, ha resaltado.
El motivo de la fuga ha sido que un tanque con amoníaco ha resultado dañado después de un bombardeo de artillería por parte de las tropas rusos de la planta química de Sumy, según han asegurado autoridades locales a la agencia Ukrinform.
En las últimas semanas, el ejército ruso ha acusado a Ucrania de preparar un ataque químico de falsa bandera contra la población civil, según ha informado DPA.
Entretanto, el Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA) ha informado este domingo de que cerca de la mitad del personal que se encuentra trabajando en la central nuclear de Chernobyl ha podido “finalmente” rotar y regresar a sus hogares después de haber trabajado en el emplazamiento controlado por Rusia durante casi cuatro semanas.
Así lo ha informado la empresa nacional de energía ucraniana al OIEA, cuya dirección se había mostrado preocupada por la situación de los trabajadores de la central, que habían permanecido allí desde el comienzo de la guerra, en contra de las recomendaciones para la salud.
“La difícil situación del personal en la central nuclear de Chernóbil durante las últimas semanas ha puesto en peligro uno de los siete pilares indispensables de la seguridad nuclear y que establece que ‘el personal de explotación debe poder cumplir sus funciones de seguridad y protección y tener la capacidad de tomar decisiones sin presiones indebidas’”, ha explicado el organismo en un comunicado.
Las fuerzas rusas tomaron el control de la central nuclear de Chernóbil el pasado 24 de febrero, pero su personal ucraniano ha seguido gestionando las operaciones cotidianas en el emplazamiento, donde se encuentran las instalaciones de gestión de residuos radiactivos, sin ningún tipo de rotación.
(Con información de Europa Press)
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