Japón tiene previsto retirar su trato comercial favorable a Rusia como parte de las sanciones que viene adoptando contra Moscú por su invasión a Ucrania, según anunció este miércoles el Gobierno nipón.
“Tal y como señala la declaración del G7, se ha decidido emprender acciones para quitar el estatus de trato comercial favorable a Rusia, y estamos preparados para tomar más medidas sobre los productos importados desde Rusia”, dijo hoy en rueda de prensa el portavoz del Ejecutivo nipón, Hirokazu Matsuno.
El portavoz añadió que Japón “tomará medidas de forma adecuada” en este contexto, sin precisar cuándo exactamente iniciará los trámites para despojar a Rusia de su estatus favorable, para lo cual será necesario aprobar una enmienda legislativa en el parlamento nacional.
La cláusula de “nación más favorecida” es un acuerdo establecido para garantizar la no discriminación comercial entre los miembros de la Organización Mundial del Comercio (OMC).
Obtener este estatus supone que si se concede a un país una ventaja especial, como una reducción arancelaria en determinados productos, se debe hacer lo mismo con el resto de miembros, salvo excepciones.
Rusia se unió a la OMC en 2012 y, como uno de sus 164 miembros, Japón venía aplicando al territorio las mismas tasas arancelarias a las importaciones rusas que a otros estados participantes.
La decisión nipona de dejarle sin estatus preferencial afectaría principalmente a las importaciones de productos como el pescado y los mariscos, según adelantaron los medios locales.
Las importaciones japonesas de este tipo de productos desde Rusia ascendieron a 138.100 millones de yenes (unos 1.060 millones de euros) en 2021, en torno al 8,6 % del total, el tercer porcentaje más alto tras China (18,1 %) y Chile (8,9 %).
El valor total de las importaciones de Rusia a Japón ascendió a 1,54 billones de yenes el año pasado (11.560 millones de euros).
Las tasas sobre el gas natural licuado (GNL) y el carbón, las principales importaciones de Rusia a Japón, eran cero incluso antes del trato preferencial y por el momento el Gobierno no se plantearía una modificación de las mismas debido a su dependencia energética y a la participación de empresas niponas en explotaciones del sector.
La autosuficiencia energética de Japón ronda actualmente en torno al 11 % y su suministro tiene una alta dependencia externa.
Pese a que sólo el 3,6 % de las importaciones japonesas de crudo y el 8,8 % de las de GNL procedieron de Rusia en 2021, las empresas japonesas tienen fuertes vínculos e intereses con los proyectos energéticos del país vecino, especialmente en los de Sajalín.
(Con información de EFE)
SEGUIR LEYENDO: